II

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Después de cada pelea es normal que haya fiesta para festejar al ganador de la pelea, en este caso el enano de pelo negro.

¡Eh Yeol! Vamos al Caravan Palace, ¿vienes? —Preguntó Namjoon

—He tomado ya varios shots de tequila así que andando —Dije alzando al aire el pequeño vasito de vidrio

El Caravan Palace es un antro de muy mala caña, esta en un barrio lejano que apenas y tiene luces tenues por las calles ahí siempre se llevan a cabo las fiestas y otras cuantas cosas ilegales como carreras de autos, apuestas y por supuesto, venta de drogas.

Giré en un acto reflejo por la barra para ver si veía al enano de Blanca Nieves ni siquiera sé por qué lo hice.

—¿Me buscabas hermosa? —Dijo una voz muy familiar, el irritante de Hoseok, amigo y socio de Namjoon.

—¿Nam, has escuchado algo? —Dije posando una mano tras mi oreja a lo que Nam respondió con una carcajada

—Vamos hermosa, que ya llegó por quien llorabas, nena —Replicó poniendo su brazo sobre mi hombro

Hice un mohín de secarme lágrimas de mis mejillas y rodé los ojos.
La realidad es que desde que Namjoon conoció a Hoseok hace 7 años éste siempre me ha cortejado, me cae bien pero vamos, es un torpe.

Salimos del lugar y nos montanos en la Land Rover de Hoseok y nos dispusimos a ir a la dichosa celebración.
Pasados unos 20 minutos llegamos y de nuevo tan estúpida volteé a todos lados para ver si lograba encontrarlo.

—¿A quién buscas, Yeol? —Preguntó Sungi con perspicacia

—¡A ti, tonta! ¿A quién más? —Puse los ojos en blanco

Entramos al lugar que tenía muy buen ambiente, música de variedad retumababa por las paredes. Bajando las escaleras lo pude ver a él de mala gana sentado en la barra tomando ¿vodka? ¡niñata!

Fui al centro de la pista y tomando a Sungi de la cadera comenzamos a bailar una canción de moda, de esas que les gustan a las adolescentes de hoy en día y fue entonces cuando esa voz ronca se hizo presente.

—¡Alá! No me digas que eres lesbiana —Dijo el enano poniendo su mano en el pecho en modo de drama.

—¿Y qué? ¿Te pone o te duele? Tarado —Contesté de mala gana

—No me hagas reír —Miró de mala fe— No eres mi tipo, además, eres una niña

—Y tu eres un anciano así que ándate por allá y ve a buscar a una que te soporte. —Regresé al baile ignorándolo.

Terminó la canción y fuimos juntas a la barra, de camino Namjoon me jaló del brazo hasta los baños.

—No te acerques a el, Yeol.

—¿De qué hablas? —Cuestioné con molestia

—De Yoongi, no te acerques a el.

—¿Quién demonios es Yoongi, Namjoon? Habla claro —Me tomó de los hombros y me estampó contra el frío muro

—Agust D, el tipo que ganó hoy la pelea, no con el Yeol.

—Mira, soy tu amiga no tu hija y si quiero hablarle lo hago ¿bien?

—Si quieres andar con alguien pues ahí tienes a Jungkook, es un buen partido —Hizo una mueca extraña

—¿Tan buen partido que en el tablero de su auto esnifa cocaína? ¡Va! Que partidazo —Repliqué con sarcasmo rodando los ojos

т r o υ в l e м a ĸ e r ѕ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora