Eran las 6 de la mañana, no había podido dormir, estaba demasiado nerviosa por volver otra vez a empezar en el nuevo colegio. La señora Smith me dijo que si me despertaba temprano, a lo mejor su hijo me acompañaba al colegio, dado que el también asistía.
Me puse el uniforme del colegio, era una camisa blanca con un lazo de color rojo y una falda gris y también para los días de frio había un suéter de color gris pero aquel día hacia un calor espantoso, así que deje el suéter en su percha y salí corriendo para ver si podía llegar a tiempo para ver al hijo de la señora Smith.
Pero llegué tarde, salí del vecindario y me despedí del guardia de seguridad que amablemente me había dicho como llegar. Pero igualmente a medio camino me perdí, así que no me quedó otro remedio que ir por la calle preguntando a la gente por donde se iba, hasta que por fin vi un chico con el mismo uniforme y decidí seguirle.
Llevaba tres manzanas caminado detrás del chico, cuando por fin ya se veía el colegio a lo lejos de la calle. Llegamos a la puerta y el chico se giró, era moreno de piel y su pelo también lo era, llevaba un flequillo que no le llegaba a los ojos pero sin duda hacía que estos resaltaran por su color marrón intenso, el era alto, no estaba ni delgado ni gordo, y el uniforme le sentaba bastante bien. De repente dijo:
- ¡Hola!- dijo con una sonrisa amable. Yo continué caminando hacia la recepción - Chica, ¡te estoy ablando a ti! - Me paré, no sé por qué lo hice
-¿yo?- dije señalándome
-Sí tú, ¿Por que llevas siguiéndome como si fueras un detective? - Preguntó incrédulo
-pues... es que no sabía cómo llegar y como vi tu uniforme simplemente pensé que vendrías hasta aquí. Lo siento- me giré y salí corriendo hacia recepción.
En recepción me presentaron a mi tutor, era un hombre de mediana edad, con unas pocas de entradas y una sonrisa de oreja a oreja, pensé que sería un buen tutor, llevaba puesto un traje de color azul marino. Él se ofreció a llevarme hasta mi clase, subimos unas cuantas escaleras y se paró en el segundo piso. El pasillo el cual me encontraba era igual que el del sueño, las ventanas, las puertas, incluso los carteles. Me asomé por la ventana de la puerta y lo vi. Era igual que en aquel sueño, la clase, el profesor, y él. Estaba sentado al lado de la ventana; todo estaba sucediendo igual que en sueño, no me lo podía creer.
Después de unos minutos de desconcierto, me hicieron presentarme y me indicaron el sitio donde sentarme, estaba al final de la clase justo detrás del chico de la ventana. Durante las horas siguientes no podía parar de pensar en lo que había sucedido, ¿Cómo es que mi sueño se había vuelto realidad?
Pero el timbre hizo que volviera a la realidad, ya habían acabado las clases, era hora de irme a casa. Me daba vergüenza pero tenía que preguntar por un tal Mike Smith, me acerqué a una chica que parecía simpática para preguntarle y automáticamente me dijo que a mí no me importaba quien fuera; que borde había sido.
Al final acabé saliendo del colegio sola y encontrándome en la misma situación de antes. Empecé a caminar calle abajo (la única calle que sabía que tenía ir en esa dirección) hasta que llegué al primer cruce, no sabía a dónde ir, estaba confusa y no me acordaba por donde había venido. Cuando de repente alguien me puso la mano en el hombro, me giré asustada, era el chico de por la mañana.
-Hola chica rara- me dijo con una voz dulce
-hola...- todavía me costaba hablar en inglés.
-Te veo confusa ¿no sabes llegar a casa verdad?- no sabía como pero me había leído el pensamiento
-Sí...- agache la cabeza
-Bueno pues si me dices la dirección al lo mejor te puedo acompañar ¿qué te parece?- en un principio no pude entenderle y puse una cara rara, pero después me lo repitió más despacio para que pudiera entender.
Acepté y le dije donde vivía, el resto de los 10 minutos restantes hasta llegar a mi casa los pasamos en silencio, no sabía porque pero aunque estuvimos en silencio me alegré de estar con él. No sé cómo hubiera conseguido llegar si no me lo hubiera encontrado. Cuando llegamos, le hice una señal al guardia para que lo dejara pasar y me acompaño hasta casa. En la puerta nos despedimos y entré, fui al edificio donde nos alojábamos y me fui a mi habitación.
La verdad es que mi habitación se veía sosa, las paredes eran blancas y no había nada colgado en ellas, tal y como entrabas se veía los pies de mi cama y justo a la izquierda un armario, en frente había un gran cristal, que era una puerta corredera des de la cual se veía el final de la valla del recinto, pero había un pequeño espacio con césped para pasear y incluso había un almendro.
Me senté en la cama y encendí el móvil. John me había enviado un mensaje:
“¿Qué tal estás? Espero que te lo estés pasando bien allí, hoy era tu primer día ¿no? Espero que hayas hecho muchos amigos :)"
No sabía que contestarle, pero al final le acabé contando todo lo que me había pasado, sentía que podía confiar en él. Tan solo me dijo que confiara un poco más en mi misma y así conseguiría hacer amigas. La verdad es que agradecí el tener alguien con quien hablar.
Al día siguiente, lo volví a intentar, me puse el despertador pronto, me vestí corriendo y fui a ver si esta vez conseguía llegar antes de que Mike (el hijo de la señora Smith) se fuera, pero ya era demasiado tarde.
Salí de casa desanimada, otra vez tendría que hacer lo mismo. Pero no fue así, justo en frente mía estaba él, me vio y sonrió:
-Ei chica rara, ¿te acompaño?- asentí con la cabeza -Pero antes, me llamo Kai, ¿Cómo te llamas tu?
-Clara.- dije sonando lo más amigable que pude.
Y una vez presentados fuimos caminando juntos, me estuvo contando que hace fútbol en el equipo del colegio.
Llegamos a la puerta y cada uno ya tomó el camino hacia su clase, entré y me senté en mi sitió y empezó la clase. Las horas pasaron hasta que tocó el timbre, ya era hora de irse, me levanté y empecé a recoger cuando escuche:
- Chica rara, ¿nos vamos? - era Kai, había venido a buscarme.
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Para los lectores d esta historia, gracias por leerla. Espero que os haya gustado y si queréis podéis comentar como os gustaría como siguiera la historia.
Gracias por leerla ^.^
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la mariposa de alas blancas
Teen FictionEsta historia, narra la vida diaria de Clara una chica que no es guapa ni popular simplemente, a ella, no se le da bien hacer amigos ni es abierta con los demás. Debido a unas circumstancias Clara deverá superar situaciones incómodas y que la pondr...