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Era el silencio más doloroso que Suni había sentido junto a su gran amigo quien no se movía mientras miraba por la ventanilla del taxi que los llevaba rumbo a la casa del chino, trataba él de tomar todo con calma pero le era imposible el recordar la felicidad de Sehun con alguien más, fue entonces cuando se dio cuenta que nunca lo amó como Luhan a él y eso era lo que más le dolía pues el chino estaba sacrificando su tranquilidad para que Sehun fuera feliz y que nadie lo lastimara. Pronto el taxi se detendría frente al edificio de departamentos donde vivía Luhan, Suni pagó y salió con su amigo que aún estaba aturdido por la situación. Una vez adentro Suni trató de dejarlo tranquilo pero al salir ella del departamento Luhan enloqueció y comenzó a gritar y a aventar todo lo que se le atravesaba igual que aquel día, el día que Sehun decidió terminar con él. Exhausto por todo aquello se tiró en la cama y después de seguir llorando por unos minutos más se quedó profundamente dormido.

Aquel día quedó atrás y Luhan como podía trataba de sobrellevar las cosas, seguía yendo a su trabajo, ya estaba cerca de conseguir la negociación pues después de arduas semanas de búsqueda dio con la mano derecha de Lee Young, el señor Yun que de inmediato congenió mucho con Luhan por ser ambos de nacionalidad china así que accedió por completo a lo que Luhan le estaba pidiendo, por fin algo bueno surgía entre las penumbras de Luhan.

-Luhan el presidente Kim te espera en su oficina –le decía una linda secretaria al chino que estaba demasiado concentrado en su ordenador, después de 1 minuto se levantó de su escritorio mientras apagaba la computadora y se ponía su saco para dirigirse a la oficina del presidente Kim, una vez frente a la puerta tocó un par de veces para después escuchar una voz que le decía que pasara y al entrar se llevó la sorpresa de su vida al ver junto al presidente al chico de piel bronceada que semanas antes había chocado con él en la recepción del edificio, eso hizo que se quedara completamente inmóvil en el filo del tapete sin poder seguir caminando, esa mirada lo había cautivado por completo

-pasa chico no te quedes ahí –le decía el presidente Kim haciendo que Luhan saliera del abismo al que había entrado por ver los ojos de ese chico que no dejaba de mirarlo también

-disculpe señor –se inclinó -¿me mandó llamar?

-sí, anda toma asiento –el presidente le indicaba la silla y Luhan se sentaba nerviosamente

-lo escucho –trató Luhan que no le afectara tanto la presencia del chico

-pues verás, estoy muy contento con tu trabajo y quisiera que una vez terminado lo que estás haciendo siguieras trabajando en esta empresa –Luhan se llenó de nervios pues el ya no quería seguir ahí

-se lo agradezco presidente pero... -lo interrumpió

-espera no he terminado, ni siquiera te he dicho lo que te pienso ofrecer –el chino se quedó en silencio y dejó que hablara –mira mi hijo necesita a alguien que le ayude en la administración y pensé en ti, por cierto no te lo he presentado él es Kim Jongin, vicepresidente de KimKo, él está a cargo de toda la administración de la empresa y necesita a alguien de confianza para que le ayude en todo y pues hijo te he tomado mucha confianza porque has trabajado bien para mí, no me respondas ahora piénsalo y me dices tú respuesta después –Luhan miraba al chico que ahora sabia su nombre, Jongin. Esto era jugar con sus sentimientos pues por un lado quería deslindarse por completo de todo lo que tuviera que ver con el presidente Kim pero había algo que le atraía de Jongin, sabía que estaba jugando con fuego, sabía que no debía meterse en esa situación pero sentía una voz interior que le decía que se aferrara a él aunque solo lo había visto una sola vez ese chico le inspiraba confianza y aunque era hijo del presidente sentía que los sentimientos de ese chico eran completamente opuestos a los de su padre.

Sweet Lies // KaiLu (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora