Sweet Lies // KaiLu (TERMINADA)

10

Después de casi hora y media caminando por fin había llegado a su casa pero se detuvo antes de entrar, tenía el presentimiento que iba a estar Sehun esperándolo pues no le había contestado el teléfono así que decidió ir a casa de su amiga Suni que vivía a 4 calles, pero primero le marcó para cerciorarse de que estuviera en casa pues de vez en cuando optaba por quedarse con una amiga de su trabajo

-¿Qué pasa Luhan? ¿Estás bien? –se alertó la chica por la hora de la llamada

-si estoy bien, lo que pasa es que acabo de llegar de trabajar y no quiero entrar a mi departamento porque presiento que va a estar él –Suni miró el reloj que marcaba casi la 1 de la madrugada

-¿Cómo que acabas de llegar de trabajar? Ese Jongin ya no me está cayendo bien, te explota –se levantaba trabajosamente y se ponía sus pantuflas para acercarse a la ventana y lanzarle un juego de llaves a Luhan, había entendido que quería dormir con ella

-ahora te explico, gracias –colgó para entrar a la casa de la chica

-que maneras de despertar a tu amigamadrehermana –decía graciosa

-lo lamento, pero no quiero verlo –dijo tímidamente

-¿pero qué te hace pensar que está ahí?

-me marcó como 5 veces y no le conteste, mejor apague el teléfono

-seguro que está ahí sentado en la sala de tu casa, será mejor que te quedes aquí –Suni los conocía muy bien a los dos así que le quitó su saco y lo sentó en un sillón, de inmediato fue por cobijas y una almohada –ya sabes cómo acomodarte así que... -Suni le dio las cosas y lo miró tiernamente

-gracias Suni –le sonreía Luhan agradecido de verdad

-¿quieres algo? ¿Tienes hambre? –entonces Luhan recordaría que no había comido nada por estar hundido en el trabajo

-un poco –sonrió tímidamente

-ok deja te caliento un poco de comida  que quedó –Suni se dirigió a la cocina y Luhan la siguió -¿Por qué saliste tan tarde de trabajar? –le preguntaba mientras sacaba la comida del refrigerador

-pues se me acumuló el trabajo porque hoy no fue Jongin –Suni dejó lo que estaba haciendo para verlo de golpe

-¿Cómo que no fue?

-no, se reportó como enfermo –dijo serio y preocupado

-¿y ya fuiste a ver como esta?

-no...

-¿Estás loco? ¿Ya le marcaste mínimo? –Suni lo miraba molesta por la falta de atención con su jefe

-tampoco –Luhan inclinó la cabeza para recibir el regaño

-no te lo puedo creer Luhan, que desconsiderado con tu jefe, que no se pierda el interés, anda llámalo –de inmediato le dio su celular, Luhan no dijo nada solo tomo el teléfono y comenzó a marcar el número

-¿no crees que es tarde para llamarle? –decía Luhan mientras esperaba respuesta

-cuando se trata de algo como esto nunca que es tarde –decía Suni con cierta ilusión en sus palabras y con una media sonrisa

-¿bueno? –se escuchaba por el otro lado de la bocina

-hola, ¿Jongin? –preguntaba tímido el chino

-hola Luhan ¿Qué tal? –la expresión en la voz de Jongin había cambiado notoriamente

-perdón que te llame a estas horas pero quería saber cómo estabas –Luhan se mordía su labio inferior por los nervios

-estoy bien gracias, perdón por no avisarte ¿está todo bien?

-si todo perfecto –decía Luhan sonriente

-¿Por qué me llamaste a esta hora? –se interesó Jongin

-bueno pues porque apenas pude

-¿acabas de salir de la empresa? –Jongin se sorprendió muchísimo

-casi

-¿se te junto el trabajo por mi culpa verdad? –hubo un silencio incomodo

-no te preocupes está bien, lo importante es tu salud –le decía Luhan noblemente

-estoy muy apenado contigo Luhan, te prometo que te voy a pagar esto que has hecho por mi culpa –se disculpaba una y mil veces Jongin

-no es necesario –le decía Luhan apenado –bueno te dejo descansar solo quería saber que estuvieras bien –seguía Luhan

-gracias por llamar, ahora estoy mejor, mañana nos vemos ahora si a primera hora y no hagas planes en la tarde porque vamos a ir a un lugar –Luhan se llenaba de ilusión

-está bien, nos vemos mañana –cuando colgó miró a Suni como lo miraba de manera tan romántica que Luhan se sonrojo

-es la escena más romántica que he presenciado, de verdad –decía ella entre suspiros

-basta déjame en paz –Luhan se dirigía al baño para evadir a Suni y sus comentarios cursis entonces sería interrumpida por el timbre de la puerta

-¿Quién será a esta hora? –se preguntó entonces Luhan saldría como bala del baño

-¡no abras, va a ser él! –entró en crisis nerviosa

-tu escóndete, si es él lo echo de aquí y listo –Luhan se encerró en el baño y Suni escondió el portafolio de Luhan, abrió la puerta para toparse efectivamente con los casi 1.85 metros de Sehun

-hola Suni –saludaba Sehun mientras Suni trataba de fingir asombro

-¿tu? ¿Qué haces aquí?

-¿puedo pasar? –Sehun trataba de mirar hacia adentro

-tú no tienes nada que hacer aquí –quiso cerrar la puerta pero Sehun la empujó y entró a la fuerza

-¿a quién escondes? ¿Es Luhan verdad? –miraba para todas partes

-claro que no, él está en su casa

-no está, vengo de allá

-¿para que lo sigues buscando? No fue suficiente el daño que le causaste que quieres seguir acosándolo, eres de lo peor –Suni comenzaba a gritarle

-no pienso discutir eso contigo, tú no sabes cómo estuvieron las cosas –se molestaba Sehun

-pues me gustaría saberlo –Sehun enmudeció y miró fijamente a Suni, sintió la necesidad de contarle todo a ella y desahogarse pero no pudo

-¿Qué me vez? –se molestaba

-solo dile a Luhan que aún lo sigo amando y que nunca lo voy a dejar ir –sin decir más salió de la casa de la chica dejándola muy agobiada, entonces Luhan saldría con lágrimas rodando por sus mejillas

-¿Por qué me hace esto? –miraba a Suni con pucheros, entonces ella correría a abrazarlo

-no lo sé, pero te prometo que lo voy a averiguar, ese Sehun se guarda algo lo pude ver y estuvo a punto de decírmelo pero algo lo detuvo

-¿Qué crees que sea? –preguntaba Luhan tratando de buscar respuestas

-no lo sé, no quieroprecipitarme –Suni dejó a Luhan descansar en la sala mientras se comía su tazóncon ramen, fue una noche muy difícil para él pues no podía dormir por pensar enSehun y su acoso, quiso llorar pero lo hizo silenciosamente para no despertar aSuni sin saber que ella tampoco estaba durmiendo, pues esa duda también laestaba consumiendo a ella.