-bien pues espero que ya tengas información –el presidente Kim lo miraba con ojos codiciosos
-pues verá, es una persona que está más cerca de lo que creíamos –Luhan estaba sudando frío
-vaya, que sorpresa, dime su nombre quiero negociar con él –el presidente se acomodaba su corbata
-su nombre es... Oh Sehun –hubo un silencio incomodo, Luhan no tenía el valor de mirar a los ojos al presidente pues se sentía tan mal de entregar al hombre que tanto había amado
-¿no me digas que se trata de tu tan querido amigo Sehun? –el presidente se llevaba las manos a la cara mientras miraba con asombro al chico
-al parecer... -Luhan prefería mirar hacia todas partes menos al presidente
-vaya, vaya esto sí que es una gran sorpresa, el hijo del oficial Oh quien lo diría –comenzó a reír de manera grotesca y burlesca haciendo que el chino lo mirara por el entre cejo, estaba muy molesto por todo eso, por Sehun, por su forma de ser y por el presidente
-¿Qué va a hacer? –preguntó Luhan mirando por fin al presidente
-pues esto sí que me tomó por sorpresa, voy a hablar con él y si no accede a negociar pues me veré obligado a tomar otro tipo de acciones –Luhan estaba temblando, sentía que su alma estaba quebrándose por pedazos
-cualquier cosa cuente conmigo –Luhan se levantó de inmediato para salir
-espera hijo, necesito que me digas en donde puedo encontrarlo –Luhan se detuvo dándole la espalda al presidente
-trabaja en el despacho de arquitectos G.G. el que está a unas cuantas calles de aquí –no dijo más y se dirigió a la puerta, el presidente obviamente notó la incomodidad de Luhan así que lo dejó ir mientras levantaba la bocina del teléfono para comenzar a actuar. Luhan pasó de largo por la oficina de Jongin hasta llegar a las escaleras que llevaban a la azotea, necesitaba pensar en todo eso, se recargó en el barandal que estaba en el borde del edificio mientras miraba los demás edificios, el aire soplaba fuerte y el sol alumbraba más que de costumbre pero nada le lastimaba más que sus propios actos, sabía que Sehun iba a salir lastimado, todas las cosas que había hecho por él se habían derrumbado, no encontraba la explicación para que Sehun haya vuelto al negocio sucio a menos que... -tal vez lo amenazaron –Luhan pensó en voz alta haciendo que su miedo por que saliera lastimado creciera más
-¿a quién amenazaron? –Jongin aparecía detrás de él haciendo que Luhan se sobresaltada demasiado
-¡Jongin! Mierda me asustaste –lo miraba agitado, literalmente estaba temblando
-¿estás bien? –Jongin lo miraba con recelo
-sí, estoy bien no te preocupes, solo salí para tomar un poco de aire –Luhan trataba de poner la mejor de sus sonrisas
-me preocupas Luhan, de verdad si necesitas algo solo dímelo quiero que me tengas toda la confianza –Jongin era tan bueno que Luhan no pudo soportarlo y corrió a abrazarlo, Jongin de momento no supo que hacer pues había sido una reacción muy precipitada
-Jongin te amo –solo pudo decirle eso, Jongin sonrió y comenzó a acariciar su espalda
-también yo te amo Luhan
-prométeme que pase lo que pase siempre vas a estar conmigo y que confiaras en mí –Jongin no entendía porque Luhan de pronto le empezaba a decir todo eso
-claro que si Luhan lo sabes –Luhan se separó de él para verlo a los ojos
-siempre confía en mi –le repitió ahora mirándolo a los ojos
-como no confiar en ti si eres un ángel –Jongin acariciaba sus mejillas lentamente haciendo que Luhan sintiera un nudo en la garganta, quería desaparecer de ahí y llevarse a Jongin a un lugar donde nadie pudiera hacerles daño, estaba cansado de todo eso y solo quería amar a Jongin sin mentiras.
En los siguientes días el presidente Kim había intentado en reiteradas ocasiones acercarse a Sehun pero no podía por alguna u otra razón y eso comenzaba a desesperarle así que decidió usar a Luhan como carnada, sabía perfecto que Luhan y Sehun se apreciaban mucho así que una vez más le pidió al chino que intercediera por él
-pero señor... -replicaba Luhan en la oficina del presidente
-no hay pero que valga, siento que me está evadiendo ya sabe que lo estoy buscando y por eso no me quiere ver, el me conoce y por eso hace esto, cítalo en un restaurant y entonces yo llego en tu lugar, sé que contigo no se va a negar –esto era demasiado para Luhan –yo me encargo de que Jongin no sepa nada –era claro que el presidente sabía que había un romance entre su hijo y Luhan
-señor... -Luhan se sintió apenado
-anda Luhan ¡HAZLO! –le exigió, Luhan estaba realmente atado de manos
-está bien pero deme tiempo –decía resignado
-claro pero que sea lo más pronto que puedas pues estoy perdiendo mucho dinero todos los días –dinero, dinero, era la única palabra del presidente Kim.
Esa noche Luhan habló con su amiga Suni y le contó todo, estaba desesperado
-ese maldito hombre es despreciable –Suni no podía creer en la situación que se encontraba Luhan
-tengo miedo de que Sehun salga lastimado y peor aún tengo miedo que Jongin se entere en las cosas que estoy metido, que sepa que no soy el ángel que él dice que soy
-tranquilo Lu, veras que pronto toda esta pesadilla va a acabar, trata de que Jongin no te note nervioso porque eso empeoraría todo
-es que me cuesta trabajo, estoy seguro que ya sospecha algo pues todos los días me pregunta que si estoy bien
-¿ves lo que te digo? –se preocupó Suni
-tal vez lo mejor va a ser alejarme de Jongin –Luhan sintió que sus ojos se llenaban de lagrimas
-estás loco, eso jamás Luhan
-no soy digno de él
-basta Luhan deja de decir idioteces –Suni corrió a abrazar a su amigo, sabía que necesitaba ayuda y Suni no se iba a quedar con los brazos cruzados. Ella tenía un amigo que sabía de investigación cibernética y le prometió recopilar un buen paquete de información sucia del presidente Kim para así refundirlo en la cárcel, iba a ser muy complicado y corrían el riesgo de ser detenidos si se enteraban que estaban espiando información confidencial de la empresa pero era eso o seguir esclavizado por las ordenes y amenazas del presidente Kim, Luhan quería salir de ese abismo.
Era viernes por la mañana, había llovido durante la noche así que era una mañana fresca y el cielo se veía limpio, Luhan ahora iba en el autobús que lo llevaba a Gangnam-Gu, ahora no iba con Jongin en su auto deportivo pues esta vez no iba al grupo KimKo, caminó un poco más hasta llegar a G.G. Arquitect, el presidente Kim iba a absorber toda la atención de Jongin para que éste no se diera cuenta de su ausencia pues desde temprano lo citó en la empresa para que Luhan pudiera irse solo más tarde. Estaba nervioso pero estaba decidido, entró al pequeño edificio de 4 pisos y llegó a la recepción
-que tal buen día bienvenido –una linda secretaria saludaba a Luhan
-que tal bien día, busco al arquitecto Oh Sehun –dijo Luhan con mucha seguridad, desde que habló con Suni sintió mucha confianza de seguir adelante
-piso 2 a mano izquierda está su oficina –Luhan agradeció y subió por el elevador y aunque solo eran 2 pisos para el parecieron 100, se abrió y caminó hacia donde le habían indicado hasta pararse en la única puerta que había por ese lado del pasillo, pudo ver en grandes letras en la puerta "Oh Sehun arquitecto" era ahora o nunca, sus piernas temblaban, tenía su discurso preparado pero estaba expectante a lo que él pudiera decirle pues habían pasado ya muchos meses desde la última vez que se vieron y era algo que Sehun sospecharía sin lugar a dudas.
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Sweet Lies // KaiLu (TERMINADA)
Fanfiction¿Hasta donde estarías dispuesto a mentir por amor? Luhan un chico normal se ve obligado a llevar una doble vida para proteger a Sehun su expareja pero en el camino encuentra el amor en Jongin a quien tiene que mentirle para que no salga lastimad...