Apariencia II

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Ya es por la tarde, y me encuentro mucho mejor. Justo cuando pienso en llamar a algún amigo para salir, me llama Fran. 

Al contestarle me asusto.

-Al, vente ya a la plaza. Tiene pinta de que va a pasar algo, ha venido Isma a hablar con Dani.

-Mierda. -Me limpio la sudor de la frente con la mano- Ya vengo.

Empiezo a vestirme mientras cuelgo el movil, cojo pantalones limpios y una camiseta Nike. Cojo las llaves y corro hacia la puerta de casa. 

Una vez estoy en la calle, salgo pitando hacia arriba, dónde a un par de manzanas está la plaza en la que siempre está Dani fumando. Al llegar, veo el gran árbol que hay en el medio del parque rodeado de bancos, y justo allí están Dani y Fran, pero al ver a Isma allí me cabreo. Empiezo a caminar con paso firme hacia él, mientras lo señalo con rabia. Isma se gira y alerta a los démas. Intenta mostrar tranquilidad, pero su postura tensa lo delata.

-¿Qué haces?- me grita mientras lo cojo del cuello de la camiseta negra.

- ¿Porque está aquí? Miro a Dani, que lo observa todo desde el banco. Y despues vuelvo a girarme hacia Isma- ¿Qué estás haciendo?

- Me debe dinero- Me coje de la muñeca para apartar mi mano de su cuello- Solo vengo aquí para que me lo devuelva.

- No es verdad Isma, yo nunca te he pedido nada, ¡nunca le compraría a nadie como tu! -Dani se levanta enfadado mientras levanta un brazo- ¡Vete por dónde has venido idiota!

Dani empuja a Isma y yo lo hecho fuera.

- Espero no volver a verte por aquí, -le grito mientras se marcha-y menos con tus amigos. 

Me giro y saludo a Dani. El se me queda mirando como si quisiera pedirme perdón, avergonzado. Es normal, soy mayor que él. Supongo que se sienten un poco intimidados por mí en algunas situaciones.

- No podéis dejar que os intimide este tío. -cruzo los brazos.

- Nos busca, quiere provocar. -dice Fran-

- Sí, pero mira como corre cuendo llega Al - Exclama Dani mientras se levanta y se pone bien la sudadera color veige- ¿Te quedas, Al?

- No, ya me voy para casa.

Me voy, sin decir nada más. No me ha gustado esta situación, quiero olvidarme de todo esto.

Cuando ya estoy en casa me voy directo a la ducha. Me pongo el agua bien fría y dejo que me relaje. Al acabar, me paro a mirarme al espejo, observándome, mientras me analizo... Me quedo tan absorto que empiezo a ver como se me deforma la cara y me pongo triste. Veo a alguien familiar, que no és como yo. Su piel es gris, y se le marcan los huesos de la cara. Sus facciones pierden gracia y se vuelve un ser monótono y desgraciado. Me siento fatal por dentro, vacío. Noto lo que piensa: nada. Me mira con odio, con unos ojos tan penetrantes que me hacen sentirme mal. 

Necesito un cambio.





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