CAPITULO V
Llego el lunes, Anne ya se encontraba lista para marcharse y comenzar una nueva vida. Le parecía algo muy duro el tener que despedirse de sus amigos más cercanos y sus maestras pero sobre todo de su querido amigo Kendall. Sus tíos llegarían a las 9:00 AM por ella. Tenían un buen trayecto que recorrer antes de ir a casa. Tenían pensado mostrarle parte de la cuidad para que la pequeña niña fuera adaptándose otra vez a esa clase de vida y para que pudiera distraerse de tanta tristeza que la envolvía. Pues sabían que los primeros días serian difíciles y que le costaría adaptarse a una vida lejos de su mejor amigo, pero los tíos harían todo lo que puedan para hacer que Anne sea feliz.
Antes de que Anne se marchara decidió hablar una última vez con Kendall para poder despedirse. El se encontraba en su horario de clases por lo cual tuvo que salirse unos minutos para poder despedirse de Anne. Mientras sus tíos ya se encontraban en la sala de espera Anne, se despedía de Kendall y sus amigos cercanos.
-No es un adiós para siempre vendré a visitarte en cuanto pueda. Repuso Anne -Quiero que estés bien y que te esfuerces mucho. Te quiero mucho.
Los niños se dieron un cálido abrazo mientras Kendall le decía.
-Sí, no te preocupes estaré bien, y espero te vaya mucho mejor en tu nueva vida y venme a visitar lo más pronto que puedas. También te quiero.
Kendall se marchaba nuevamente a sus clases. Mientras que Anne, se despedía de sus compañeras de habitación y sus maestras dándoles un abrazo y diciéndoles que les deseaba suerte. Ya camino a la recepción donde sus tíos la esperaban pensaba en cómo había cambiado su vida y se dijo –Es increíble como las cosas pueden cambiar de la noche a la mañana- sabia que le costaría adaptarse a su nueva vida.
Estando ya con sus tíos lista para salir del orfanato, le dijo la señora Morrison:
-¿Estas lista para empezar una nueva vida y divertirte lo mas que puedas?
-¡Por supuesto! Aunque estoy un poco nerviosa de lo que vaya a ocurrir a partir de este momento. Repuso Anne.
Afuera del orfanato se encontraba una camioneta SUZUKY negra. Era de los tíos y en ese empezaría el recorrido de su vida.
Dentro del auto todos, el Sr. Morrison en el asiento del conductor a la par la Sra. Morrison y en el asiento trasero la niña quien veía por la ventana las calles de la gran ciudad de New York, viendo edificios altísimos, todo tipo de personas caminar por las amplias calles de la ciudad, tiendas de ropa, cosméticos, zapatos, joyerías, etc. Empezó su camino por la nueva vida, todo lo que veía le llamaba mucho la atención y un brillo impecable había en sus ojos de tanta alegría. Pidió a sus tíos que pasaran por un lugar para comer y ellos asintieron.
Entraron a un buffet, en Bergenline Ave, West New York, donde podían pedir la comida que se les antojara. Y como era de esperarse la Sra. Morrison, como toda mujer que cuida su figura pidió una ensalada fresca acompañada con un aderezo agridulce, sushi y una limonada fresca para un día caloroso como ese; el Sr. Morrison pidió camarones con sala barbacoa, ensalada de coditos y sushi, acompañada con una copa de vino; la niña, pidió alitas de pollo empanizadas, un aderezo de chipotle y jugo de naranja y como postre una porción de pastel de chocolate.
Se sentaron fuera del centro del bufete en un lugar donde se podía admirar la cuidad y que les pegara la brisa del verano. Mientras comían hablaban de los planes que tenían para la niña, de la escuela a la que asistiría, de la casa y de toda una vida llena de lujos y comodidades a la estaba por empezar.
Al terminar la merienda volvieron al auto pero esta vez se dirigían hacia Central Park, New York.
Era el parque más bonito de la cuidad, muy grande y con diversas flores de todo tipo y colores, rodeado de arboles que le favorecían sombra al lugar. Con personas caminando de un lugar a otro, algunas se encontraban en un picnic, otras tomando fotografías. Anne, y sus tíos parquearon el auto cerca del parque y empezaron su recorrido en el disfrutando de la agradable sensación de estar allí, admirando la belleza del lugar.
-Es muy bonito aquí, jamás había venido. Exclamo Anne.
-Sí, es un lugar muy bonito y agradable. Podemos venir las veces que quieras, contesto el tío.
-Quisiera que nos tomaros una fotografía para ponerla en mi habitación y otra para poder llevársela a Kendall cuando vaya a visitarlo.
-¡Claro que sí! ¿Dónde quieres que la tomemos? Contesto nuevamente el tío.
Anne, señalo un lugar donde había grama bajo la sombra de unos árboles donde se podía apreciar la vista de los edificios de la ciudad. –Justo ahí. Exclamo.
Así fue, se pusieron en posición para la foto; parados bajo el árbol dejando a Anne en medio de los dos. Le pidieron ayuda a una adolescente que les tomara la foto. Pasaron las horas y volvieron al auto nuevamente esta vez ya para su nuevo hogar. Había pasado un día muy bonito con sus tíos pero se sentía agotada y solo quería descansar. La casa quedaba en Deerfield, Massachusetts. Era una casa muy grande y tenía un jardín que se veía muy cuidado en la entrada. Estaba pintada de color celeste opaco. Aun lado tenía la cochera. Era de dos platas y había muchas personas trabajando para la familia; desde sirvientas hasta guaruras que se ocupaban de mantener aseada y protegida la casa. Por dentro, estaba amueblada y decorada con detalles finos y bien ordenados, se veía limpia. Tenía la sala principal. A un lado la cocina y el comedor, al otro el estudio del Sr. Liam Morrioson y una pequeña biblioteca. En la planta de arriba estaban las habitaciones, una para huéspedes, otra donde dormían los tíos y la de la niña.
Anne, al entrar por primera vez a su habitación se quedo asombrada al ver lo bonita que la habían decorado para ella.
-¿Quieres que te ayudemos a desempacar o prefieres hacerlo mañana? Pregunto la tía de Anne amablemente.
-Prefiero hacerlo mañana, me siento demasiado agotada ha sido un día muy bonito pero me siento cansada. Exclamo la niña –Gracias por darme este tipo de experiencias que ayudan a distraerme. Añadió.
-De nada pequeña. Asintió la tía mientras acariciaba la mejía. Ponte ropa para dormir y descansa. Mañana será un gran día. Buenas noches Anne. Beso su frente y la dejo sola en la habitación.
Anne antes de dormir pensó en Kendall –estoy tan lejos de ti. No sabes la falta que me haces- se dijo. Se dirigió a su maleta y saco la pequeña carta que Kendall le había dado. Se sentó a la orilla de la cama y la leyó antes de dormir.
Al terminar de leerla la guardo en un mueble con llave junto a su cama y se dirigió a la ventana de su habitación, vio el cielo estrellado que la ponía aun más nostálgica y susurro: -buenas noches querido amigo-
En el orfanato, Kendall estaba deprimido. Lo contrario de Anne, el había tenido un día difícil. Recordaba los momentos que pasaba con ella y su concentración en las clases no era igual.
Desde ese día la vida de ambos niños cambio. No todo iba a ser felicidad para Anne y tristeza para Kendall.
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Mentes Criminales
AdventureSINOPSIS Mentes criminales es una historia de dos personas unidas por una sed de venganza. Ya que cuando eran unos niños una pandilla llamada "The Tiger" que era muy activa asesinaron a sus padres y ellos quedaron huérfanos. Ambos niños venían de f...