Parte 2

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Cuando el final no es otra cosa que el comienzo.

Mucho había cambiado en la vida de Fabián, había perdido una esposa, y un tiempo después a su hija, gracias a no sabía que fuerza extraña después de un largo tiempo estaba con él, juntos, y ahora seria para siempre, bueno al menos el así lo sentía.

Tenía unas ganas enormes de vivir, de pronto todo parecía tener buen color en su vida, tenía una familia, tenia buenos amigos y tenía una pareja en la cual confiar y con la cual ayudarse en los momentos en los que creía que no podía hacer nada.

Después de doce largos años era bueno que al fin tuviera un segundo de paz, Julio se había vuelto alejar, no tuvo noticias suyas por más de ocho años, solo le agradecía todo lo que había hecho por él. Isela seguía a su lado como su mejor amiga, ya eran más que familia, ella, su marido y su hija.

Una Vida Sin Angeles Y Sin DemoniosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora