(LGBT+) Devon es un buen amigo para todos, un buen estudiante, un buen deportista, no fuma, no consume alcohol; es un chico bueno.
Dara, Morgan, Joe y Honey conforman el grupo que siempre ha estado a su lado, sus amigos incondicionales, quienes r...
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Rechacé a Dara con la excusa más simple de todas: ya hay alguien que me gusta.
Le dije que podíamos seguir siendo amigos, le conté lo mucho que la quería "Como a una hermana" y después llamé a Morgan para avisarle que ella estaba llorando detrás de las gradas. Al volver a casa, me di unas palmaditas en la espalda y me dije "Bien hecho Devon, te has sacado un diez".
Luego desconecté el celular, no quería que me molestaran con estupideces. Encendí el televisor para ver una maratón de películas de Patty Jenkins y esperé a que mi familia volviera a casa. Mis padres estaban en su tiempo de pareja y mis hermanos, se fueron para pasar el fin de semana con mis abuelos, una visita de la que me escabullí usando las prácticas de futbol cómo pretexto.
Alrededor de las siete de la tarde, mientras pasaban las mejores escenas de Monster, alguien tocó la puerta de la casa, interrumpiendo mi momento a solas. Afuera estaba lloviendo, así que había oscurecido bastante temprano, de modo que, la primera vez ignoré por completo el llamado.
Charlize Theron actuaba de manera magistral en la pantalla, cuando los golpes se volvieron más insistentes, de modo que me vi obligado a atender.
Con fastidio, abrí la puerta de la entrada, encontrándome con el rostro aterrado de Ofelia, mirándome con ojos suplicantes y vidriosos. Por un instante pensé que aquella niña era un fastidio y luego, levanté la vista hacia si casa. De inmediato, comprendí porqué temblaba.
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