- Julio, ¿Ya saliste del curro?
Julio es unos de los matemáticos más buenos que existe, a sus 25 años recién cumplidos a conseguido poder dar clases en la universidad y ayuda a chicos y chicas a estudiar para que puedan acceder en la universidad, eso si ayuda en matemáticas, física, química y cosas que tenga que ver con los números.
- Sí, no tenía mucho por suerte. El chaval al que doy clases el sábado por la mañana solo tenía un par de ejercicios, éste es uno de los que a entrado gracias a mi a la universidad y necesita de mi para hacer los ejercicios. La cosa es que no le doy clases esta en otra uni. Por cierto. ¿Al final salimos?
- Sí, la profesora de ballet de Agneta ofreció quedarse con ella.
- Una cuarentona ofreció quedarse con tu hermana, esa quiere sexo con un veinteañero.
- La profesora de mi hermana no es para nada una cuarentona, ni llega a los trenta seguro. Y una cosa, no tiene nada de malo tener cuarenta años.
- Lo sé, pero igual casi nos dobla la edad.
- Eso es otro tema, yo no me acostaría con una persona que pudiera ser mi madre, pero bueno el tema es que salimos esta noche.
- De caza.
- De caza.
- He antes de irte. ¿Esta buena?
- ¿La profesora?
- Sí, claro.
- Pues no sé, sabes que prefiero juzgar sin ropa, hoy en día que si sujetador que aumenta, que si bragas que mas de lo mismo. Pero a simple vista impresiona. Ya me voy a ir llendo Julio, tengo que recoger a la enana. Nos vemos.
- Nos vemos.
Ande lo mas rápido que pude, el tiempo paso volando hablando con Julio, y mi hermana terminaba las clases. Llegue cinco minutos tarde.
- Lo siento.
- No pasa nada, estaba coloreando a una bailarina.
- Vale princesa.
- El hermano perdido.
- Dasha, mil disculpas, tendrás cosas que hacer.
- Hombre sí, quitarme esto, arreglarme y almorzar con mi novio.
- Pues no la entretengo más.
- A las ocho de la tarde noche estaré en su casa.
- Gracias de nuevo.
Agneta se agarró de mi mano y le dio el dibujo y los colores a la Dasha, luego caminamos en silenció hasta la puerta.
- ¿Es guapa verdad?
- Sí. Agneta, no te hagas una historia en la cabeza, eso no quiere decir que me guste.
- A mi me gusta para ti.
- Princesa, tiene novio olvidate de liarla.
- Pero yo creo que le gustas tú.
- ¿A si? —Arquee la ceja—
- Sí, por que hoy cuando me dejaste suspiro. Y te mira. Y te quiere ayudar conmigo.
- Agneta, los cuentos de hadas y princesas que tu lees, no tiene que ver con el día a día.
- Ares, deja de luchar con mostruos y dragones, todo caballero se casa.
- Este no. Vamos sube al auto.
- ¿De que sirve salir con muchas chicas?
- Ni yo lo sé. No se si es por que hace un año que no salgo con chicas, a penas salgo con mis amigos de toda la vida, como para hacerlo con chicas, o es que nunca supe el por que salia con ellas.
- ¿Nunca te has enamorado?
- Agneta, ¿comistes lengua? No, ni quiero hacerlo, mi único amor eres tú, el amor de hermanos, no me interesa otro. Ahora sube y calla un poco.
- Vale, y yo no comi lengua, y yo también te quiero.
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Mi Prisionera Del Lago De Los Cisnes
Krótkie OpowiadaniaTener 24 años, dueño de una empresa de marketing, y a mi hermana de 4 años a mi cargo, no es fácil. Así que tuve que buscarle unas clases extraescolares, sobre todo por que quería que mi hermana no extrañara tanto a mis difuntos padres, un año a pas...