Academia elemental (gay)

Misterios

Contado por Nick

Cuando llegamos al salón vi al profesor que observaba nuestra entrada al salón con enojo pero me di cuenta de que no me veía a mi sino a Leo que venía tras mío, nos sentamos en los mismos puestos que ayer y en el tiempo que esperábamos que tocara la campana para que iniciarán las clases no nos dijimos ni una sola palabra.

Yo no quería hablar con el porque sabía que lo del sueño no lo había inventado de la nada, lo sentí tan real que no supe como reaccionar en aquel momento, y cuando se lo conté supe que me ocultaba algo más, tal vez fue sólo mi imaginación pero ¿ porque me ocultaría algo? , ¿ tal vez sea porque nos estamos conociendo?.

La campana me saco de mis pensamientos, el profesor comenzó la clases y yo no podía dejar de pensar en todo lo que me estaba pasando en tan sólo dos días de haber iniciado el nuevo año escolar, me parecía muy ficticio como si se tratase de un sueño, las clases pasaron tan rápido que cuando llego la hora del almuerzo, Leo toco mi brazo para decirme:

Leo: vamos a comer algo - dijo con una sonrisas -

Era como si su silencio se hubiera acabado y se dignaba a hablarme

Nick: claro, pero no he cogido dinero, salí olvidándome todo - lo dije con vergüenza - vamos te acompaño a que comas algo -

Leo: yo invito ayer invitaste tu, ahora me toca a mi - dijo muy alegre -

Sólo asentí con la cabeza, aunque no quería que me invitara acepte.

Cuando íbamos saliendo del curso el profesor dijo:

Profesor: Señor Argent puede quedarse un momento, por favor???

Leo: claro, Nick adelantare yo te alcanzo. - me dijo con una sonrisa preocupada -

Nick: okey, nos vemos allá - dije amablemente aunque estaba preocupado -

Cuando salí pude escuchar al profesor decirle a Leo : " ha sucedido algo que yo deba saber " después de ello me dirigí hacía en comedor del instituto y hice la cola, por desgracia había mucha gente, cuando Leo llego al comedor y se acercó a mi ya estaba a dos personas de que me atendieran, estaba pensando en preguntarle en preguntarle y sin darme cuenta lo había dicho en voz alta, Leo me miro y me sonrió con ternura:

Leo: pues me ha preguntado donde me había quedado a dormir, porque mi padre lo había llamado a preguntar si sabía algo de mi. - dijo un poco nervioso y aún mantenía la sonrisa tierna. -

Nick: tu papá conoce al maestro???

Leo: pues así parece - comenzó a tascar su cabeza un poco nervioso -

Dejamos el tema ahí compramos algo para comer y nos fuimos a sentar a una mesa fuera del instituto donde el clima era muy agradable, nuestra hora de almuerzo paso lentamente, nos sentamos a comer y luego nos dirigimos hacia uno de los árboles y nos sentamos apoyados en su tronco, parecía que todo era tan sencillo y que el mundo se había detenido, yo me pare y me senté entre las piernas de Leo y me arrime hacia el, él me abrazo y en ese momento todo el enojo que sentía al saber que ocultaba algo se fue, era un momento tan hermoso.

Leo: perdón por ocultarte cosas que te traen curiosidad, es sólo que aún no es el momento adecuado para que sepas de ello y tampoco quiero forzarte a nada. - dijo con una voz muy triste - además aún no se lo que somos exactamente y quiero saber más de ti - podía sentir la sinceridad en su voz -

Me di la vuelta y le tome las manos y dije :

Nick: solo promete que me contarás cuando sea el momento y que no olvidarás ningún detalle - el alzo sus ojos a mi -

Leo: claro lo prometo - dijo sonriente y me abrazo tan fuerte, lo sentí como si no se fuera a acabar nunca ese abrazo, me retire para decirle -

Nick: otra cosa más, ¿ Que haremos hoy al salir de clases ?

Leo: es una sorpresa. - dijo amablemente y muy sonriente -

Las demás clases pasaron rápido y mi enojo con Leo ya había desaparecido, en las clases pasamos cogidos de la mano, lo que no sabía era ¿ Que éramos ?. Yo no sabía que era lo que dentro de mi sentía por Leo.

Salimos de clases y salimos del instituto, fuimos a dejar las mochilas en mi casa, Leo cogió su teléfono y su billetera y caminamos de la mano, paso mucho tiempo y no sabía a donde nos dirigíamos y la verdad no sabía si él supiera por donde me estaba llevando, pasado un poco más de tiempo sentí unas pequeñas gotas caer sobre mi cara y de repente el cielo se puso negro y cayo la lluvia a cántaros. Nos refugiamos cerca de una tienda y fue ahí donde le pregunte:

Nick: Leo ........ ¿Sabes donde estamos ? - dije con voz algo preocupada -

Leo: la verdad, no, me perdí, intente aprenderme como llegar al restaurant que había encontrado en internet, pero a decir verdad, no se cómo llegar. - dijo muy apenado que hasta bajó la cabeza y yo me sentí mal-

Nick: tranquilo, recuerdas el nombre del restaurant para ver como llegamos - dije con voz tranquila para que Leo no se preocupara -

Leo: lo lamento, quería que esta cita saliera perfecta y la he arruinado - me soltó de la mano y se las llevo a la cara -

Lo abracé aunque el era un poco más alto que yo y no dije ninguna palabra

Leo: "Article " es el nombre del restaurant - dijo aún entre sus manos

Nick: ese restaurant lo conozco, me encanta su comidas.

Leo alzo la mirada y yo sólo sonreía y bueno, no nos habíamos perdido después de todo, sólo faltaba un poco más y la lluvia no nos permitiría llegar.

Nick: falta poco para llegar al "Article". ¿ quieres correr ? - Leo me miro y sonrió, le tome de la mano y salimos corriendo -

Cuando llegamos al restaurant estábamos medio mojados, corrimos por 6 cuadras para llegar, su mano se sentía caliente y era tan reconfortante tenerla apretada en medio de la lluvia, nos sentamos en una de las mesas desocupadas, cuando nos pasaron la carta no sabía que elegir porque no sabía cuanto tenía Leo y tampoco sabía si se iba a sentir mal si pagaba con la tarjeta de emergencia.

Leo: pide lo que quieras, no te preocupes tengo suficiente para pagar todo lo que desees - me puse rojo porque a pesar de todo y a el también se lo veo más feliz que antes -

Nick: okey, gracias jejeje , la verdad no sabía que elegir por el dinero. - sentí como se me ponía rojos los cachetes -

Leo: tranquilo elige lo que tu quieras - dijo muy entusiasmado -

Después de una rato el me cero nos tomó la orden y cuando se fue sólo nos cogimos de la mano mientras esperábamos, creo que ninguno de los dos sabía que decir, nos veíamos y no nos decíamos nada.

Paso un rato cuando nos trajeron lo que habíamos ordenado: tallarín con albóndigas, papas artesanas fritas y un plato de bolitas de arroz con camarones cocidos en el centro que eran muy deliciosos y de los tenían que comer con palillos chinos, no sabía como se llamaban pero eran un manjar para comer.

Al llegar a mi casa después de haber almorzado junto con Leo, el se despidió y se fue a su casa, la verdad no sabía que era lo que sentía pero sus bromas con los palillos y sus imitaciones mientras comíamos me hacían reír muchísimo, tal vez no se la persona más expresiva pero el saca aquello que me guardo y hoy fue el mejor día de mi vida, no se casó nada de el pero en lo poco que estamos juntos, siento como si lo conociera de siempre.