Capítulo XVI
Bajo rápido las escaleras con la idea de que de esa manera olvidaré lo que acaba de pasar, hable con Erick y me dijo que estaba arrepentido la parte de mi cerebro que desde que lo vio le encanto su mirar y todo él me dice que le crea, pero mi sentido lógico y racional me dice que no lo haga ya que me violó y demostró no ser lo que creía, me detengo frente a la puerta para serenarme no quiero que Tory me vea así y no quiero que se entere, tomo aire y abro la puerta y mis ojos no creen lo que ven: Erick estaba frente a mí con el celular en su oído mirándome fijamente como esperando algo
- Dime como lo demuestro - sus ojos estaban brillantes como si quisiera ¿Llorar? uno acompañado de los restos que quedan del golpe de Tory y la nariz ya sana completamente, no sé cómo reaccionar nunca pensé tenerlo así de cerca nuevamente y prácticamente sin reconocerlo sus ojos están rojos como si hubiera llorado y aún quisieran hacerlo, no me muevo estoy estática detrás de la puerta mi respiración se hace pesada siento que voy a desmayarme pero trato de mantenerme de pie, no sé qué me sucede últimamente cuando estoy cerca de un hombre hiperventilo y siento desmayarme - Samantha ¿Estás bien? - se acerca a mí y de repente veo todo negro.
Narra Erick
Me acerco a Samantha y mientras lo hago se desmaya frente a mí, la tomo entre mis brazos antes de que llegue a tocar el suelo, creo que se sorprendió de verme aquí, la subo a mis brazos y la sostengo entre ellos se ve tan linda e inocente en ellos, quisiera que viviera entre ellos, no sé cómo pude atreverme a herirla tanto me duele el verla así tan indefensa, tan débil y todo por mi culpa; siento unas ganas inevitables de protegerla pero el chiste de todo esto es que me pediría que la protegiera de mí mismo, una parte de mi sabe que ella es fuerte que puede con todo, pero otra me pide a gritos que este cerca de ella para protegerla, cuidarla y hacerle saber que estoy muy arrepentido y quisiera que me dejara intentar recuperarla, pero lo que si me carcome de curiosidad ahora mismo es ¿Por qué se desmayó? ¿Tanto daño le habré hecho? La recuesto en el sofá más grande que veo en la sala, le acomodo un rulo rebelde detrás de la oreja y me admiro de su belleza tan natural, sin necesidad de un labial para desear su boca ni de sombras para admirar sus ojos, es preciosa simplemente única; empieza a removerse en el sofá <<Está despertando idiota corre>> cállate sub no te necesito, sé que está despertando pero no quiero alejarme de ella es tan perfecta ante mis ojos que no sé cómo pude hacerle daño
-¿Qué haces tú aquí? - pregunta despertando y sacándome de mi anhelo a esta chica
-Pues pasaba por aquí, me llego tú llamada y... - me acerque a ella pero sin darme cuenta ella me gritó
-¡Aléjate de mí! - me empujo por lo que me tambalee un poco sobre mis talones, doy un paso hacia atrás y luego me siento estilo indio en el suelo a los pies de ella
-Está bien - ella me mira confundida al verme en esta posición y la entiendo no me sentaba así desde la primaria - ¿Cómo te sientes? - la miro y me pierdo de nuevo en esos ojos tan profundos
- Primero: ¿Qué me paso? - su mirada es dura hacia a mí y lo entiendo le hice mucho mal
- Toque el timbre, bajaste, me abriste la puerta y te dije que como te demostraba que estaba arrepentido y ¡PAO! te desmayaste y Fin - le sonrío y ella me mira incrédula, luego se toca la cabeza
-Con razón estoy tan mareada - se pasa la mano varias veces por la cabeza
-Ya te busco agua - me levanto como el rayo y me dirijo a la cocina
ESTÁS LEYENDO
Prohibido y Deseado
General FictionMi nombre es Samantha Hernández, mis amigos me dicen Sam, soy dentro de los estándares sociales “normal”, mi vida es tranquila a excepción de mi mejor amiga Tory; yo la amo pero a causa de una invitación a una fiesta, conoceré a un hombre con unos e...