EL REENCUENTRO DE DOS AMANTES (parte 2)

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Abrió sus ojos con lentitud, estaba en una habitación cubierta de agua más no sentía la necesidad de aire, el lugar era hermoso y tranquilo, cubierto de luces y destellos, miro a lo lejos una silueta

-¿donde estoy?

-estas en tu corazón- le respondió aquella silueta

Poco a poco aquella silueta fue tomando forma hasta ser visible en su totalidad

-¿quien eres tu?-pregunto doga al mirar a esa mujer

-soy tu, años atrás- sonrió

-como es posible eso- estaba asustada

-doga ella y tu son la misma persona, solo que ella guarda recuerdos que tu olvidaste- otra silueta apareció

-¿pucca? ¿como es que tu estas ?- no pudo terminar de hablar cuando la pelinegra hablo

-¿aqui?, tranquila, no te asustes, yo puedo sentir lo que tu sientes y aunque no sabes que sucedio en el pasado yo fui testigo de tu amor por shaman-sonrio cálidamente

-¿mi amor por shaman?-ladeo un poco la cabeza

-si un amor tan puro y grande que incluso en medio de la dificultad pudo sobtevivir- hablo pucca sosteniendo de los hombros a aquella doga joven

-pero ¿porque no puedo recordarlo?- pregunto cabizbaja

-tu padre trato de quitarte ese amor y destruirlo, pero tu fuiste valiente y lograste crear un guardián que resguardaba tu corazón y aunque Jin lo aprisiono y quiso acabarlo, el guardián luchó para que tu amor viviera-asintió de manera cálida y sincera la doga joven

-y¿por eso pude recordar poco de shaman?-estaba curiosa

-así es, al acabar con jin pudiste recordar pequeños recuerdos al escuchar el nombre de "Jumong"-le dijo pucca

-¿podre recordar todo?- doga sentía muchas emociones al saber todo aquello

-puedes hacerlo- le dijo su otro yo

-pucca me gustaría recordar todo, quiero sentir esa calidez que se siente al ser amada por alguien, por favor ayudame a recordarlo-dijo suplicante

-claro que te ayudare doga-sonrio con aire materno

Las manos de pucca se encendieron con una luz tan blanca que podía deslumbrar a cualquiera, debajo de sus pies un círculo se formó y su cabello se movía al compas del aire que se hacia al formar ese circulo, pucca junto ambas manos y aquel circulo las rodeo a las tres, envolviendo en listones rosas a la doga mas joven, hasta quedar una pequeña bola de cristal

-doga es momento de despertar de tu sueño- soplo la bola de cristal haciendo que esta chocara con el pecho de doga creando un resplandor verde, listones de mil colores la rodearon.

Doga sintió como si su vida regresará, cada momento vivido con shaman regresaban a su mente, los recuerdos de pucca y sus amigos, su madre y todo aquello que la hacia sentirse feliz y amada regresaba a ella, respiro y sonrió completa, miro a su alrededor y vi como el agua se convertían en burbujas y se esfumaban, pucca había desaparecido y solo a lo lejos vi una pequeña puerta, al abrirla escucho a lo lejos la voz de ese hombre que amaba, esa voz que la hacia sentir feliz, la siguio con el deseo de jamas alejarse del dueño de esa voz

-¡¡Doga!! despierta por favor- abrió sus ojos y lo miro ahi, frente a ella, notaba preocupación y miedo, el la sostenía cual princesa

-¡¡Jumong!!- dijo con alegría para después abrazarlo del cuello, provocando sorpresa en el peligris

-doga volviste- sonrió para después abrazarla para jamas soltarla

Ambos estaban felices, provocando que unas pequeñas lágrimas de felicidad resbalaran por sus mejillas

-mi cielo te extrañe tanto- shaman lloraba como un pequeño niño que había encontrado su más preciada posesión

-jumong perdóname por olvidarte- doga se escondía en su pecho apretando su camisa mientras lloraba

-eso ya no importa ya que hoy te tengo a mi lado- la acerco mas a el

-Jumong- lloro- te amo Jumong, te amo- y sin mas lo beso con tanta intensidad y amor, con ese amor que guardo por tantos años

Shaman correspondío a ese beso, tan calido, dulce, húmedo y con sabor a fresa que tanta falta le había hecho

-jamas te dejare ir doga- ella sonrió

-no me dejes ir nunca- lo beso nuevamente

-Te amo con todas las fuerzas de mi corazón doga

-Yo tambien te amo Jumong.....

A lo lejos una mujer de cabellos negros miraba la escena desde una pequeña burbuja que tenía en su mano

-lo logramos- sonrió complacida mientras acariciaba a aquel pequello dragón que había en su hombro

NINJA ROJADonde viven las historias. Descúbrelo ahora