•veintiseis•

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La fresca brisa otoñal movía las hojas de los árboles que se encontraban en el jardín trasero.
Tyler observaba el movimiento de estas por la ventana, desde su cama, había despertado hacía diez minutos pero aún seguía acurrucado en su suave manta. Los murmullos de la planta baja se oían más cercanos convirtiéndose en pasos estruendosos ya en el primer piso.

-¡Feliz cumpleaños!-Gritó su familia al unísono abriendo la puerta de su habitación.

El castaño sonrió volteando para dirigirles la mirada. La pareja de adultos tenía una bandeja con un desayuno listo para su consumo, y Brendon tenía en sus manos unos globos coloridos.
Jamie dejó lo que llevaba en el escritorio del cumpleañero para que luego los tres se tiraran sobre el chico.

-Ay nuestro pequeño crece.-Exclamó el pelirrojo sentándose a un lado.
-Oh dios, parece que solo fue ayer cuando tenias 12 años y eras todo un niño.-Dijo su hermano nostálgicamente tomando sus mejillas.

Sus padres rodaron los ojos ante la actitud inmadura del mayor de sus hijos. En cambio, Tyler rió ligeramente apartando las manos de Urie de su rostro.

-Muchas gracias.-Sonrió de lado mostrando uno de sus adorables hoyuelos.
-No digo que este vaya a ser tu mejor cumpleaños, pero va a ser genial por el simple hecho de que estas con nosotros.-Miles tomó la bandeja.-Y comenzaremos con un desayuno en cama y en familia...

En el momento que iban a comenzar a comer el celular de Brendon sonó, este se disculpó y se retiró.
El menor frunció el ceño ligeramente sintiendo como el ambiente alegre se debilitó un poco, por la ausencia de la presencia del pelinegro. Aunque unos minutos después regresó con una gran sonrisa y junto a él un adolescente de cabello tintado traía una rosa color celeste.

-De parte de el tontito de Joshie aquí presente.-Canturreó el mayor entregándole la flor.
-¡Qué linda!-Con una linda sonrisa acercó el regalo a su nariz para poder sentir su aroma.
-Uhm, si si, muy hermosa. Pero hay algo más hermoso aquí.
-¿Qué cosa?-Preguntó con un ligero rubor en sus mejillas esperándose el comentario que seguía.
-Pues, la frente de Brendon, obviamente.

Todos rieron por la broma de Joshua, excepto Tyler, y Brendon que rodó los ojos y mordió su labio con una mueca de diversión aún así terminó carcajeándose.

-Mentira, bebé. Tú eres lo más hermoso aquí.-Se corrigió Dun, para finalmente acercarse al menor y levantarlo de la cama envolviéndolo en sus brazos para girar.
-Ya basta, Jish.-Rió.

El peli-azul bajó al niño frente a él para luego frotar sus narices, dando una escena maravillosamente tierna para quienes estaban ahí presentes.

-Feliz cumpleaños, pequeño.-Murmuró acercándose un poco con la intención de unir sus labios.
-¡Hola, aquí estamos!-Interrumpieron los adultos causando que Josh se sonroje.
-Lo siento.

Joseph rió nuevamente y lo abrazó susurrándole un 'muchas gracias' en el oído.

-Bien, ¿Ya podemos comer?-Cuestionó el hermano mayor, haciendo que todos se sentarán para deleitarse con aquel desayuno.

Pocas horas después Jamie se encontraba preparando pizzas. El resto observaba con Tyler tocaba orgulloso una simple canción de pocos acordes, con el pequeño instrumento que Josh le había regalado.

Fueron interrumpidos por golpeteos insistentes en la puerta principal, por lo que el castaño dejó el ukelele en la caja y fue a fijarse quién era.

'¡FELIZ CUMPLEAÑOS, ENANO!' era lo que se podía leer en el cartel decorado que tenían Jenna y Billie en sus manos. Este estaba salpicado con brillos y se podían ver algunas fotos de ellos tres juntos pegadas de forma desprolija.

-¡Taran! Nos llevó horas.-Fue lo primero que dijo su amigo.-Pero todo por usted, pequeño Scott.
-Feliz cumpleaños, chiquito.-Felicitó la rubia, soltando su 'obra de arte' para luego abrazarlo.
-Gracias, son los mejores.-Correspondió el cumpleañero.

Todos almorzaron entre risas y chistes, Tyler se sentía completo.

Al caer la noche sus amigos tuvieron que retirarse debido a que, al día siguiente, lamentablemente había clases.

Él se encontraba sentado en el jardín con su ukelele sobre sus piernas, y sus orbes color chocolate enfocadas hacia el cielo estrellado. El clima digno de la pronta llegada del invierno le encantaba, se encontraba con un suéter fino color negro.

Repasaba en su mente los lindos momentos de su cumpleaños.

Desde los chistes absurdos de uno de sus padres, hasta cuando Josh lo había acorralado en el pasillo para darle 13 delicados besos en honor a su edad.

Unos pasos detrás dispersaron sus pensamientos, y volteó encontrándose con ese chico que le encantaba demasiado para su corta edad.

-¿Qué haces, mi niño?-Cuestionó sentándose a su lado.
-Solo pensaba.-Sonrió ligeramente.
-Espero que mi lindo novio no esté pensando en alguien más, rompería mi corazón...-El teñido fingió un puchero.

La palabra 'novio' resonó en la cabeza del más pequeño.

Josh nunca le había pedido ser su novio realmente.

-No somos novios.-Soltó con una risita divertida.
Y el rostro de Dun se podía observar una mueca sorprendida.
-¡Es verdad! Bueno, podrías ser mi novio... Solo si me tocas algo en el ukelele, no trabaje tanto para no tener mi concierto privado.-Sugirió.

Tyler junto sus manos con nerviosismo.

No tenía mucha práctica y aquella propuesta le cayó como un balde de agua helada.

-N-no lo sé, no s-soy bueno.
-Si lo eres, Ty. Vamos, tú puedes.-Dijo tomando a Light para entregárselo con delicadeza.
-Y-yo...
-Por favor.-Suplicó el otro.

El castaño suspiro y posicionó como debía el instrumento.

Cerró los ojos y dejó que una suave melodía fluya de sus dedos.

Solo cuatro acordes con un orden que su cabeza improvisaba.

Luego agregó un rasgueó muy simple dejándose llevar por un ritmo que seguía mentalmente.

Al finalizar observó los ojos de Josh que lo miraban con orgullo.

-No soy muy bueno... Tal vez con más práctica...-Comenzó sintiendo como los nervios regresaban a él.
-¡Eres como un prodigio! Solo tienes esa cosa en tus manos hace dos días y ya tocas demasiado bien.-Se entusiasmó el mayor.
-G-gracias.

Joshua colocó el ukelele en el césped y se sentó frente al chico.

-Así que... Extremadamente talentoso, tierno, y precioso, Tyler Robert Joseph Scott. ¿Serás mi novio?
-Claro que si, Joshua William Dun, seré tu infantil noviecito.

Ambos sonríeron para luego unir sus labios en un dulce beso.



Este capítulo es algo así como una mierda pero es que quise intentar darles algo lindo para que disfruten mientras puedan ahre
Tyler ahora tiene 13 años y Josh 15 años.

Espero que le haya gustado un poco, al menos, porque debería estar estudiando pero les escribí esta cosa.

Lxs quiero<33

Ah y cambie todas mis portadas, les gustan?
Además publiqué un nuevo fic (ahre no terminaba ninguno y subía más) se llama 'diagnostic' y está en mi perfil, pueden fijarse que onda(?)

[Adopted] joshlerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora