[Adopted] joshler

•veintiocho•

Primero de enero. Tyler observaba en silencio como todo ya se encontraba casi vacío, a excepción de sus maletas y otros muebles. Ya se habían llevado los muebles necesarios al departamento nuevo. Todo estaba listo para la mudanza de ese mismo día.

Fuera de la casa llovía fuertemente pero eso no había impedido que todos fueran a 'la despedida'. Y con 'todos', otra vez en realidad eran solo Josh, Jenna y Billie.

El ambiente en aquel hogar, si se le podía llamar así a esa casa vacía, estaba acorde al clima. Casi se podía palpar la tristeza en el aire.

-Ty, pequeño.-Murmuró su novio sacándolo de sus pensamientos.
-¿Si?-Le respondió mirándolo a los ojos.
-Ven, vamos a salir, ya le pedí permiso a tus padres.-Sonrió el tintado.
-¡Pero Jish! Está lloviendo a cántaros.. Nos vamos a enfermar.

Josh rió ligeramente, causando que Tyler sonría también.

-Vamos, tengo paraguas, ¿suficiente?
-Para mí está bien.-Se encogió de hombros y le quitó el paraguas para salir de la casa sin esperar ni un segundo más.

La situación allí lo agobiaba, solo podía pensar que no iba a pisar su casa ni ver a sus amigos probablemente por bastante tiempo.

En los últimos 4 días había salido con Joshua y sus amigos a diario, no querían perder tiempo. Además, sus padres no le habían negado nada, ya que sentían que debían cumplir sus caprichos mientras pudieran.

-¿A dónde iremos, Jishwa?-Comentó apretando un poco la mano de su novio para llamarle la atención.
-Uhm, es sorpresa.-Dijo divertido.

Ambos caminaban tranquilamente uno junto al otro con sus manos entrelazadas y bajo el paraguas azul.

Llegaron a un parque que simulaba ser un bosque por la cantidad de árboles que tenía. Josh guió al menor hasta un pequeño lago, artificial, que había allí y ambos se sentaron.

¿En el pasto bajo la lluvia?

Si, en realidad ni siquiera les importaba mucho enfermarse o ensuciarse en ese momento.

Tyler se acurrucó más contra el mayor intentando conseguir un poco de calor. El otro paso su brazo a su alrededor poniéndose ambos más cómodos.

-¿Sabes qué te quiero mucho, verdad Ty?-Rompió el silencio el peli-azul.
-Aja.-Respondió sonriendo.-Yo también te quiero mucho.
-En el tiempo que hemos estado juntos la he pasado genial, eres un niño hermoso y muy bueno.-Se colocó de frente al castaño.-Eres precioso, generoso, honesto y valioso. Nadie te debe hacer sentir lo contrario, ¿ok? No tienen el derecho.

Los ojitos color chocolate brillaban por la alegría de escuchar lo que su novio pensaba de él.

-Tú también eres valioso, Jish. Pero.. Como... No valioso de que te pueden vender, ¿entiendes? Digo, valioso de que... uh, eres valioso como persona, creo.

Josh sonrió mostrando sus dientes y entrecerrando sus ojos debido al intento del pequeño por ser tierno.

-Si, entiendo.-Se acercó más al niño.-¿Sabes? Extrañare tus lindos labios.

Le dio un delicado beso, para luego separarse y ver el sonrojado rostro del menor.

-Yo también extrañare tus besitos..-Comentó.-Y tus abrazos, extrañare mucho tus abrazos, Josh.

Tyler volvió a pensar en que ya no abrazaría a su lindo chico peli-azulado.

Separó sus manos que se encontraban unidas y frunció el ceño.

A su alrededor la lluvia y el viento se hacían más fuertes.

-Ty, ángel, ¿qué ocurre?-Cuestionó preocupado Dun.