Un golpe en la puerta de su habitación hizo que sus ojos se abrieran de forma rápida. Movió su cabeza sintiendo un fuerte dolor en su cuello debido a la mala posición en la que se había dormido.
-¿Tyler?¿Estás ahí?-Oyó la intranquila voz de su padre.
-Si, papá Jamie.Se puso de pie y se estiró, aún un poco confuso por el hecho de que había despertado en el suelo de su habitación. ¿Qué hora era? Abrió la puerta refregando sus ojos y se encontró con cinco personas frente a él.
-¿Pero qué...?-Murmuró muy confundido.
Todos suspiraron aliviados.
-Los dejo con él, solo porque debo ir al estudio de nuevo.-Dijo Jamie para sacudir el cabello de su hijo menor y retirarse.
-Hola.-Volvió a hablar en voz baja para dejar pasar a sus amigos y su hermano.
-Creímos que necesitabas apoyo..-Comentó Billie.
-Todo está bien, de alguna manera sabía que esto iba a pasar.-Dijo el castaño con una amarga sonrisa.Se lo habían advertido, varios le habían dicho que Josh merecía a alguien mejor, tal vez Ryan era mejor. Las palabras de aquellos chicos que le causaban pesadillas retumbaban en sus oídos; sus ojos volvieron a llenarse de lágrimas pero las quitó rápidamente.
-¿A qué te refieres?-Cuestionó su amiga con una ceja alzada.
-Vamos chicos, era obvio que Josh podría estar con alguien mejor que yo.
-¡Pero tú eres el mejor!-Dallon protestó en un tono bastante fuerte.
-Dall tiene razón, Ty. Josh es un estúpido.
-No lo es, Bee. Yo terminé con él hace tiempo, puede hacer lo que se le de la gana.La habitación quedo en silencio por unos segundos.
(Perdón por la separación de los párrafos desde acá pero me puse a escribir en la compu)
-¿Y si salimos un rato? Ya saben, para despejarnos un poco.-Sugirió la rubia.
-¿Despejarnos de qué? Recién es lunes y venimos de una semana sin clases.-Rió el menor.
-No todo se trata de la escuela, Ty. ¡Vamos a ayudarte a despejarte a ti! Mike irá a una fiesta hoy, podemos ir con él.-Soltó Billie causando que las miradas se posaran en él.-Mike.. ¿mi vecino? Ese que va a la otra escuela, Orbrown.
-Oh, el lindo que te gusta.-Tyler movió sus cejas de arriba a abajo repetidamente.
-No me gusta.-Murmuró rodando los ojos.-Bien, ¿vamos?
-Por mi bien, el problema es si nuestro padre nos dejará salir hoy.-Acotó Brendon apoyado en el hombro de su novio.
-Nuestros padres, tenemos dos.-Sonrió rodando sus ojos chocolate.-Pero bueno, al otro no le interesa, podemos esperar a que papá Jamie se duerma.
-¿Piensas escapar, niño rebelde?-Habló el chico más alto.
-Si, ustedes pueden decir que se quedaran a dormir hoy.
•••
Una vez los adultos se quedaron dormidos, el grupo salió de la casa, encontrándose fuera con un alto chico rubio con ojos azules. Billie se acercó a él a paso rápido y se saludaron con una sonrisa.
-Él es Mike.-Lo presentó a los demás.-Ellos son Tyler, Jenna, Brendon y Dallon.-Fue señalando uno por uno.
-Vaya, Joe no mentía con que eras lindo.-Soltó Joseph causando que Mike riera ligeramente y su mejor amigo lo asesinara con la mirada.
-¿Te parezco lindo?-Le preguntó a Tyler con una ceja alzada.
Pero antes de que el menor respondiera, el ojiverde carraspeó y dijo que ya era hora de irse, por lo que los demás rieron y decidieron subir al auto de Weekes; aunque iban un poco apretados, pero les daba igual.
Unos minutos después llegaron a una lujosa casa, desde dentro se escuchaba música y había bastantes personas para ser un lunes. Al ingresar a la fiesta, decidieron que no se quedarían hasta más de dos horas, puesto que ya era medianoche y debían regresar a la casa. Prometieron estar en contacto por los celulares y se dispersaron, dejando estúpidamente al castaño menor solo.
¿No que lo iban a ayudar a despejarse?
Tyler se dirigió a la mesa donde había quien sabe cuanta cantidad de alcohol y tomó un vaso. Nunca había bebido antes, pero siempre había una primera vez para todo y tampoco planeaba salirse de control. Él era un adolescente responsable.
O eso creía.
Media hora después no tenía idea de cuantos vasos seguidos había consumido, y se encontraba cantando junto con un grupo de adolescentes desconocidos una canción que nunca había escuchado antes.
-¿Debería hablar con Josh?-Le preguntó con un infantil puchero en sus labios a la chica que tenía a su lado, ella se encogió de hombros.-Si, debería, gracias por el consejo.
Se paró de aquel sofá y, tropesandose con sus propios pies debido a la cantidad de alcohol en su cuerpo, logró subir las escaleras hasta el primer piso.
¿Cuanto podría haber bebido en solo treinta minutos como para estar así?
Bueno, podría deberse a que era la primera vez y todo afectaba de forma más fuerte.
Sacó su celular de su bolsillo con dificultad y marcó el número del tintado. Pero este no respondió.
-Vamos, Jish. Si voy a llamarte necesito que estés del otro lado del teléfono.-Murmuró arrastrando sus palabras para luego volver a marcar.
A los segundos oyó la voz ronca del mayor.
-¿Ty?-Preguntó confundido.
-Eres un t-tonto.-Soltó.-Pero.. Pero yo te dejé primero. Pero en los últimos años no lo pasé bien.-Balbuceaba frunciendo el ceño.-Y y-yo te.. te necesito, Joshie.
-¿Estas ebrio?-Comentó en un suspiro.
-¿Te fijas en eso?¡Me abandonaste tooodo el puto día!
-Intenté llamarte, y fui a tu casa, pero Brendon me echó.-Confesó cansado.-Mira Ty, yo siempre estaré aquí para ti, ¿donde estás?
-U-una fiesta de.. de la escuela esta.. Orobron, o algo así era.-Murmuró.-Pero estoy con Beebo y Dally y Bill y Jenn y.. y el rubio.-Rió.
-¿Y permitieron que termines así? Ya voy a buscarte, bebé.
-N-no. S-seguro tienes cosas mejores q-que hacer.. ¡Como besar a Ryan!-Puso una mueca de asco aunque el otro no podía verlo.
-Mira, cuando estés sobrio te explicaré todo, ¿si?-Su tono de voz era calmado.
-Bah.-Colgó la llamada algo agobiado y se sentó en la cama de aquella habitación.
Observó todo a su alrededor y se encontró con una pequeña caja de cigarrillos en el escritorio, tomó uno y salió al balcón, de todas formas el dueño no lo notaría.
Acostumbro a hacer las fiestas de dos capítulos, no me entra todo el drama en uno solo jej. Así que el treinta y nueve es de la misma fiesta!!1!!1
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[Adopted] joshler
Fanfiction[josh+tyler] Cuando Tyler Joseph es adoptado por su nueva familia parece que por fin todo va a tomar un rumbo en su vida, pero las cosas se le van un poco de las manos. Para su suerte, el mejor amigo de su nuevo hermano está dispuesto a ayudarlo en...