Capítulo 12: Te seguiré hasta el fin.

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Pov Alec

Mi madre siempre ha estado junto a mí en los momentos más duros de mi vida, es todo lo que un hijo puede pedir. Recuerdo el día que le dije que me gustaban los hombres y no las mujeres, creí que gritaría y quemaría toda la casa tras la noticia pero... me equivoque, fue todo lo contrario.

Me abrazo y me beso en la frente antes de decir: "No importa cuál sea tu preferencia Alec, tu siempre serás mi hijo, te amo sin importar nada"

La ves que algún idiota rompió mi corazón, cuando me molestaban en el colegio e incluso aquella ocasión en la que un grupo de presumidos de la universidad me gritaron "marica" justo en frente de mi madre... por el ángel, esos chicos desearon jamás haberlo hecho, Maryse se fue contra ellos echa una furia mientras yo me escondía en el asiento del carro.

Puede que no estuviera todos los días junto a mí y que no viviría los momentos más felices de mi vida a mi lado, pero aun por el teléfono cada que hablaba con ella para contarle algo sobre mi relación con Magnus, ella me hacía sentir seguro y eso era todo lo que yo necesitaba.

Y aquí estábamos en una sala de hospital, yo en su regazo intentado dejar ir el ataque de pánico y ella envolviéndome con sus brazos, intentando tranquilizarme, mientras me acaricia el cabello y me susurra que todo estará bien e intento creerle porque uno siempre intentara creerle a su mamá, porque ellas siempre tienen la razón.

-Mamá... ¿Y si el no despierta? ¿Y si... ya no hay nada que hacer? –

-No digas eso Alec, Magnus es fuerte, es una de las personas más fuertes que conozco, él va a despertar. –

-Pero aun si despierta, cáncer.... Mamá... tiene cáncer... yo... no sé qué puede pasar –

-Si Magnus decide quedarse con nosotros hijo. – Toma mi cara entre sus manos haciendo que la mire directo a los ojos – Las cosas no van a ser sencillas, habrá retos, tendrán que pasar por muchas cosas dolorosas, pero su amor es más fuerte que cualquier otra cosa y si tu confías en él, bueno... van a salir de esta –

No digo nada más solo asiento y me giro de nuevo. No sé si los demás escucharon algo, pero parecen estar de acuerdo con ella.

Sé que debo ser fuerte, pero el miedo está instalado en mi corazón junto a esa sensación de que algo malo pasara, de que aún me faltan más malas noticias por recibir.

Pov Magnus

Desearía regresar el tiempo y estar en Central Park, paseado como aquel día de otoño y no postrado en esta maldita cama de hospital sin poder siquiera moverme.

Ese día fue uno de los más hermosos, aunque para mí, todos y cada uno de los días que pasaba con Alexander eran la cosa más hermosa que la vida me daba.

Flashback

Era una tarde de otoño, el día estaba nublado y las hojas ya caían de los árboles dejando un hermoso camino en colores naranjas, amarillos y cafés. Amaba los días como estos me daban una especie de paz y felicidad.

Alec está sentado con una manta sobre las piernas mientras lee un libro cuando me paro frente a él y le extiendo un abrigo, un gorro y una bufanda sin decir una sola palabra y no es necesario porque él entiende al instante.

-Voy... si prometes invitarme un café... ¿trato? –

-Trato – Me inclino y dejo un beso sobre sus suaves labios.

Luego de media hora por fin salimos, no decimos nada, los silencios ya no son incomodos, luego de 3 años de relación ambos sabíamos que no era necesario decir mucho para entendernos.

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