Capítulo 14: Mi primera vez en muchas cosas

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Pov Alec

-¿En qué piensas Alec? – Pregunta Izzy mientras deja pequeños círculos en mi espalda.

-En nada, yo solo... prefiero no pensar. –

-Si sabes que eres pésimo para mentir ¿verdad? Y que te encanta pensar las cosas. –

-Claro... -

-¿Qué es lo que pasa? –

-Isabelle... podemos salir de aquí, ir a la cafetería que está cruzando la calle, no lo sé. –

-Claro, vamos –

Caminamos en silencio, le pedí salir del hospital porque la presión tras tantas noticias me asfixia y no podía estar en ese lugar ni un minuto más. Entramos a la pequeña cafetería, Izzy pide un capuchino mientras yo pido un café negro.

Cuando al fin estamos sentados, siento que puedo dejar salir toda la presión y decir lo que pienso sin miedo al que dirán.

-La verdad es que no sé qué hacer Izzy, le he dado mil vueltas al asunto, pensado en todas las posibilidades para encontrar la mejor pero... lo único que encuentro es que una es cada vez peor que la anterior. ¿Qué se supone que debo de hacer? –

-Bueno... Alec esto no es una decisión fácil, es la persona que amas la que está en esa cama de hospital, pero... puedo decirte que si Simon estuviera en la situación de Magnus, buscaría la mejor opción para él, no para mí. –

-Es lo que pensé... es solo que... soy egoísta y... no quiero dejarlo ir... tengo miedo a una vida sin él. ¿Qué se supone que voy a hacer sin Magnus Izzy? Él... él es mi vida... -

-Lo se Alec, siempre vi como lo mirabas, era una mirada llena de amor y siempre dese encontrar a alguien que me viera de la forma en la que Magnus te veía a ti. Era amor en su máxima y más pura expresión, nadie pudo negarlo nunca, a pesar de las peleas y los dramas. – Sonríe ante el recuerdo – Eran inseparables, la historia de amor que cualquier persona quisiera tener. –

-Pues la vida no piensa lo mismo que tú. – Observo la taza de café que se ha enfriado.

-La vida es un desastre... pero también es la cosa más hermosa Alec. Aunque la vida te quite a Magnus, los recuerdos que tienes con él, las sonrisas compartidas, las fotos, los abrazos... todas esas cosas son las cosas hermosas que la vida nos da. –

-Lo se..., es solo que intento estar enojado con alguien por lo que nos pasó ¿Sabes? Pero no sé a quién culpar. ¿Por qué a nosotros Isabelle? Las cosas iban tan bien, no puedo entender porque. –

-Puede que nunca lo entiendas. Las cosas pasan porque... así debe de ser por mucho que nos duela. –

-Mmm –

-Alec, cualquier decisión que tomes nosotros vamos a estar junto a ti, apoyándote. Te amamos y Magnus es parte de la familia y aunque la decisión sea dolorosa... quiero que sepas... que no estarás solo, nunca. –

-Gracias Izzy –

***********

Abro la puerta de la habitación y ahí esta Magnus, mi Magnus. Sus heridas han sanado un poco, cada vez es más él, solo que sin el maquillaje, pero para mí luce hermoso, como siempre.

Me acerco a la cama y tomo su mano.

-Amor... ya paso mucho tiempo desde el accidente, en un inicio pensé que esto era un sueño y que estaríamos es nuestra habitación, tu sobre mi pecho mientras yo te rodeaba con mis brazos, pero... no lo fue, todo fue real. Las cosas no han mejorado mucho, no después de la noticia. Lydia dice que el cáncer se extiende rápidamente, gracias a que tus defensas intentan repartirse entre sanar de forma rápida los estragos del accidente y sanar el cáncer que vive en tu cuerpo. Las cosas no están saliendo como me gustaría y me siento impotente porque... no puedo protegerte, no de esto. –

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