Tú Siempre Serás Mi Chica

Capítulo V

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ATENCIÓN

NO SE QUE HA PASADO, PERO AQUÍ ESTÁ EL CAPÍTULO.

COMUNICADO ESPECIAL

Para una mejor experiencia durante la lectura, la autora recomienda escuchar las siguientes canciones:

Electricidad, de Dvicio
Saturno, de Pablo Alborán
Amnesia, de 5 Seconds of Summer
Blank Space, de Taylor Swift
We Don't Talk Anymore de Charlie Puth y Selena Gomez

Fin del comunicado. Disfruta el capítulo.

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-Trabajo sucio- él asimiló cada sílaba. Luego chasqueó la lengua.

Felicity esperaba un arranque de ira, o de dolor. Pero en su lugar, Oliver la miró de pies a cabeza, con una expresión ilegible.

Destellos de miedo, lástima y repulsión brillaban en sus azules ojos.

-Vaya, Felicity. Creí que todos estaban equivocados. Quería pretender que no era cierto.

La rubia sacudió la cabeza, confundida. -¿No era cierto qué?

-Todos dijeron que eras una...- él calló de pronto, pero Felicity lo conocía, había algo más. -Cazafortunas.

Ella frunció el ceño. Luego se acercó a él, con una actitud desafiante.

-¿Qué dijeron, Oliver?

Él sabía que estaba acorralado, y con ella tan cerca, con su perfume a cerezas, fresas, zarzamoras y frambuesas frescas que le volvía loco, con aquella electricidad y calor que emanaba y llenaban todo su aire, haciéndole cosquillas en el estómago, no podía mentir.

-Trepadora. Arrastrada oportunista-. Oliver admitió, desviando la vista, reprimiendo las ganas de romper la escasa distancia que los separaba para juntar sus labios con los de ella.

Aquello fue como una bofetada directo en el rostro de Felicity.

-No creas todas las mentiras que escuchas-. Felicity se giró y avanzó cinco pasos lejos de él, necesitaba enfriar su cabeza que aún divagaba en la cercanía de Oliver.

-Mentiras es lo único que he escuchado por los pasados tres años. ¿Qué se supone que haga si nadie me dice la verdad?- le reprochó él.

Entonces la rubia pensó en silencio unos breves segundos.

Era cierto, desde que se había marchado, las vidas de ambos a habían convertido en un enredado laberinto de mentiras, y ahora que se acercaban a la verdad todo se complicaba.

Quizá era mejor que Oliver estuviera enredado en los nudos de la ignorancia y la falsedad. Así no saldría herido. Así no caería en la oscuridad, con ella.

-Se supone que te mantengas lejos de los que no son asuntos de tu incumbencia- Felicity lo encaró, con aquella cara de póker que usaba cuando necesitaba protegerse, sin dejar relucir sus sentimientos o la verdad. Una fachada que alejaba a todos. -Debes dejar de hacerte el héroe. El caballero en brillante armadura.

Oliver sintió la rabia apoderarse de él.

Felicity continuó hablando. -Deja las cosas así. Deja de tratar de llegar a la verdad, porque tal vez sea peor que las mentiras.

Dicho esto avanzó a la puerta, poniendo la mano en la perilla, lista para salir y dejar el pasado y sus fantasmas donde debía.

-Ojalá nunca te hubiera encontrado- fue lo último que escuchó antes de marcharse.