SUPONGAMOS

NUEVOS COLORES

Capitulo III

                                    Entonces estábamos a dos días de la prueba que tenía tan nervioso a Samuel, yo no era el más inteligente pero de los del salón era el único que entendía o que significaba no tener estudios y por lo mismo era el que más se esforzaba por las calificaciones. La vida que se puede optar sobre todo en ese entonces. Tenía una meta, quería dejar esa vida, quería que mamá trabajase cinco días a la semana y que no estuviese de mal humor por casi no poder respirar.

Ser pobre es una mierda. No hay nobleza en ello, una vez escuché que la había pero no. Ser pobre te limita de varias formas, principalmente porque crees que eso es lo que te tocó y no haces nada por cambiarlo.

Es lo que Sam llamaba. El despecho social. No nos molesta la gente rica porque sea rica, nos molesta la gente rica porque nosotros no lo somos. Es frustrante entender que al final, si hay algo de razón dentro de esa cabeza rubia obscura suya.

¡Mamá! –gritó el más alto mientras dejaba su mochila en la entrada. De pronto se acercó una mujer que me recordaba un poco a mi abuela. Tomó la mochila del chico y se la subió a su cuarto.

-La cena está preparada Samuel, sus padres salieron a una fiesta de su tío.

-Ya veo. María, él es Benjamín. Benjamín, María. Es mi nana y aunque no lo creas la he visto más que a mi mamá y mi papá juntos.

-Mucho gusto. –le sonreí y ella se sorprendió un poco aunque luego también sonrió.

-María, vamos a comer en mi pieza ¿nos subes la comida allá? Porfa

-Si Samuelito.

-¿Samuelito? –Repetí a lo que él solo me dio un empujón leve. –Nos retiramos y seguí al chico, su cuarto era enorme, como todo mi piso junto. Lo cual fue tragicómico.

-Deja tus cosas encima de la cama no más. Me voy a bañar y vuelvo, puedes jugar en el Nintendo o en el Super.

-¿Qué? –no estaba familiarizado con la jerga.

-¿Nunca has jugado Nintendo? –se detuvo en la puerta con una risa burlesca.

-Es una de las desventajas de ser pobre.

-Es una de las desventajas de no tener un tío rico en el extranjero, me lo trajo mi padrino de Estados unidos con algunos juegos. ¿Tu padrino no te da cosas?

-Me paga la colegiatura así que es suficiente.

Hubo un leve silencio, él notó que me hizo sentir un poco incómodo, aunque no se disculpó ni nada, no era propio de Sam. Luego fue a la tele y conectó el ''super nintendo'' y me entrego un ''control'' apretó los botones y luego se sentó en la cama al costado mío.

-Es simple, con ese saltas, con ese corres, aunque tienes que mantenerlo apretado. Con este cambias al personaje por el otro mono y si tú eres el mono y el gorila, este es pausa por si quieres ir al baño o algo.

-¿Qué hace select?

-Nada, no lo presiones.

-Bueno

-Bien, tienes que matar a los cocodrilos si te tocan pierdes y eso, no es tan complicado, me iré a bañar por mientras, abajo está la cocina se supone que ya nos están preparando algo, pero si no quieres esperar puedes bajar y decirle que te haga un pan.