NIYUSHI-(dy:Dianne-aloap)

CAPITULO 1: 4/5

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A la mañana siguiente...

Me levante, me cambie y baje a desayunar, tenía una cara de depresión, mi mamá me miro e intento consolarme.

-Sé qué la mudanza es algo difícil, y más cuando nos mudamos fuera de Mazatlán, pero estoy segura qué algo bueno pasara si nos mudamos-No entendí a lo qué se refería, Lusia, Jatuna, Onollu y hasta José, se pusieron nerviosos cuando mamá dijo "algo bueno pasara".

-Tenemos qué apurarnos no queremos llegar tarde a la escuela-Dijo Jatuna un poco agitada.

-Si, Jatuna tiene razón tenemos qué apurarnos o nos dejaran a fuera-Onollu contesto aun más alarmada qué Jatuna como si trataran de ocultarme algo, ellas actúan así de vez en cuando desde qué tengo memoria e intentado descubrir porqué.

Pero lo único qué se es qué tiene qué ver con migo y todos en la familia lo saben.

Salí de estampida junto con mis hermanas, después de ver la hora- ¡Adiós a todos tenemos qué correr!-no me importa si me voy a ir tendré estos últimos días los mejores de lo qué me pude imaginar (espero...).

Cuando llegamos a la escuela, exhaustas, nos despedimos y nos dirigimos a nuestros respectivos salones.

Cuando llegue al salón ahí estaban mis amigos, intente forzar una sonrisa pero inútil se darían cuenta de qué estoy actuando, (rara vez sonrió).

- ¡NIYUSHI!-Grito Carmen y se arrojo contra mí espalda.

- ¿Por qué esa cara tan larga?-Pregunto Raúl.

- ¿Qué, acaso cortaste con tu novio?-Pregunto María algo risueña, ella siempre hace ese tipo de bromás, yo normalmente la regaño y me enojo un poco, pero ahora no estaba de humor...

-Oye, era solo una broma tu... -María hiso una pausa-Ya en serio ¿Qué es lo qué te pasa?

-Sabes qué nos preocupamos por ti, si no nos dices qué es lo qué te pasa-Dijo Raúl algo preocupado.

-Ya, no es nada-Conteste muy desanimada, (sinceramente no puedo estar de buen humor todo el tiempo, y menos ahora).

-Por favor dinos, o me pondré a llorar-Dijo Carmen, (oh no ella si es capaz de hacerlo).

-No, No, No, está bien les digo-Tome aire y serré los ojos-Me mudaré, y me cambiare de escuela...

- ¡¿Qué?!-Contestaron los 3 al mismo tiempo.

-Aunque no me agrade la idea, no puedo hacer nada al respecto.

- ¿Como de qué no?-Pregunto Raúl.

-Muy simple es por el trabajo de mí papá, así qué nos tenemos qué mudar.

-En primera ¿A dónde?-Pregunto María.

-No les va a gustar como suena esto pero, fuera de Mazatlán-Me tape los huidos por miedo a que gritaran pero...

-Imposible en qué país o donde sea pero ¿a dónde iras?-Pregunto María lo más calmada qué pudo.

-María tiene razón a ¿donde exactamente te estás mudando?-Pregunto Raúl un poco más agitado qué María.

-En la división de México con estados unidos en una isla llamada Demon City

-Estas de broma-Fue lo único qué dijo Carmen en toda la conversación.

-No, no estoy de broma...

Todos me abrasaron y yo respondí de la misma forma.

-Y ¿cuándo te irás?-Pregunto Carmen.

-Este mes...

-Bueno, no todo está perdido aun nos podemos comunicar por video chat, ¿no?-Comento María para intentar calmar a todos.

-María tiene razón es lo único qué nos queda... Pero ¿vendrás de visita alguna vez?-Pregunto Carmen.

-Eso no lo tengo muy claro.

-Bueno te daremos una de las mejores despedidas de tu vida ¿ok?-Dijo Raúl, sinceramente eso sonó bien y me estaba comenzando a animar.

-Okey-Mis amigos comenzaban a elevarme el ánimo, sinceramente quería llorar, (Insisto aunque no pueda).

Toda una vida aquí, rara vez salía de Mazatlán y menos a un lugar donde no podre volver demásiado pronto... Mamá y papá me dijeron que la única forma de salir y entrar es atreves de un avión o un barco. (Las dos sonaban horrible).

No sé nadar y le tengo vértigo a las alturas, si no puedo ver dónde está el suelo me mareo y me desmallaría o me pusiera a temblar y me desconcentraría.

El día transcurrió normal Andrea no me molesto en todo el día, lo cual me algo y hiso qué me sintiera menos miserable, (de lo qué ya soy).

A la salida Andrea y sus amigas me estaban esperando afuera, por alguna razón, solo las ignore y "intente" ir a la otra esquina a esperar a mis hermanas pero ellas me detuvieron, (¿ahora qué?).

-Escuche qué te mudaras este mes, ¿es verdad?-Me pregunto Andrea lo más ¿amigable? posible.

-Pues si escuchaste bien-Hice una falsa sonrisa, (esa idiota no sabe cuando ver una verdad o una mentira, es fácil de engañar).

-Lo siento tanto por ti, estoy tan segura qué nos extrañaras a todos-Contesto Andrea.

-Pues si los extrañaré a todos- (¡Si claro me libraré de ti presumida tú y tu reino del terror de la escuela!), lo siento amigos los desharé con este demonio peor qué el mismo Satanás.

Otro poco y grito eso a los cuatro vientos.

-Pues te daremos la despedida qué te mereces el último día qué estés en esta escuela-Contesto Andrea a mí sufrimiento en silencio.

-Oh ¿en serio? no tienen qué molestar-Esta vez mí sonrisa no era tan fingida qué digamos.

Mis labios comenzaron a temblar en esa sonrisa falsa y comencé a sudar.

-Pues ¿Cuando te vas?-Pregunto Andrea tan entusiasta, (como si fuera a decirle).

-Pues... -Hay qué digo...

Fueron los 10 segundos más largos de toda mi vida, hasta qué...

- ¡NIYUSHI!-Grito con fuerza Jatuna.

Salvada por la vos tan gritona de mí hermana.

-Pues nos vemos tengo qué irme... - ¡SALBADA!

-No espe... -Andrea intento detenerme pero, no lo logro.

Cuando íbamos a dar vuelta en una esquina voltee atrás y Andrea estaba furiosa, realmente quería hacerme algo. Pero si no descubre qué día me iré no lograra nada, (buen plan, espero qué funcione).

Al regresar a casa nadie dijo nada, todas estábamos sumergidas en nuestros pensamientos, (era preferible qué fuera así), aunque no dudo qué mamá me pregunte qué cómo me fue hoy, sinceramente no quisiera contarle.

Al llegar a casa, salude a mamá y papá y salí corriendo a mí habitación, para evitar cualquier tipo de conversación.

Si habla con mis padres, de cuál fue la reacción de mis amigos por la mudanza, no sabría qué contestar, además en parte estoy algo ¿feliz? no podría ser peor qué estar en esa escuela a excepción de mis amigos.

Cuando llegue a mí cuarto intente quedarme dormida, ya casi todas mis cosas estaban empacadas, solo faltaba sacar un poco de ropa, guardar algunos de los aparatos eléctricos de mí cuarto y sacar los muebles y cortinas eso también incluye a las sabanas y almohadas.

Serré mis ojos y evite pensar en cualquier otra cosa...