La Que No Podía Amar.(Raura)

Capitulo once.

¡Maraton! Perdón por tardar, es que fui a ver Black Panther xD en fin... Aquí el maratón

1/3💕

Ross.

Me sentía estúpido. Muy estúpido.

¿Cómo pude creer que...?

-¿Satisfecho?- Gruño el novio de mi hermana.

Al entrar como un idiota a la sala y exigir respuestas, ambos estuvieron a punto de matarme, lo se.

Resulta que la familia de Laura y la de Ellington, eran amigos desde que estos últimos se mudaron aquí.

Eliza Rattliff era la hermana de el, y mejor amiga de ella.

No pregunte por lo que escuche al entrar, quería ver si eso tenia relación.

No la tenía.

La hermana de Rat había pasado por ciertas cosas, que ningúno de los dos se atrevió a hablar.

Esto la llevo a terminar en un hospital en Canadá.

Al parecer tenia una enfermedad y aprovecho de ella para intentar suicidarse.

Nadie mencionó al tal Spencer.

Había muchas preguntas en mi cabeza, sin embargo sabia que no responderian a más.

-Vamos.- Laura me señalo a la salida.

Sin protestar me levante y la seguí.

-Hablamos después Ellington.- Por un momento vi alivio en sus ojos, pero así como apareció, se esfumó.

-Seguro.- El no parecía contento de que su conversación se pospusiera.

El camino fue silencioso, un silencio incomodo que no soportaba.

-Lo siento.- Susurre.

-No hables.- Me amenazo.- Dije que te alejaras, te dije que no preguntarás.- Me observo.- ¿Y qué hiciste?- Pregunto irónica.- ¡Fuiste e hiciste exactamente lo que te dije que no hicieras!- Se refrego su rostro con su cara.- ¡Mierda Ross! ¡Maldita sea! ¡Te dije que no lo hicieras!- Gritó.

-¡Lo siento bien!- Hable más fuerte. Quito sus manos de su rostro por mi tono.- ¡Estoy intentando!- Estaba por hablar pero la interrumpi.- Intento alejarme de ti, en verdad lo hago... Pero no puedo.- Se cruzo de brazos.- No me importa salir herido.- Puso los ojos en blanco.- Se que para ti es tonto e innecesario, pero para mi no.

-Ross, es por eso que quiero que te alejes.- Su mirada se suavizo. Era la primera vez que la veía de ese modo.- No puedo darte lo que quieres.-Cerro los ojos.- Por más que lo intente, jamás voy a poder amar a alguien... Ni siquiera a ti.- Abrió de nuevo los ojos. Esa calidez no había desaparecido.- Si las cosas fueran diferentes, entonces tal vez habríamos tenido una oportunidad.

Me acerque a ella, esta vez no se alejo.

-Deja que te ayude.- La acerque a mi.- Dejame intentarlo.- Roce sus labios.

-No puedo.- No hizo ademán de alejarse.- En mi ya no hay salvación... Se que si sigo con esto puedo llegar a preocuparme por ti... Y aún así voy a destruirte... Lo siento, pero es así.

Junto sus labios con los mios.

Esta vez era suave, no como la última vez.

Con este beso sentía que conocia a una Laura que jamás se quedará. Una versión de ella que quería salir y ser feliz, pero que tenia cadenas atadas.

-No voy a dejarte ir... No sin conocerte, no sin entender que eres. Quiero ser yo quien decida cuando es suficiente.- Me observo resignada.

Sabia que no me iría.

-Bien.- Soltó al fin. Sonreí.- Pero no preguntes por el pasado. Ese se queda dónde esta.

Intente ocultar mi decepción.- Trato.

Asintió.- Debo irme.

Bese sus labios de nuevo.

Amaba hacerlo.

Sin conocer nada de ella me estaba enamorando. Eso debía asustarme, en realidad, lo hacía, pero también me llenaba... Era como estar completo.

(...)

Laura.

-¿Por qué?- Logan me observaba.- Es el ex novio de Courtney y el hermano de tu ex novio.- Me recordó.- Además de que terminaron hace como tres semanas.- Me regaño.

-Lo se.- Puse mi rostro en mis manos.- No se que sucedió... Por un momento... Por un momento me sentí diferente...- Susurre.

-Oh por Dios.- Mi castaño se acerco.- ¿Te gusta?- Lo observe. Sonreia.

-No.- Negué. Lynch no me gustaba.- Es solo que... Esta lleno de esperanza y sueños... Creí que a lo mejor el, el podía contagiarme un poco de ello.

Asintió.

-Espero que lo logre.- Su voz no iba dirigida a mi.

Sus palabras tampoco eran una referencia a lo que había dicho. Logan Maxwell quería que yo me enamorara de nuevo.

Y en el fondo... Creo que yo también lo quería.

(...)

-¡Oh vamos!- Se quejo Calum.

-No es para nada romántico.- Le recorde.

-Pero lo es... Cuando ella esta ahí.- Suspiro enamorado.

Reí. Era tan extraño ver a todos enamorados, pero no me molestaba, al menos ya no.

Sabía que yo jamás estaría en esa situación, aunque quisiera, pero intentaba no culparme tanto, intentaba no ver al pasado.

Estaba haciendo un excelente trabajo. Ya no tenía tantas angustias, y le pedí a Ellington tiempo para poder decirle lo que iba a decirle.

No quería perderlo aún.

Me encontraba con mis amigos en un café, hablando de lo que Calum haría para pedirle matrimonio a su novia.

Mi teléfono interrumpió.

Te ves linda cuando ríes.
-R.L.

Puse los ojos en blanco.

Este chico creia que podía conquistarme con eso... Aunque en otros tiempos lo habría hecho, ahora era difícil, por no decir imposible.

Mi teléfono vibró de nuevo.

¿Ya me has olvidado? Prometiste que siempre estaría en tu vida... Creo que hay que recordarte que debes cumplir tus promesas.

Mi rostro se torno serio.

Todo mi alrededor comenzó a dar vueltas.

Gire a todos lados en su busca, pero no estaba.

-Chicos, debo irme.- Les avise.

Deje dinero en la mesa y salí del lugar.

¿Qué quieres de mi? ¡Ya lo has tomado todo!

Respondí mientras caminaba de manera acelerada a mi casa.

Si Spencer quería hablar conmigo, sería en mi territorio.

Solo me aseguro que cumplas tu promesa... Dijiste que harías cualquier cosa por mi. Alejate de Ross Lynch.

Sabía su nombre... Demonios.

Yo cumplo mis promesas Spencer, no has dejado mi vida.
Ahora, con respecto al chico: no hay nada. Yo le he dejado en claro que no estoy disponible.
Ahora dejame en paz. ¿Por qué has regresado?

Entre a mi casa y cerré con llave.

Oí el timbre, crei que era el, pero por el agujero de la puerta vi que era Ross.

No debía hablar con el, no quería hablar con el.

Sabía que tarde o temprano mi pasado me alcanzaría.

Nunca deje tu vida Laura, solo que ahora estas a mi alcance.