Capítulo dos - Más confianza

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Los nervios se invadieron en mí, ya había terminado la “junta” de YouTube y me encontraba en mi departamento, tuve que darles a los otros Youtubers mi Skype para empezar a hacer videos juntos. Y ese video lo grabaremos en 5 minutos. Un sonido adueñó mi habitación proveniente de mi ordenador, una llamada de Willyrex, Guillermo para ser exacta. Me levanté de mi cama y me dirigí a mi ordenador. Otros cuatro sonidos. Otras cuatro notificaciones. Acepté las cinco y ahora estábamos en una conversación en Skype, los cinco.

-Hola –el primero en hablar fue un chico de acento andaluz; Miguel, pero prefiere que le diga Mangel-. Bien, pues, ¿Ya vamos a empezar no?

-Pues yo estoy de acuerdo –habló otro chico; Guillermo y quería que le llamara Willy-. ¿Qué hay de ti, Vegetta?

-Por mí está bien –habló otro chico; Samuel pero le dicen Vegetta.

-¡Pues empecemos! –dijo otro chico, Alejandro y le dicen Alex-. ¿Estamos bien, no? ¿Rubius? ¿_(tn)?

-¡Sí! –exclamó el chico de cabello castaño llamado Rubén, pero dice que prefiere que le llame Rubius.

-S-Sí –tartamudeé.

Empezamos a decidir qué juego grabaríamos, decidimos por una partida de los juegos del hambre en Minecraft.

El juego empezó, corrí hacia un cofre y agarré todo lo que pude, nada más que pura mierda. Seguimos jugando así hasta que Alex, Mangel y Willy murieron, ahora estaba yo con Vegetta y Rubius.

Vegetta tenía todo de hierro menos el casco, el casco era de oro, una espada de piedra. Rubius tenía el pantalón de hierro, botas de oro y peto de malla, una espada de hierro. Yo tenía todo de hierro menos las botas, mis botas eran de cuero, una espada de hierro. Empezó la deathmatch y maté a Rubius y Vegetta me mató a mí.

Hijo de puta, pero de broma.

Dejamos de grabar entre bromas y risas. Mi celular sonó y los chicos se quedaron callados, esperando a que contestara.

-Un momento –dije y contesté por el celular-. ¿Hola?

Era Marie.

-Oh, sí –me había propuesto ir con ella al cine, pero hoy no quería salir, quería hablar más con ellos-. No Marie, estoy ocupada.

Los chicos empezaron a hacer señas de que no me marchara, eso me causó gracia.

-Sí, bueno, nos vemos –colgué y solté una carcajada.

-Bien hecho, pensé que nos ibas a abandonar –dijo Rubius riendo.

Acabamos la conversación después de una hora porque cada quien iba ir a editar el video por su cuenta, acabé de editar después de 2 horas y media. Miré el reloj, 7:46 de la tarde...o noche.

Era sábado por la noche y no tenía planes, vaya vida social que tengo, el lunes volvería a el instituto, por qué tengo 19 años y sigo estudiando.

Mi celular empezó a sonar y contesté después de dos timbres.

-¿Bueno? -no tenía ese número registrado.

-¡Hola _(tn)! ¡Soy yo! ¡Rubén!

-Hola Rubén, ¿Qué ocurre?

-Preparé un tipo de pijamada entre nosotros, quería preguntar si querías venir...

-¡Espera! ¿PIjamada? ¿Cuántos años tienen? ¿Desde cuándo son chicas? -reí.

-Somos unas damas -dijo en un tono afeminado-. Entonces ¿Vienes o no?

-No sé, no tengo preparado nada y aparte no tengo en que irme...

-¡Preparala rápido! ¡Ven en taxi, nosotros lo pagamos!

-Pero Rubén...

-Anda, vente.

-Está bien...

-¡Sí! Bien, te veo en un rato, te daré mi dirección en un mensaje.

-Bien.

-Bien

Iba en un taxi, Rubius me había dado su dirección en un mensaje y me dirigía a su departamento, me siento extraña por ser la única chica de un grupo de 5 chicos.

Pagué el taxi, no quería que ellos lo pagaran, ni que fuera la gran cosa. Agarré mí bolso, sólo tenía lo necesario, no llevaba una maleta, sólo pasaría una noche ahí. Toqué la puerta y Willy fue a atenderme después de darme un beso en la mejilla, que no me molestaba.

Saludé a todos con un beso en la mejilla y empezamos a comer pizza, y la pizza es una de mis comidas favoritas.

-Suerte que no encargaste pollo, Rubius –dijo Mangel-. Si hubieras encargado pollo estaríamos expuestos a que nos dieran droga por accidente.

Sabía perfectamente el por qué hablaba de eso.

-Mangel, deja de ver Breaking Bad que si no tendré que meterte la metanfetamina por el culo –dijo Rubius y soltamos una risa.

-¿Os parece que juguemos videojuegos? Esto es aburrido –dijo Alex con una sonrisa, definitivamente parecía un niño pequeño.

-¡Sí! ¡Pido primero! –gritó Vegetta corriendo hacia el sillón para agarrar el mando-. ¿Quién me retará, eh? –dijo alzando la ceja-. Vamos _(tn), veamos quién es mejor jugando al GTA.

-Mala idea retarme Vegettoide, eh –me senté al lado de él y agarré el mando-. Veamos si una chica te gana en los videojuegos.

>>>

¡Hola! Aquí el Segundo capítulo de mi novela:D Denle a fav, comentad y follar 7u7 digo...nada. Ah, bueno, ¡Esperaos el Tercer capítulo, vendrá pronto!:D

x <3

-JessHaz.

Cinco Chicos Y Una Chica /Youtubers/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora