💖La Expansión de la Familia Cooper 💖Shamy 💖Secuela💖

💖Capítulo 04

"Bueno caballeros, los dejaré terminar su almuerzo", pronunció el Dr. Siebert a manera de despedida. "Por cierto Dr. Cooper, me gustaría que usted y yo tengamos una pequeña conversación. Lo espero en mi oficina a las 5 p.m. Y una vez más... Felicidades!" Siebert se alejó del grupo de amigos sonriendo como si él mismo fuera un ganador del Premio Nobel.

"Me preguntó de qué querrá hablar el Dr. Siebert conmigo", Sheldon se cuestionó durante unos segundos.

"¿No es obvio? Sheldon, una nominación al Premio Nobel es algo enorme. Evidentemente el Dr. Siebert quiere hablar sobre eso." Leonard ya se imaginaba a Sheldon recibiendo una medalla de oro y dando su discurso de aceptación.

"Ah! Tiene lógica" Sheldon tomó un nuevo sorbo de su refresco; se encontraba muy pensativo, revolviendo su ensalada con un tenedor. Leonard, Howard y Raj intercambiaron desconcertadas miradas.

"¿Creen que a Amy le gustaría recibir un regalo? No sé si esa es la convención social, pero creo que ella apreciaría el gesto; ya saben, por nuestro nuevo bebé". Sheldon les preguntó a sus amigos.

"Siiii!" Raj exclamó emocionado. "Cómprale un ramo de flores. Eso sería tan romántico. Ya sé... orquídeas".

"Umm ¿Flores? No estoy seguro si a Amy le gustaría recibir un conjunto de órganos reproductivos provenientes de plantas fanerógamas." Sheldon meditó por un instante. "Yo había pensado regalarle una colección de documentales en blue-ray, sobre grandes mujeres de la ciencia; ya saben, si nuestro segundo bebé es una niña, creo que serían un mejor modelo a seguir que esas frívolas princesas de Disney", añadió seriamente.

"Sin duda, Cenicienta es un pésimo ejemplo", Leonard añadió con ironía.

"¿Y qué me dices de Blanca Nieves? Una chica decente no pude andar por ahí tan campante mientras vive con siete hombres", Howard sonrió pícaramente.

Sheldon asintió; a pesar del tiempo nunca aprendió a entender el sarcasmo. En realidad, la idea del ramo de flores, no le desagradaba. Nunca antes le había regalado flores a Amy, pensó.

Cuando Amy miró su reloj y se dio cuenta de que ya eran las 4 de la tarde, se sintió como si fuese un ave liberada de su jaula. Tenía por fin libertad para reunirse con su amado Nicholas. Su hijito le hizo muchísima falta durante todo el día. Había recibido un mensaje de texto de Sheldon, diciéndole que tardaría un poco en llegar a casa porque el Dr. Siebert quería hablar con él luego del trabajo.

Al llegar a la casa de su madre, Amy fue recibida por Nicky. El bebé sonrió alegremente mientras abrazaba a Amy. "Yo también te extrañé mucho", Amy le dijo.

"Hola mamá! ¿Cómo se ha portado Nicholas?" preguntó Amy. "¿No ha estado llorando? Nicky nunca antes había demostrado tal ansiedad de separación; espero que no te haya causado problemas." Amy abrazó a su bebé mientras él, entre risas, intentaba quitarle los anteojos.

"Oh, no te preocupes Amy. Yo soy feliz cuidando a mi nieto. Además se portó como un angelito", la señora Fowler añadió. "Pero... pasa hija, quiero contarte algo. Te gustaría un café?".

"No, prefiero un vaso de agua", respondió Amy rápidamente. La Sra. Fowler se dirigió a la cocina.

Amy se sentó en un sillón blanco con estampado de pequeñas flores rosas; Nicholas en su regazo jugaba con el celular. "¿A ver, a quién quieres llamar?" preguntó Amy.

"Pa-pá!", Nicholas respondió risueño.

Amy sintió un calorcito en su pecho con sólo pensar en Sheldon. "Descuida. Ya lo llamaremos en unos minutos", le dijo a Nicky.