Pov. Gabriela
Una ves regresamos a casa mi padre,mi abuelo y mi hermano de llevaron a Bastian diciendo que irían a jugar con unos amigos,a jugar por la sonrisa de mi padre lo llevarían a jugar un juego en pleno campo de tiro. Subí a mi habitación y me cambie por ropa más cómoda y fresca, luego salía recorrer la casa que me ha visto crecer,todos los cuadros,paredes,fotos,cuartos me traían recuerdos de mi infancia. Hasta qué llegue al salón de música...ese lugar era lo más preciado para mi en mi adolescencia,abrí las grandes puertas de aquella habitación y pude ver el gran piano negro que le perteneció a mi abuela Lili durante sus años dorados como pianista. Acaricie la tapa con la punta de los dedos, los recuerdos de aquellas tardes de era no o Navidad donde tocaba acompañada de mi abuela,de todas las competiciones a las que fui,las lágrimas que derramé aquel día, los gritos y aquellas canciones llenas de odio y rencor cuando mi corazón se rompió por segunda vez.
Levanté la porte cuela de las teclas,movía el asiento y una ves más esta habitación escucharía mi música.
La melodía salía por si sólo,mis manos se movían de manera natural.
Era reconfortante,me daba una sensación de paz el tocar una vez más,me desconectaba de la realidad olvidaba todo.
Cuando termine de tocar pude darme cuenta que no estaba sola en la habitación,mi familia y la de Bastian se encontraban alrededor mío y aplaudían,mi abuela se acerco y me abrazo con lágrimas en los ojos. Mi abuelo igual se acerco h beso mi cabeza, cuando desvié mi mirada de todo el mundo encontré a un Bastian alejado de los demás,pero su mirada era intensa como si quisiera ver atravesó de mi,mi corazón de acelero y me sentí diminuta ante su mirada.
Le regale una débil sonrisa y el se acerco me ofreció su mano y al tomarla me acerco a el refugiando me entre sus brasos.Todos regresaron a sus asuntos y yo subí a mi habitación para buscar un vestido para la cena de esta noche donde se haría una recaudación de fondos que celebraba mi abuelo cada año, lo recaudado era destinado para niños huérfanos en África y Asia.
Al final Bárbara me ayudo con mi peinado y las hermanas de Bastian con el maquillaje y accesorios. El tema de este año eran las máscaras y el blanco y el negro. Cuando salía de la habitación me encontré con Bastian quien traía un traje negro con una corbata plateada y una máscara negra.
-nos han combinado- el miro mi vestido y sonrió,me ofreció su mano de nuevo.
-las chicas lo han planeado-
Bajamos por las escaleras para reunirnos con los demás y luego subir a las limosinas para ir al hotel donde se llevaría acabo la cena....y donde por primera vez la prensa sabría de mi ahora compromiso con Anderson, y quien soy en realidad,la hija mayor de los Castielli ha regresado a su jaula de oro.
ESTÁS LEYENDO
Casada con mi Jefe
RomanceCuando Gabriela recibe una invitación de su jefe para cenar, se sorprende por que en los dos años que ha trabajado para David Reiford nunca la había invitado o siquiera dirigirle la palabra a menos que no sean instrucciones para su trabajo. Esa mism...