Mine (Kaisoo)

XVII

Abrió los ojos y bostezó estirando el brazo hacia la otra parte de la cama, tanteando sobre la sábana.

Kyungsoo ya no estaba.

La cama estaba fría a pesar de que su olor permanecía en el ambiente, por una parte era lógico que se marchase, se dio la vuelta y escuchó un crujido.

Se apoyó sobre los brazos y sonrió, Kyungsoo pensaba en todo.

Había una nota sobre el otro lado de la almohada, escrita con una caligrafía envidiable, se podía leer un claro "Muchas gracias por todo Jongin, eres un gran amigo".

Sonrió negando lentamente, definitivamente con Kyungsoo las indirectas no funcionaban.

No es que le disgustase considerarse su amigo, pero se había hecho a la idea de tener algo más con él, realmente tampoco sabía exactamente que le había llamado la atención. Kyungsoo tenía una personalidad compleja, no era extrovertido ni exuberante y se alejaba completamente de su prototipo de la pareja perfecta, pero tal vez era exactamente eso, la falta de perfección, no quería decir que tuviese algún defecto, pero era completamente diferente a lo que conocía, su forma de hablar suave y pausada, sus gestos sencillos y su sonrisa agradable eran cosas que nunca había tenido en cuenta y sin embargo con él había empezado a apreciarlas.

Había sido algo muy inesperado. No esperaba sentirse atraído por él, no iba a negar que el chico era atractivo pero en ningún momento se había sentido diferente al mirarlo, hasta el día que habían salido todos juntos, esa noche Kyungsoo le había demostrado que no existía la persona indicada, le había demostrado que todos estamos un poco rotos y le había sonreído a pesar de estarse derrumbando por dentro.

Después de esa noche las cosas habían empezado a cambiar, los ojos lo traicionaban y cuando se daba cuenta estaba memorizando cada gesto, cada sonrisa y repasando el contorno de sus labios de una forma casi ansiosa.

No iba a actuar, no tenía pensado exteriorizar sus pensamientos. Según Yifan, Kyungsoo y Chanyeol estaban en una relación y no iba a entrometerse entre nadie, si las cosas no salían bien prefería no estar involucrado.

Tal vez el día que Yifan lo envió a hablar con Kyungsoo sobre la discusión de Chanyeol y el otro chico había intentado aprovecharse de la situación, pero esperaba que Kyungsoo no fuese tan inocente como para que Chanyeol lo engañase de frente.

Ahora las cosas cambiaban, Kyungsoo estaba soltero, pero sabía que no podía ir directamente a atacarlo, el chico no había tenido buenas experiencias en el tema y eso condicionaría su forma de ver las relaciones, lo obligaría a estar alerta, además de que al parecer no había asimilado todas las indirectas muy directas que se había encargado de lanzarle.

Se removió y suspiró, llegaba tarde a su primera hora de clase.

Se dio una ducha rápida y salió corriendo del cuarto, esperaba llegar al menos a la segunda hora.

Boqueo al entrar en la clase, definitivamente no era un fan de subir escaleras y mucho menos si eran cuatro piso a trote.

Se dio la vuelta al sentir un papel impactar contra su nuca, bufó y se recostó en el asiento, en algún momento Yifan maduraria.

-No te he vuelto a ver Kim.

-He estado ocupado.

-¿Sabes que Kyungsoo no volvió a su cuarto anoche?.

-¿Por qué debería saberlo?.

-Fuiste el último en hablar con él.

Bufó y se pasó la mano entre el pelo, removiéndolo un poco. Sabía por donde iba el tema, conocía a Yifan lo suficiente como para poder afirmar que era un entrometido de primera, lo sabía todo de todos.

-Chanyeol estaba desesperado, llamó al hermano de Kyungsoo y se puso a buscarlo como un loco.

Asintió haciéndose el desinteresado, no le diría nada a Yifan, era su mejor amigo pero lo conocía lo suficiente como para saber que terminaría agobiandolo con el tema, aún más si descubría que le gustaba Kyungsoo.

Suspiró y negó lentamente.

-¿No tienes nada mejor que hacer que vigilar la vida de Kyungsoo?.

Suprimió una sonrisa al ver la cara de Yifan contraerse.

-Yo soló te ayudo Kim, me mantengo alerta por si hay alguna amenaza cerca, un depredador rondando, tu me entiendes.

Negó y se sentó recto mirando hacia la pizarra, no es que fuese fanático de la asignatura, pero no podía darse el lujo de pasarse la hora perdiendo el tiempo.

El día se le pasó más rápido de lo normal, tenía que preparar tres exposiciones y dos trabajos de documentación.

Cuando se dio cuenta había vuelto al auditorio. Era un de los lugares en los que se sentía tranquilo, la mayoría de la gente no se aparecía por ahí a no ser que estuviesen en el grupo de teatro. Entró despacio, le encantaba la sensación de paz que le transmitía, subió al escenario y suspiró. Después de haber hablado con Kyungsoo se había acordado de un par de cosas, hacia mucho tiempo que no se sentía tan bien con alguien, le transmitía tranquilidad y era una de las mejores sensaciones que jamás había experimentado.

Saco el móvil de uno de los bolsillos de la mochila y se lo guardo en un bolsillo del pantalón, después de poner la música en modo aleatorio y empezar a bailar. Hacia mucho tiempo desde que no lo hacia, las piernas se empezaros a mover solas y el cuerpo empezó a seguir el ritmo de la música, sonrió en mitad de su locura esporádica, se sentía bien.

Y en mitad del baile se dio cuenta de lo que le había llamado la atención de Kyungsoo, él consideraba que cada persona representaba una melodia, unas eran más agradables que otras, más rítmicas, más enérgicas ,pero nunca se había topado con una como la de Kyungsoo. Su melodia era completamente opuesta a la de los demás, tenía su ritmo, sus acordes y sobretodo representaba la pasión desenfrenada.

Kyungsoo era como un tornado y había llegado a poner su mundo al revés, le había roto los esquemas con solo sonreír, definitivamente iba a elegir su melodia.

Lo prometido es deuda, hoy es 21, hice mi último examen y les traje su recompensa por la espera, muchas gracias por esperarme, se avecinan cosas buenas.