Capítulo treinta y tres.

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Él comenzó a hablar, pensé que hablaba dormido, pero no era así. Él comenzó a hablar con sus ojos cerrados.

-¿Descansaste bien?- me preguntó.

-Mjm- mi corazón latía a mil.

-Estás asustada- aseguró.

-Eres un idiota, me asustaste- le reproché.

-Lo sabía- dijo abriendo los ojos.

Reímos juntos.

-Eres hermosa cuando ríes- dijo mirando mi boca y luego mis ojos, me sonrió acto seguido.

-Gracias- estaba más colorada que un tomate.

Niall se iba acercando cada vez más a mí, yo no lo negaba, me gustaba el hecho de que estuviera pasando esto y no podía huir de su mirada, de sus ojos y de sus labios.

-Chicos- dijo Anne entrando por la puerta- Uy, perdón, lamento interrumpir, de veras- dijo ella agarrándose la cabeza.

Niall rápidamente se separó de mí y los dos nos incorporamos en la cama.

-No interrumpes- dije avergonzada.

-¿Qué necesitabas?- dijo Niall a su hermana.

-Venía a decirles que iremos con los chicos a la playa, hace calor, ¿Irán?

-Vale- contestamos al unísono.

Niall se levantó y se desperezó.

-Toma la ducha primero, si quieres, yo me quedo aquí- dijo Niall ofreciéndome.

-Okey- dije entrando al baño.

Tomé una ducha rápida y salí con una bata hacia la habitación rogando que Niall no estuviera allí para que no me vea. Cuando salí no lo vi por ninguna parte, así que aproveché y busqué un traje de baño perfecto para ponerme.

Al final me puse un bikini floreado, una musculosa blanca y una pollera playera color marrón, en los pies unas sandalias que tenían unas pequeñas caracolas y tomé un bolso para la playa con estampa de florcitas. Salí de la habitación buscando a Niall. No lo encontraba en el comedor, así que subí al cuarto de Anne.

-Anne, ¿Lo viste a Niall?- dije abriendo la puerta, pero no me encontré con mi amiga, sino con Niall.

-Aquí estoy- segunda vez que encontraba a Niall con toalla y su abdomen descubierto. Me sonrojé inmediatamente.

-Niall, perdóname, lo siento, no pasará de nuevo- dije nerviosa.

Él se sonrojó.

-Bien, me cambiaré y estaré contigo en unos minutos, o ahora si quieres- dijo riendo por la última frase.

-¡Niall!- dije histérica, reí ante su comentario- vale, te esperaré abajo.

-Vale- dijo sonrojado.

-Te ves lindo sonrojado- dije haciendo que se sonroje más.

Bajé y esperé como 10 minutos hasta que Niall apareció.

-Bien, seguro que están en la playa, vamos- dijo Niall agarrando las llaves de la casa y el auto.

-¿Vamos en tu auto?- le pregunté.

-Sí- dijo saliendo de la casa.

Él sacó su auto que ocupaba cuando estaba en la casa de la tía Paola. 

Se bajó y luego me abrió la puerta, como un caballero, yo entré con una sonrisa tímida, sonrojada hasta los pies. ¿Qué con todo lo que haga conmigo me iba a hacer sonrojar?

Niall se metió en el auto y cerró la puerta. Iba a arrancar pero se detuvo a mirarme.

-Eres hermosa sonrojada, ¿Ya te lo dije?- me dijo haciéndome sonrojar el doble.

-Sí, ¿Vas a arrancar?- dije nerviosa.

-Qué chica apurada.

-Tengo calor- dije riendo.

-Yo te voy a refrescar- bromeó.

-Ya Niall, arranca el auto- dije mientras reía.

Niall arrancó y pronto, como en unos 20 minutos, llegamos a la playa, era con una arena muy blanca y con un mar celeste como el cielo.

Niall estacionó el auto y empezamos a bajar los sillones y cosas que ibamos a comer.

Pusimos las cosas en una montaña de arena, junto a la de los chicos.

-Vamos al agua- le dije a Niall mientras me sacaba las sandalias y luego la ropa, para finalmente quedar en bikini.

-Vamos- dijo Niall cuando se sacaba la playera y quedaba con su pantalón de traje de baño.

Fuimos hacia donde estaban Anne, Liam, Louis, Eleonor, Zayn, Perrie, Harry y Taylor.

-Hola chicos- dijo emocionada Taylor.

-Hola Tay, hola chicos- dije saludando a todos.

Me saludaron con la mano y lo llamaron a Niall.

-Niall, vamos a surfear, ¿Vas?- le propuso Louis.

-Sí, busco la tabla y voy- a los minutos llegó Niall con su tabla para ir a surfear con los chicos.

Yo me quedé hablando con las chicas de lo que había pasado ayer.

-Te vimos muy cariñosa cuando estabas dormida con Niall- dijo Perrie.

-Estabas muy recostadita en su hombro- dijo Eleonor.

-Como si lo disfrutaras- dijo Anne.

-Y se miraban como si estuvieran solos en el mundo- agregó Taylor.

-¿Amor?- dijeron todas a coro.

-Ya basta chicas, solo nos estamos llevando mejor, solo es eso, nada más- dije nerviosa.

-¿Segura?- dijo Taylor.

-Sí, mejor- dijo Perrie.

-Se veían muy acarameladitos- agregó Eleonor, mirando de reojo a Anne, que rió ante su acción.

-Ya basta, ¿Si?

-No, hasta que admitas que te gusta un poquito- dijo Taylor.

-Basta, no me gusta, basta chicas, hablemos de otra cosa- dije desviando el tema.

Golpe de suerte (Niall y tú). EN EDICIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora