Pero fue el diablo quien alas te dio [NamJin]

Kim SeokJin

Nunca en su vida pudo llegar a pensar que le pasaría algo así, de hecho para un muchacho de su edad él pensaba que las cosas eran demasiado fáciles. Era obvio, nada le faltaba.

Sus padres eran demasiado amorosos con él, todo un niño de casa y su popularidad en la universidad afloraba como las bragas de las chicas en las fiestas. Le encantaban las miradas, los ojos ajenos sobre su hermoso físico le extasiaban porque sabía perfectamente las intenciones de esas personas. Cada paso que daba, resonaba en el piso y su ego aumentaba seguro de sí mismo como viento en popa. Los comentarios malintencionados llegaban a resbalarle como aceite en el cuerpo y muy a pesar de su egocentrismo, era una persona amable.

Sí, era virgen y todos podían creer que era gay por lo arreglado que llegaba cada mañana ¡pero no señor! . En su mente, pensaba que nadie era capaz de llegar a sus talones; por eso las chicas sólo suspiraban sumergidas en una enorme envidia por su tez tan perfecta. Alguna que otra nueva ingenua había declarado su mísero amor en una vulgar carta o estúpida confesión, pero como vuelvo a repetir:

Nadie estaba a la altura de
Kim SeokJin

Al menos, eso creía él.