Capítulo 14:

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Narra Marc:

Esto era realmente difícil para mí. Nunca me había gustado una chica menor,nunca me había preocupado tanto,no solo porque era parte de mi familia,sino porque me importaba,más allá del vínculo. Me estaba volviendo loco,era impensable esto.

Lleno de rabia tiré las cosas de mi estantería. No controlaba la furia,su imagen venía a mi cabeza. Sam,te quiero,pero no puede ser así. De repente,mientras demolia lo que estaba a mi alcancen,encontré una foto de mis padres y yo. Me senté en el suelo y la cogí. Porqué tuvo que suceder eso,por mi culpa,mi maldito cumpleaños. Mis padres...ahora estaba solo. Aunque me acogieron los padres de Hugo, estoy sólo. Comencé a llorar mientras tapaba mi cabeza.

Busqué en mi armario una botella de alcohol que guardaba para que el padre de Hugo no la descubriera. La abrí, era Ron. Pegué tragos de ella,estaba ácido pero al cabo del rato un buen sabor me venía.  Mis lágrimas no cesaban,ni yo mi ritmo al beber.

Narra Sam:

Había ido a la biblioteca del pueblo a por unos libros nuevos juveniles. Me pasé horas intentando decir cuál llevarme,puesto que ya tenía el límite de libros permitidos.

Iba a pedir el préstamo cuando de camino al mostrador un recorte de periódico me llamó la atención. "El Rancho de William se proclama el mejor de la comunidad". Adivinad qué,que Hugo y Marc salían de pequeños. Le hice una fotocopia para llevarlo y que lo vieran.

Cuando tuve ya las cosas que necesitana,fui a casa. Quería que Marc viera ese recorte de periódico. Subí a la habitación y llamé. No me contestaba y volví a llamar,pero nada. Decidí irme cuando escuché que algo caía en su habitación. Con permiso o sin él,entré. 

Había un gran destrozo, fotos y cosas tiradas por el suelo,Marc apoyado en la cama con una botella de Ron casi acabada. Corriendo me acerqué a él. Vi sus ojos rojos y húmedos de haber llorado. Le quité la botella.

Yo:Marc,¿por qué? -él me miro y sonrió irónicamente. Lo levanté como pude y no pude y lo senté en la cama. Comencé a recoger el estropicio. Vi una foto que no me sonaba,eran los padres de él y él de pequeño,mi padre me contó la historia.

Una vez recogida la habitación me senté a su lado a charlar.

Narra Marc:

Es irónico que una cría me de charlas sobre el alcohol. Mi dulce e inocente Sam. Acaricié su cara, si no tuviera miedo ya te hubiera besado.

Sam:Venga, vamos a la ducha.

Me echó mi brazo encima de su hombro y fuimos a la ducha. Me desvistió quedándome en calzoncillos. El agua fría daba en mi cabeza de forma que me depejaba. Debería cuidar yo se ella y no ella de mí.  Siempre he hecho todo mal. Comencé a llorar. Sam paró el agua y me abrazó.

Sam:Shhh...ya está.

Alcé la cabeza y la miré a los ojos.

Yo:No entiendes nada...déjame solo.

Sam :No estás en condiciones.

Yo:Déjame solo,por favor.

Sam:Estaré en la puerta.

Cuando se fue comencé a ducharme, el agua resbalaba por mi cuerpo y me sentía algo mejor. Salí de allí y corriendo fui a vomitar. Sam llamaba desde fuera y preguntaba si iba todo bien,le dije que sí . Me vestí y salí.
Yo:Voy...a la cama....Sam-dije costosamente. Ella me acompañó y arropó.

Narra Sam:

Desperté cuando alguien tocaba mi cara. Era Marc. Miré la hora,las 19:00,eché una larga siesta.

Yo:¿Cómo te encuentras?

Marc:Mejor. Gracias.

Yo:No quiero verte más así. -dije tocando su barbilla.

Marc:Son arrebatos que me dan.-la abracé. Hundí mi cabeza en su sedoso pelo. Levantó la cabeza,volvimos a estar a escasos milímetros. Solo pensaba en besarla,¿haría bien? No me lo pensé y así lo hice. Agarré su delicada cara y la besé, con las ganas con las que me quedé la otra vez. Ella también tenía ganas. Nos separamos por falta de respiración.

Yo:Esto no ha estado bien.

Sam:Era lo que los dos queríamos.

Yo:No a debido de pasar.

Sam se fue cabreada de allí. No quería que se enterara nadie. No quería que pensara que podríamos tener algo.

La edad no importa...¿o sí? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora