She's not me. [STEREK, editando]

Prólogo.

—Derek, tenemos que hablar— musitó el castaño, mirando al piso y nervioso. Jugueteaba con sus manos y movía su pie derecho constantemente. No podía estar quieto, cosa que le preocupaba a su novio. 

—¿Sobre qué?—preguntó angustiado el moreno, alzando su mirada para luego posarla fijamente en Stiles, quién se había parado de la silla para estar frente a él. 

—Sobre nosotros— vaciló un poco, pero al final articuló las palabras, dolido. Tenía ganas de llorar, quería llorar. La verdad es que no quería terminarle a Derek, pero tenía que hacerlo. Debía hacerlo. 

—¿Qué pasa?—Derek estaba temeroso, y la pregunta sólo lo afirmó. 

La verdad es que había notado a Stiles extraño en esos días, distante y distraído, y claramente le había preguntado la razón, pero el menor simplemente le respondía un falso "nada".
Derek -aunque ciertamente inseguro- no siguió preguntando ya que no quería presionarlo ni agobiarlo a que le diga algo más.

—Tenemos... tenemos que terminar—dijo finalmente, su voz quebrada, mirando al piso con ojos llorosos. Trató de espantar las lágrimas que venían en camino parpadeando, pero su corazón se sentía estrecho contra su pecho, y sus labios temblaban con el solo hecho de tener a Derek al frente suyo. No quería hacer esto, lo único que quería era abrazarlo, besarlo, decirle que lo amaba. Pero las cosas entre ellos dos no iban bien. 

El ojiverde no dijo nada, se quedó callado y estupefacto. Más que estupefacto, quedó afligido. No quería perder a Stiles, a la única persona que amaba realmente, a la única persona que supo apoyarlo, entenderlo y amarlo. A la única persona en cual confiaba. No quería perder a Stiles, el chico del cual estaba completamente enamorado. El chico que pensaba que nunca lo dejaría como los otros a pesar de sus defectos, pero se equivocó. 

Derek sintió un dolor inigualable, agotado y débil. Sintió como todo, en una pequeña fracción de segundos, se desmoronó, como si todo realmente cayera encima de él. Sintió como sus lagrimales se llenaban mientras miraba a los ojos de su amado, quién ya lloraba. Sintió como su voz no trabajaba, al igual que sus pulmones y en su pecho se incrementaba una opresión tan fuerte que le hacía sollozar. Fue como, más o menos, un cuchillo.

Derek y Stiles quedaron destrozados. Se quedaron con la misma tristeza y herida. Con la diferencia de que Stiles quiso superar a Derek y se fue con Lydia, mientas que Hale moría de celos y de dolor.