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-Es la segunda vez que estas el hospital durante este año y no sé el porque, si tan solo me lo dijeras yo podría ayudarte -Eso fue lo primero que escucho Carlos de parte de su hermano en el hospital, sin embargo, Dani no sabía que estaba siendo escuchado ya que su hermano mantenía los ojos cerrados.

Daniel pdv:

-S-Si es que, ¿Por qué no me lo dijiste? Sigo sin saberlo porque le habías avisado al doctor que si alguien preguntase no informase nada, ¿Pero que pasa? ¿Ya no confías en mi? -Pregunté, no puedo explicar el dolor e impotencia que sentía.

De pronto la puerta se abrió, dejando ver a una chica alta de cabello oscuro, su novia. ¿Qué hacía aquí? En todo el período de su accidente ella no había aparecido en ningún momento, ¿Cómo se atrevía? Me pare en frente de la camilla de una manera defensiva y  ella me miro con tristeza, o eso creo.

-¿Podrías dejarnos solos? -Oí una voz detrás nuestro y ambos nos volteamos hacia la camilla, era mi hermano quien me pedía esto. Voltee hacía él, quería negarme pero no podía si era él el que lo pedía.

-Bien, con que así son las cosas -Espeté, estaba triste y enojado, no podía pensar con claridad y no se me ocurrió mejor idea que desquitarme con él, le miré y me devolvió la mirada con tristeza, una mirada rota, con miedo.

Indignado y un poco confuso, me fui de la sala cerrando de un portazo. No lo podía creer, siempre me echaba de su vida así de fácil, aún cuando fui yo él que le acompaño todo este tiempo, la elegía a ella sobre mi, a ella, que ni siquiera estuvo con él. Salí del hospital y tomé el auto para ir a casa, necesitaba pensar.

Carlos pdv:

Me dolió, dolió verlo salir tan enfadado conmigo que incluso parecía que me odiase pero creo que esto sera lo mejor para lo que viene. Mi novia tomó asiento a mi lado con lágrimas en los ojos, recordándome lo que tenía que hacer.

-¿Por qué me dijiste que no venga cuando tuviste el accidente? ¿Vas a terminar conmigo, cierto? -Preguntó ella y yo baje la mirada, era demasiado evidente.

-Esto ya no funciona para mi, lo siento -Aclaré y ella se levantó un poco enfadada sin decir palabra pero antes de que se vaya le tome la mano -P-Pero te llamé aquí para agradecerte, me hiciste pasar grandes momentos, llegue a amarte y fui correspondido, no hay cosa más bonita que eso. Pasamos mucho, recuerdos que conservare para siempre p-pero supongo que incluso lo hermoso tiene su final. Hubo un momento, no sabría decir cual, en el que deje de sentir algo así, pero aún así te aprecio mucho y querría que algo tan bello como lo es una relación estable terminase tal y como lo fue.

Ella me sonrió, limpio sus lágrimas con la manga de su sweater y prosiguió.

-Estoy de acuerdo, gracias a ti también, por amarme en algún momento -Dijo ella sin dejar de sonreír e incluso hizo que mis ojos se cristalizaran, hace mucho que no la quería de esa manera pero era triste terminar algo que en su momento fue lo más lindo. Me dio un suave y último beso al cual no me opuse y se fue.

Cuando lo hizo, pase mi mano por mis ojos eliminando cualquier rastro de lágrimas de ellos y tomé mi celular, intente llamar a mi hermano y como esperaba, atendió el contestador. Dejé un mensaje un poco largo, despidiéndome, y lo deje sobre la mesa, a los segundos entró una enfermera quien me miro compasiva.

-Carlos, ¿Estás listo para la operación? Sabes los riesgos que conlleva, ¿No quieres esperar a alguien?  -Me preguntó, negué con la cabeza y ella me miro extrañada -¿Ni siquiera al chico de la otra ocasión?

-No gracias, cuanto antes mejor.

-Esta bien, llamare a los médicos -Dijo ella y se retiro.

No voy a mentir, tengo demasiado miedo.

Dark Tri8choDonde viven las historias. Descúbrelo ahora