-¿"Estos son"? ¿Eso fue lo que dijo? Dios, eso es tan él -Dijo con gracia y melancolía combinadas uno de los amigos de Dani.
-Lo había dicho en muchos vídeos, nunca pensé que esa situación se daría -Admitió el contrario, mirando a su hermano en la camilla en frente suyo, desde hace dos días que no despertaba y él se había quedado en la silla a su lado, únicamente volviendo a su casa para bañarse.
-¿Todavía no había despertado? -Pregunto la voz masculina del otro lado de la línea, no había conocido al hermano del contrario pero aún así sonaba preocupado.
-N-No, pero lo hará -Afirmo con esperanza fingida mientras veía como su hermano respiraba de manera calmada y aún inconscientemente, apretaba la mano de su hermano que estaba entrelazada con la suya.
-Estate seguro de que si. En fin, me tengo que ir amigo, estará bien pero no te descuides -Se despidió de manera amable recibiendo una despedida del contrario para, seguidamente, colgar.
Pasaron uno minutos bastante silenciosos, donde el menor se limitaba a mirar a su hermano con melancolía, mientras pensaba en todo los momentos pasados y algunas lágrimas escapaban de sus ojos. No podía terminar así, no ahora. Pero eso no iba a suceder, ya que Carlos comenzó a abrir los ojos lentamente. Su hermano lo miraba emocionado y a penas su hermano le miró, se tiro a abrazarlo con fuerza.
-Pensé que moriría -Afirmo el teñido apretando fuertemente al contrario entre sus brazos mientras este soltaba lágrimas de felicidad.
-No digas eso, sabía que lo lograrías -Le pidió el menor, tratando, en vano, de reprimir las lágrimas.
-Me alegra seguir aquí -Aclaro, manteniendo la posición mientras Dani pasaba una de sus piernas sobre la camilla para poder estar más cómodo.
-¿"Estos son"? ¿En serio? -Pregunto Dani en chiste pero con la voz aún quebrada por las lágrimas.
-Lo dije en los vídeos, quería que fueran mis últimas palabras -Admitió el mayor, sin romper el contacto, simplemente acariciando suavemente la espalda del contrario.
-S-Si, lo sé pero no pensé que fuera en serio.
Se quedaron allí un largo rato, ninguno se sentía incómodo ya que era más bien un silencio tranquilo, brindándose el calor que ambos necesitaban. Carlos no podía evitar pensar en lo que había dicho su hermano cuando él estaba inconsciente, a pesar de su estado, había podido escucharlo y le había parecido que se había confesado, "¿Es eso posible?" Se preguntó pero en seguida descartó la idea, no pensaba ilusionarse.
Los minutos pasaban y ellos mantenían el abrazo, hasta que el mayor se percató se que el contrario se había dormido, por lo que corrió un poco su cuerpo y lo dejo acostado a su lado, simplemente observando su tranquilidad y cada perfecto detalle de su rostro.
Carlos pdv:
No puedo más, no así, tal vez este llegando a mi limite pero los días pasan y cada vez se hacen más largos. Cada vez lo noto más cerca y no puedo seguir sufriendo, me hace mal y no puedo alejarme como lo hice antes, no ahora que me necesita. Cuando empecé a sentir estas cosas por el, fue fácil, simplemente tome distancia y me volví frío, todo fue sencillo porque yo me alejaba y el no me buscaba pero cuando él quiso tenerme cerca, yo no pude negarme. No puedo negarme a él. Lo mire, respiraba de manera suave y profunda, susurraba algunas cosas inaudibles pero más que nada se aferraba a mi con fuerza.
De pronto, una enfermera abrió la puerta aunque mi hermano no se despertó. Ella nos miro sorprendida aunque su mueca rápidamente cambio a una de ternura y yo no podía evitar sentir vergüenza de que nos viera de esa manera.
-¿Cómo te sientes? -Preguntó en un susurro apenas se había acercado a la camilla, parecía que tenía cuidado de despertar a mi hermano, cosa que había logrado ya que él seguía dormido y abrazado a mi.
-Mucho mejor que antes, ¿Cuándo podre irme? -Pregunté y enseguida cambio su mueca a una un poco asustada y nerviosa. Era una chica joven, probablemente nueva.
-Generalmente le digo estas cosas a los acompañantes de los pacientes pero veo que no esta disponible, así que, como eres mayor de edad, no habrá problema con que te lo diga a ti -Habló primero refiriéndose a 8cho, a quien miro de soslayo con una sonrisa porque la situación era graciosa y después a mi.
-¿Es grave? -Pregunté intentando mantenerme tranquilo, cosa que no era difícil, pues yo era una persona tranquila, esto pareció tranquilizarle un poco y casi no temblar al asentir.
-Probablemente puedas irte en menos de una semana pero hay un problema -Empezó ella y respiró profundo antes de seguir -Los doctores han detectado algo... No saben muy bien que es pero es bastante grave, tendrás que volver cada mes a hacerte un estudio ya que necesitan saber que es antes de cualquier tratamiento.
-Claro, entiendo -Le dije con tranquilidad, ella simplemente respiro de alivio y se fue, cerrando la puerta tras de si.
En ese pequeño instante donde la puerta se cerro tras de si, no pude evitar sentir como si algo se rompiese dentro de mi, no me importaba lo que pasase, me importaba Dani y como se iba a sentir si a mi me pasase algo, no quería dejarlo solo. Cuando unas pequeñas lágrimas se me escaparon de los ojos fue cuando el despertó.
-Ah, me dormí, ¿Qué pasó? ¿Dijeron algo? -Fue lo primero que pregunto, mirándome con preocupación.
-Nada importante, saldré en menos de una semana -Le respondí, limpiando las lágrimas con mi manga y dedicándole una sonrisa.
Y ahí fue cuando lo resolví, no le diría.
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Dark Tri8cho
Fanfiction"Tengo miedo de la oscuridad, ¿Me abrazarías?" -Historia corta.