Ángel

7. John

Giro sobre mis talones para ver quien fue el estúpido que me dio un azote en el trasero. Lo primero que encuentro es a un pelinegro mordiendoce el labio inferior. Me inclino hasta dejar nuestras caras al mismo nivel.

—¿Quién demonios te crees para darme un azote en el culo, estúpido? —se levanta de golpe al escuchar la palabra estúpido, sólo me enderezo. Notablamente es más alto que yo, mide prácticamente lo mismo que Peter.

—¿Y tu quien te crees para hablarme, princesita?

—Me creo Alessandra —miro la botella que esta en mi mano derecha y sin pensarlo la derramó sobre su cabello negro empapandole la camisa —. No me vuelvas a llamar princesita y mucho menos se te ocurra volver a azotarme el culo.

—Mira estúpida —me toma del cuello pero ni me inmutó, en vez de quejarme sonrió irónicamente—, tu no eres nadie para venir y retarme a mi de esa manera.

Me safo de su agarre y pego mi cara a la de él mirándolo directo a los ojos.

—Y tu mucho menos para creerte alguien tan importante. No eres el dueño de este lugar, sólo eres el amigo del hijo de la directora —reanude mi camino pero sólo pare sin dar la vuelta para decirle algo super lindo —. No te queda el color durazno, se me hace muy masculino para ti, no te lo pongas.

El resto del día fue normal, seguí hablando con Jane de diversas cosas, ella se medio enojo por lo que le hice al pelinegro. A la hora de la salida llegó Peter por mi aún con el uniforme.

—Tenemos que ir a entrenar.

***

Era sábado, gracias a Zeus que era sábado. No soportaba estar en las clases. Sólo veía cosas que ya sabía, me parecía absurdo, algunos maestros estaban equivocados, cuando abrían la boca se notaba que la mayoría de las cosas que saben lo sacaron de Wikipedia.

—¿Qué vas a hacer hoy? ¿Irás a la agencia?

—No, tengo que ir por Cody al aeropuerto.

—¿Regresará hoy? Pensé que regresaría hasta la próxima semana.

—Surgió algo en su escuela. Llegará como a las seis de la tarde.

—¿Tomaras el día en la agencia?

—Por eso Peter fue, él le dirá a Mario que tengo que buscar a Cody, Mario nunca se opone cuando nombró a Cody, ¿Me acompañaras a buscarlo?

—No, tengo una cita —la mire sin entender, se suponía que a ella le gustaba el príncipe  —.  Antes de que preguntes es con mi dentista.

—Pensé que te habías olvidado de Frederick.

—¿Cómo lo olvidaría? Es el chico más dulce que pude haber conocido.

—¿Mantienen contacto?

—Si, realmente a estado muy ocupado. Dice que le encantaría venir en cuanto pueda, que quiere verme otra vez.

—Es buen chico. Sobre todo después de lo que esa perra de A. S. I.

—Y eso significa...

—Agentes Secretos Internacionales.

—Siempre me he preguntado por que es que ellos hacen todo eso, ¿sabrán que lo que hacen está mal? ¿Que ellos son los malos y no ustedes?

—No podría contestar esa pregunta correctamente pues en realidad no se.

—¿Vas a hacer la cena? —preguntando cambiando totalmente de tema.

—No, pediré comida, ¿vas a cenar con nosotros?