Emilyd Jons.
Lo tomé de la mano y lo llevé conmigo, subimos a mi auto, chris estaba muy desconcertado y no dejaba de preguntarme: "¿Dónde me llevas?, pero yo solo encendí el coche y empecé a conducir. Después de unos minutos él se resigno de preguntarme a donde lo llevaría y un silencio nos invadió, era uno de esos silencios incómodos, interrumpí diciendo:
— ¿Muy aburrido?
— No, la verdad muy confundido, hay muchas cosas de ti que me intrigan.
— Haber... ¿qué quieres saber?
— ¿Enserio? ¿me responderás?
— Solo pregúntame lo que "tanto" te intriga.
— ¿Quién eres?
— Solo soy una chica de harrow—Sonreí.
— Hablo enserio, quiero saber ¿quién eres? estuve buscándote por las redes sociales y ¿qué crees? no te encontré por ninguna parte ¿quién no usa redes sociales en pleno siglo XXI?
— Yo, pues la verdad chris, no me gusta nada de eso...
— ¿Okay? deberías, pero ya dime ¿dónde me llevas?
— De nuevo con eso, solo quiero mostrarte un lugar...
— Si querías estar a solas conmigo solo debías decirlo ;)
— ¿Disculpa? iluso.En esos momentos observé el semáforo, la luz acababa de cambiar a color rojo, por lo que me detuve... Cuando de repente en mi cabeza sonó su voz susurrándome:
— ¡Hazlo! ¡Hazlo! No soporto estar más aquí...
Christopher Odegaard.
¿Iluso? En realidad me había llamado así... En segundos escapé de mis pensamientos al sentir que el auto se detuvo, pensé que habíamos llegado, pero luego observe un semáforo en rojo así que suspire y mire los árboles que se encontraban en el lugar y aprecie por un segundo los alumbrados públicos de la ciudad. Unos segundos después escuché las bocinas de varios autos detrás de nosotros, así que mire nuevamente el semáforo y estaba ya en luz verde. Miré a Emilyd diciendo:
— Oye, por si no sabías la luz verde significa que ya podemos avanzar.
(No obtuve respuesta)
Volví a decirle que avanzara, pero no respondía. Sus ojos miraban hacia el frente pero sentía su mirada perdida, era como si estuviese en un trance... con mi mano toque su hombro un par de veces mientras decía su nombre y ahí fue que reaccionó diciendo:
— ¿Qué? ¿Qué sucede?
— Eso te pregunto a ti, no escuchas, estamos obstruyendo el paso.No dijo nada y empezó a conducir.
Sinceramente me preocupó un poco lo que le había sucedido así que no pude ignorar preguntar:
— ¿Estás bien?
— Si, claro ¿por qué la pregunta?
— Será porque tu mente se fue por dos minutos de este planeta...
— Si exageras, solo estaba cansada.No se porque sus palabras no me convencían, algo extraño pasaba con ella, su actitud tan descomplicada se había ido, ahora su rostro estaba en blanco, lo notaba más "extraña" de lo normal. No hubo conversación por el resto del camino, el silencio nos invadió. Luego de un par de minutos el auto se detuvo, vi que ella se desabrochó el cinturón de seguridad mientras dijo suavemente "llegamos".
Bajamos del auto y lo primero que hice fue sacar mi celular para saber la hora, no era tan tarde 8:04 p.m. También noté que tenía un par de mensajes de Jostan, Dylan y otros contactos... Abrí el chat de Jostan:
- J
— ¿Cómo va tú cita romántica? ¿Ya sabes qué es lo que quiere contigo?
- C
— Primero esto no es una cita, segundo mucho menos romántica y tercero no, aún no lo se, subimos a su auto y me acaba de llevar...
Miré un letrero con el nombre del parque: "Northwick park" y seguí escribiendo:
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La sabiduría de los dioses
Bilim KurguChristopher Odegaard, un joven estudiante de la preparatoria "Harrow School" lleva una vida de diversión y comodidad, es muy seguro de si mismo y siempre lleva pinta de galan, y vaya que es un galan muy amante de la física. Todo parecía bien para Ch...