Two idiots in love ✦ TaeKook

Capítulo #O16

Jimin esperaba impaciente a que la clase de matemáticas se acabara, por lo regular pasaba esa horrible hora en compañía de Jungkook, pero éste no se había presentado en el primer periodo y empezaba a preocuparse.  Sin aguantar más, alzó la mano para llamar la atención del profesor, de algo debía de servir la típica excusa de los fanfics escolares que tanto le gustaba leer.

— ¿Sucede algo, Park? —preguntó el maestro, arreglando sus lentes con dos dedos; su mirada escudriñaba al de cabello rosa.

— ¿Puede darme permiso para ir al baño? — El maestro puso cara de querer negarse, así que Jimin se apresuró en hablar—. Es urgente, lo juro.

—Tiene quince minutos, vuelva rápido.

Vale, a la autora le daban como dos minutos para ir al servicio pero es un fanfic y aquí se pueden hacer las cosas imposibles, posibles. Por ejemplo, revivir a Koro-Sensei.

Oh, me desvíe, lo siento.

Continuando con la historia, como alma que lleva el diablo, Jimin abandonó el salón de clases y se encaminó al baño, en realidad sí tenía ganas de ir, pero se fugaría para buscar a su mejor amigo.

Era más importante encontrarlo que ir a satisfacer sus necesidades.

Si Jungkookie no está, el dolor es más grande.

Suspirando metió las manos en los bolsillos de su chamarra escolar, caminando unos metros más hasta que llegó a su destino. Antes de que pudiese empujar la puerta, ésta se abrió dejando que el cuerpo de Min Yoongi se estrellara de frente con el suyo; sorprendido, Jimin se preguntó si el curso del mayor estaba en clase de computación, lo cual explicaba la aparición de él en los pasillos de primero.

Sacudió su cabeza, mirando fijamente al rubio.

Siento que esto ha pasado en otra ocasión.

— ¿Qué carajos? Oh, Jimin— Yoongi se percató de su presencia, sonriendo levemente.

—Hola...—saludó en voz baja, sus labios temblando al recordar las palabras que su mejor amigo había dicho hace una semana.

Le era imposible olvidar aquello, sobretodo cuando llevaba días esquivando cualquier contacto que pudiera tener con Yoongi.

Porque te mintió, ama a Kim TaeHyung y tú sólo eres un idiota con sentimientos no correspondidos.

Jimin quiso reír, su subconsciente le jugaba una mala pasada y en ese momento, no se sentía tan compuesto como para retener las lágrimas que amenazaban con salirse de sus ojos.

— ¿Qué te sucede? — Yoongi se preocupó, el muchachito que conoció aquella mañana fría no se parecía ni un poco a la presencia sin vida frente a él—. ¿Estás enfermo? ¿Necesitas ir a la enfermería?

El rubio estiró su mano con la intención de tocar la frente contraria, Jimin se alarmó y haciendo todo el uso de su flexibilidad, retrocedió como un artista lo haría frente a sus haters locos.

El ceño del joven Min se frunció, la actitud del mejor amigo de Jungkook era bastante extraña, bueno, más de lo normal.

¿Acaso lo estaba rechazando?

—N-no te preocupes, estoy bien.

Jimin sonrió nervioso, sus manos sudando por el repentino frío que invadió a su cuerpo; Yoongi enarcó una ceja, confuso por la actitud de su -recientemente confirmado- amor platónico.

— ¿Acaso estás ignorándome? —atinó a preguntar.

No, imbécil, estoy tratando de no dañarme más.