Entramos al centro comercial a comprar los helados y unas cuantas cosas más. Al salir, me encontré con una sorpresa, estaba Liam con una chica, la había visto en algún lado, pero no me acordaba en dónde. No estaban de la mano ni nada, sólo...caminaban. Las chicas no lo notaron, yo sólo lo miré y seguí caminando. Al parecer no notó mi presencia, o me estaba evadiendo...No lo sé ni lo averigüé, seguí caminando junto a las chicas. Cristina y yo tomamos nuestro skate y Vania tomó su bicicleta, y comenzamos a andar. Antes de salir completamente del lugar, miré una última vez hacia atrás, no pude evitarlo, estaba enamorada completamente de él y era una necesidad para mí verlo constantemente. Al voltearme estaba abrazando a la chica, tenía cara triste, claro, ahora entendía, ella era su paño de lágrimas, su consoladora. Aunque no le creo nada, me dio pena al ver su rostro, me preguntaba por qué era así si él tiene la vida que cualquier chico de nuestra edad quisiera tener, debe tener miles de chicas a sus pies, pero aún así estaba triste, sin razón alguna para mí.
-(Tn)...
-Ah?! Si, ¿qué?
-Hay que ir a casa...¿Qué miras tanto?
-No es nada, sólo son estupideces mías.
-Ok...
-Vamos.-Dije finalmente volteándome nuevamente para ir rumbo a casa.
Andamos en skate hasta cerca de nuestras casas, nos despedimos y luego yo seguí sola hasta la mía. Iba pensando en quién podría haber sido la chica que tenía su compañía, sabía que la había visto en algún lugar, pero no recordaba en dónde. Al llegar a la casa, introducí la llave en la cerradura y cuando entré, no había nadie...De seguro mamá tenía alguna cita, después de todo, hace tiempo que no tenía una. Subí a mi habitación, quería relajarme. Tomé mi guitarra y empecé a tocar una canción que me encanta, su nombre es "Payphone". Pensaba en Liam, y es que era inevitable, estaba profundamente enamorada de él. Tocando la guitarra y cantando me relajaba, por lo que luego de un rato, ya estaba dormida.
~~~~~~o~~~~~~
Ha pasado una semana desde esa tarde, mi madre me contó que estaba conociendo a un hombre, su nombre era...Josh. Me dijo que sólo estaban saliendo, no era nada muy serio aún. Hoy sábado, nuevamente estoy sola en casa, ella salió con Josh a una nueva cita. De pronto, sonó el timbre de la casa, sin más opción, fui a abrir.
-Li-Liam...-Dije nerviosa y sorprendida al verlo parado frente a mí.
-(Tn)...
-¿Qué haces aquí?.-Le dije intrigada.
-(Tn)...Tengo algo que decirte.
-Dilo rápido, no tengo mucho tiempo.-Soy muy orgullosa, por mucho que lo amara, él me hizo daño y no lo trataría con las mejores palabras.
-¿Estás ocupada?
-Si.-Mentí.
-Entonces lo diré rápido.
-Ok...Espero.
-Mira (Tn), entiendo perfectamente tu enojo, ninguna mujer del mundo merece lo que te hice, pero quiero que sepas que estoy inmensamente arrepentido. Y por culpa de una estúpida apuesta que hice, te perdí. Entiendo tu odio hacia mí, lo que te hice fue una estupidez, pero yo no puedo vivir tranquilo desde ese día, necesito que me perdones, porque ese día tu no quisiste oír todo lo que te tenía que decir, pero la verdad es que mientras yo cumplía esa apuesta, me enamoré en serio de ti. Perdí a la mujer que amo y me siento culpable y estúpido por haber echo que ella sufriera, yo sé que no soy nadie como para pedirte una disculpa, entiendo que pienses que no la merezco, pero si es que en algún momento tienes tiempo, por favor, piénsalo...
-Liam yo...no sé que decirte...
-No digas nada, no hace falta ahora, sólo te pido que lo pienses...
Estábamos muy cerca, nuestras respiraciones se mezclaban...