- ¡Está abierto! –gritó desde su habitación mientras se abotonaba su camisa.
- Llegué –un nuevo grito invadió el lugar, esta vez proveniente de Zayn.
- ¡No me digas! –ironizó.
Se dirigió a la sala y halló a su amigo hurgando en el refrigerador con demasiada comodidad.
Zayn le dedicó una falsa sonrisa en respuesta a su chiste antes de voltear nuevamente en busca de alimentos.
- Hay pizza en el horno –ofreció, dejándose caer sobre el sillón.
- Se siente genial –gruñó Zayn tomando asiento junto a él con la rectangular caja en su regazo-. Odio dar clases de apoyo los sábados, no he comido nada en toda la tarde.
Se le quedó mirando maravillado por la velocidad y brutalidad con la que devoraba a una indefensa porción de pizza. Su amigo siempre había aparentado finura y elegancia.
- Te falta algo –puntualizó dubitativo, dispuesto a burlarse de él-. Oh sí, tu pequeña garrapata rubia.
Zayn le enseñó su dedo medio.
- No diré nada porque realmente es grato verte de buen humor. ¿Qué hay de Liam? -preguntó con la boca llena.
- Está en camino –agradeció el cambio de tema con todo su pequeño y estropeado corazón.
Se dirigió a la cocina en busca de dos botellas de cerveza y regresó justo a tiempo para ver a su amigo lamerse los dedos al mismo tiempo que maniobraba para recoger el celular que sonaba en alguna parte de su cuerpo.
Soltó una dramática queja ante lo asqueroso que estaba siendo Zayn.
Su amigo sonrió victorioso al leer la pantalla de su móvil.
- Mi pequeña garrapata –explicó sin darle lugar a contestar.
Louis destapó su cerveza y bebió con ganas. Era sábado, se hallaba libre de trabajo y pensaba beber la cantidad necesaria de alcohol que le permitiera dormir por lo menos hasta la tarde del domingo. Deseaba levantarse feliz, sin recuerdos tortuosos atormentándolo.
Zayn frunció el ceño y por su tono de voz supo que algo no andaba bien.
Después de tres palabras empalagosas y patéticos diez te amo, colgó. Luego se desplomó sin ánimos sobre el sillón.
- Déjame adivinar, no vendrá –lo vio negar entre frustrado y... ¿Deprimido?-. ¿Encontró algún otro perro?
Un nuevo dedo medio se alzó hacia él. No pudo evitar reírse.
- Harry ha tenido otra de sus crisis, no quiere dejarlo solo.
De repente dejó de reír. No oía del rizado hace cuatro semanas, exactamente desde la última vez que lo vio.
- ¿Otra? –fue todo lo que pudo pronunciar.
- ¿No ríes ahora? -Zayn no dio lugar a respuesta y continúo hablando por el bien de su propia integridad-. Ha tenido varias desde hace un tiempo. Lo sabrías si hubieses estado presente en lugar de excluirte.
No le haría caso a sus indirectas, realmente no lo haría.
- ¿A qué te refieres con crisis, exactamente?
- No lo sé, Niall no ha especificado sobre eso. Simplemente mencionó que le lleva tiempo calmarlo.
- ¿Por qué no me has dicho sobre esto?
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Client | L.S
FanficÉl, nunca pensó que alguien pudiera enamorarse de él. Él, jamás creyó posible ser cliente de uno de sus alumnos universitarios. El destino juega malas pasadas y el mundo nunca fue tan pequeño.
