Amor En Silencio

Nuestra primer cita

Estaba tan emocionada y ansiosa por que llegara el sábado para poder verlo, no habíamos tenido clases desde el miércoles por los festejos del día de muertos y el viernes fui junto con las chicas al desfile de catrinas que se realiza en el centro de la ciudad, todas guardábamos la esperanza de ver a nuestros chicos, pero de ellos ni sus luces, ya había acabado el desfile y nos dirigiamos donde la cafetería de Paquito (un amigo nuestro) cuando del otro lado de la acera vi a Javier con Laura, las dos personas que mas me caían mal en el mundo.

Laura se retorcía como lombriz y se le pegaba como sanguijuela, se reía forzadamente a todo pulmón y gritaba con esa voz chillona. Cuando él se dio cuenta que los veía me hizo un gesto con la cara en modo de saludo y yo le respondí con una media sonrisa.
Las chicas se percataron de lo que sucedía y preguntaron por que me saludaba si nunca lo había hecho antes.

-Tal vez Quique ya le dijo que saldremos este sábado y seguro le dijo que se porte bien conmigo- Dios! que bien se sentía decir eso, todavía no podía creer que fuera a salir con él.

Entramos riendo por lo sucedido a la cafetería y nos encontramos con Ed, el chico que le gusta a Pau, así que tratamos de sentarnos lo mas cerca posible. Estaba con su hermano y un amigo y cuando nos vio pasar nos sonrío y se paro de su asiento para saludar a Pau de beso y después a nosotras, era obvio que ahí había algo.

Estuvimos ahí cerca de dos horas y todo ese tiempo Ed volteaba a cada rato para ver a Pau y nosotras solo reíamos. Cuando ya nos estábamos yendo Ed nos alcanzo en la puerta y le hablo a Pau, así que para no hacer mal tercio salimos y nos mantuvimos algo alejadas de ellos. Pasaron unos minutos y Pau fue corriendo hacia nosotras y nos dijo emisonada que Ed la había invitado a dar un paseo.

-Disculpenme que las deje solas chicas- nos dijo conteniendo su alegría, nos dimos un fuerte abrazo y nos despedimos de ella deseándole suerte.

Sara y yo caminamos por las tiendas viendo aparadores y platicando sobre nuestros amores. Entonces ella me contó que Gabriel la había besado en la fiesta.

-¿Que? ¿Por que no nos habías dicho eso?

-No lo se, no estaba segura. Es que no lo se, no quiero darle demasiada importancia por que él ya estaba medio borracho, entonces...ya sabes.

-Bueno, pero no estaba tan borracho como para no acordarse o si? Además tu y él participaran en la obra de teatro así que podrás pasar tiempo de calidad con él y descubrir que intenciones tiene.

-Es verdad, si...¡Yyyyyy tu mañana sales con Quique!, que emoción- grito tomandame las manos y saltando.
Parecíamos locas, estábamos en nuestro ritual cuando oímos la voz de su mamá.

Eran sus padres y su hermanito, iban a ir a cenar y me invitaron pero tuve que decir que no, tenia que ir a comprar unas cosas así que me despedí de ellos y me encontré sola caminando por el centro.

Iba a comprarme un lábil que combinara con la ropa que usaría para la cita con Quique, entré a una tienda y termine comprando mas que un labial, al salir de ahí camine lento hasta llegar a la esquina y me detuve a ver mi teléfono cuando alguien atrás de mi habló...

-Pero que lenta eres, con razón llegas tarde a las clases.

Cuando me voltee, mi cara quedo a escasos centímetros de la de Javier. No supe como reaccionar, sólo me quede pasmada mirándolo sonrojada y él se dio cuenta de mi nerviosismo y solo sonrió y se alejó mirando al suelo.

Me voltee en seguida, no tenía intención de hablarle y lo que había echó me había caído mal. Aturdida cruce la calle como bólido ganándole el paso a un auto y camine a toda prisa, mire atrás solo por curiosidad y lo vi caminando concienzudamente tras de mí. Cuando llegue a la estación pensé que me había librado de él, pero estaba muy equivocada, al poco rato llegó muy sereno y sonriente.