Vino el amor |Zerrie|

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-¿Que?- Pregunté a punto de reírme. -¿Estás bromeando cierto?-

-No.- Negó acercándose a mi. Sacó una prueba de embarazo mostrándome que si era positiva.

-Felicidades por ti.- Me alejé.

-Felicidades por los dos, este bebé también es tuyo.-

-¿Esperas a que te crea?- Me crucé de brazos. -Hacen meses que no te toco, desde..- Me interrumpió.

-Desde que estás con esa puta.-

La tomé de los brazos bruscamente.

-Cállate y respétala.-

-¡Suéltame oye!- Se zafó de mi agarre. -Escúchame bien Zayn, nunca te daré el divorcio. Menos ahora que tendré un bebé. Prometiste estar toda tu vida junto a mi, así que ahora cumplirás.-

Dicho esto salió dando un portazo.

-¡Maldita seas Gigi!-

(...)

-Iker no.- Negué por quinta vez. -Por favor no tomes los papeles de mamá.-

Cada vez era más complicado, tener a Iker al lado mío, en el escritorio o en cualquier parte, era muy complicado, igual que su padre.

-Ya llegue.- Avisó Liam. -He venido a ayudarte.- Rió y sonrió.

-Por fin Liam.- Le entregué a Iker. -De verdad no puedo hacer tantas cosas con Iker a mi lado.-

-Ya tranquila, iré a dormirlo.-

-Gracias.-

Respiré profundamente y luego me senté en la gran silla. En eso entra mi nana con un café, sonreí en forma de agradecimiento y ésta salió.

Una hora después, las cinco de la tarde. No sabía nada de Zayn, ¿ocurrirá algo?

-Pase.- Dije al escuchar como tocaban la puerta.

-Mi niña.-

-¿Si?- Le sonreí.

-La buscan.-

Fruncí el ceño por confusión.

-¿Quién?-

-Yo.- Sonrió entrando descaradamente.

-Está bien nana, te puedes retirar.- Asintió y salió. -¿Que quieres Gigi?-

-¿No te cansas de ser la otra?- Sonrió. -Yo, en tu caso estaría avergonzada de ser la amante de un hombre.-

-¿Avergonzada? ¿Tu?- Reí. -Por Dios.- Arreglé mi cabello. -Supongo que viniste aquí por algo más, no creo que hayas venido solo a decirme esto.-

-No.- Negó sonriendo. -Quería preguntarte cómo es la vida de una mujer joven y madre.-

-¿Para que quieres saber eso?- Pregunté sin entender.

-¿No te ha contado Zayn?- Soltó sonriendo. -No puede ser que no te haya dicho nada.- Rió.

-¿Decirme que?-

-Que vamos a tener un bebé.-

-¿Que?- Pregunté sin entender.

¿Cómo es que esta embaraza si Zayn no ha estado con ella? ¿O si?

-Lo que escuchaste. Ahora, ¿me dirás?-

-Lárgate de mi casa.-

Ella sonrió triunfante y asintió.

-Muy bien.- Se puso de pie. -Si ves a mi esposo por favor dile que mi bebé y yo lo esperamos en casa.- Tomó la manilla, abrió la puerta y antes de salir habló. -Si eres un poquito consciente dejarás que Zayn y yo estemos juntos como siempre debió ser. No me va a importar atentar contra mi vida o la de mi bebé para que el este conmigo.-

Ella salió del despacho dejándome con miles de miedos. ¿De verdad atentaría contra su vida o la de su bebé?

(...)

Era muy noche, debía de ir a ver a Perrie. Toqué la puerta y su nana me abrió. Subí las escaleras, entré a su habitación ahí estaba ella. En el balcón de su habitación viendo las luces de las casa prendidas y el viento golpear su rostro.

-Mi amor.- La abracé por la cintura para después depositar un beso en su mejilla. -Te extrañé mucho.-

Ella se zafó y entró. ¿Que le pasaba?

-¿Supongo que debo creerte no?- Soltó enojada. -¿Cuando pensabas decirme que Gigi estaba embarazada?-

Cerré los ojos y negué.

-Me enteré hacen horas.- La miré. -¿Como te enteraste?-

-Tu mujer se encargó de restregármelo en la cara.-

-Yo no estoy seguro de que sea mío.-

-Por Dios Zayn, es tu esposa.- Se sentó en la cama.

-Claro y yo soy su esposo. Pero eso no significa nada. Estoy contigo, no con ella, tengo un hijo contigo no con ella.-

-Pero lo tendrás.- Pronunció triste.

-Prometo hacer todo lo posible por saber si es mi hijo o no.- Me senté a su lado.

-Y si es tu hijo, ¿que pasara con nosotros?-

-Seguiremos igual, yo te amo y siempre estaremos juntos.-

Ella se puso de pie negando.

-Si ese bebé es tu hijo..- Limpió sus lágrimas. -Tu y yo no volveremos a vernos.-

-¿Que?- Fruncí mi ceño.

-Si es tu bebé tu y yo terminaremos definitivamente.-