JUNTOS

NOS VAMOS DE BODA (CAPITULO .37.)

(CONTADO POR EMMA)

· No deberíamos ir – ME DIJO KILLIAN -

· Claro que debemos ir.

· No, en primer lugar, tú aún no estás del todo recuperada y en segundo lugar...

· No hay ni primer lugar, ni segundo.

· Emma...

· Killian, Leroy es nuestro amigo, se va a casar y vamos a ir.

· Pero si ese enano no nos ha facilitado nada las cosas, siempre con sus exigencias, con sus protestas y con sus cosas.

· Killian, él no se echó para atrás cuando tuvisteis que ir a buscarme por convertirme en el Ser Oscuro.

· Amor, él se apuntó porque estaba cansado de quedarse al margen.

· Aun así, Killian, Leroy se merece que estemos allí y Nova también.

· Tú no conociste a Nova.

· Ella se ha portado muy bien conmigo desde que llegue a este pueblo y se va a casar así que vamos a ir porque además puedes aprovechar para verme en vestido.

· Prefiero verte sin él.

· Killian, llevó demasiados días sin salir.

· Has salido al jardín.

· Killian...

· Emma.

· Quiero ir a la boda, quiero sentirme normal, necesito... - LE DIJE EMPEZANDO A LLORAR –

· ¡¡¡EEHHHH!!!, Amor, tranquila, iremos a la boda, tranquila...

· Siempre estuve a mi aire, nadie me cuidaba y ahora todos estáis al pendiente de mi y yo lo único que quiero es salir, aunque sea un rato.

· Saldremos, tranquila, venga amor, ponte ese vestido y deja de llorar, quiero verte hermosa.

· ¿Hermosa?, Killian no estoy hermosa, estoy engordando por días y estoy irritable...

· Estás preciosa así que ahora ponte ese vestido que te trajo tu madre, voy a darme una ducha y me pondré mi traje... tenemos una boda a la que asistir.

Mientras Killian se duchaba yo me puse las medias y el vestido color rojo, era de terciopelo, manga larga y justo debajo del pecho iba adornado con un lazo negro atado en la espalda; aunque ya no usaba muletas para andar aún tenía resentida la cadera así que por recomendaciones de Whale usaría zapatos sin tacón, una vez vestida me senté frente al espejo, solté mi pelo el cual quedó ondulado y tras maquillarme me coloqué una fina diadema de pedrería verde, al salir Killian me miró y me dijo:

· Tenías razón, me encanta verte con vestido.

· La barriguita se nota un poco.

· Emma estás preciosa y me encanta esa barriguita que hace que se levante un poco el vestido.

· ¿Te gusta en serio?

· Estás preciosa y en serio ya te lo dije en Boston, tienes unas preciosas piernas para lucirlas.

· Creo que mi madre no me tomó bien las medidas porque lo veo corto para Storybrooke.