JUNTOS

ES LO QUE PENSABA (CAPITULO .42.)

(CONTADO POR KILLIAN)

Tenía una niña pequeña en brazos y a otro agarrado a mi pierna, nunca le había tenido que dar seguridad a nadie, mi tripulación nunca se había quejado y si yo decía vamos ellos iban sin pedir seguridad, pero ahora Roland estaba aterrado y la pequeña Robin también estaba demasiado inquieta.

· Mamá, ¿Con qué soñabas? – LE PREGUNTÓ HENRY –

· Fue un extraño sueño, estaba en el bosque encantado, justo antes del primer maleficio, todo estaba como lo recuerdo, de golpe cerraba de nuevo los ojos y aparecía en mi antiguo dormitorio, allí me encontré con Campanilla, estuve hablando con ella...

· ¿Qué te dijo esa hadita? – LE PREGUNTÉ –

· Me dijo que tenía otra oportunidad.

· ¿Para qué? – LE PREGUNTÓ EMMA –

· No lo sé porque ella desapareció para que de la nada apareciese la Reina Malvada.

· Ósea, tú – LE DIJE –

· No, yo no soy la Reina Malvada, nosotros nos separamos hace tiempo – ME CONTESTÓ –

· Está bien – DIJE –

· Ella al igual que Campanilla, me dijo que aprovechase la oportunidad y que la magia blanca y pura podría ayudarme.

· No lo entiendo – LE DIJO EMMA –

· Yo tampoco porque me dijo que ella estaba haciendo todo lo que podía pero que la tenía que ayudar.

· ¿Ayudar a qué?

· No lo sé, pero era extraño, porque no sentí a mi otra mitad ni a Campanilla.

· ¿A quién sentías hermana? – PREGUNTÓ ZELENA ENTRANDO CON UNA BANDEJA LLENA DE TAZAS Y UNA TETERA –

· A Robin – LE CONTESTÓ REGINA –

· ¿A mi hija?, ¿Y por qué sentías a mi hija?

· A la niña no, al que sentía era a Robin Hood, mi Robin.

· Es lo que pensaba – DIJO EMMA –

· Mamá cálmate – LE DIJO HENRY AGARRANDO SU MANO Y HACIENDO QUE FUERA EL TIEMPO MEJORASE –

· Regina tienes que superar lo de Robin Hood – LE DIJO ZELENA –

· Pensé que lo había hecho.

· Regina en el barco aquella vez también soñaste con Robin y casi haces que mi navío se hunda y ahora que lo has vuelto hacer estas a punto de destruir esta casa.

· Tienen razón – DIJO REGINA LEVANTÁNDOSE DEL SILLÓN DONDE ESTABA SENTADA Y HACIÉNDOSE CONSIGO MISMA –

· Eso es mamá – DIJO HENRY –

· Tengo que ir a mi cripta.

· ¿Ahora? – LE PREGUNTÓ EMMA –

· Mejor te calmas y vas mañana, yo te puedo acompañar.

· Zelena lo hará – DIJE MIRANDO A EMMA –

· Puedo ir sola, además Emma, no te conviene estar delante de la magia.