ESTOCOLMO©

Capítulo 13

Christopher
Hoy era el día, tendría que escapar a Panamá.
Poncho salió ayer por la noche a Brasil, por lo que sé Anahi se fue con él, espero que ambos estén bien.

Lo más difícil para mí es dejar a Dulce, en este corto tiempo he comenzado a sentir algo por ella, por más que trate de negarlo.
Pero hoy la dejaré libre con todo el dolor de mi corazón, pero lo hago por su bien.

Mi nana Eva salió rumbo a Argentina y después la alcanzaré allá.

Llevaba mucho dinero en efectivo y cosas que necesitaré, no llevaba ropa ya que es mejor viajar ligero.

Los últimos días he recibido amenazas por parte de mi peor enemigo, mis pistoleros dicen que lo han visto a él y a sus compinches merodear por los alrededores de la casa. Por lo que tuve que apresurar mi fuga.
No tenía miedo por mí, sino porque dañaran a Dulce, me daba terror perderla.

Es desagradable saber que mi peor enemigo es también mi hermano mayor, el que se supone que debe protegerme y aconsejarme... él trata de matarme.

Nunca nos llevamos bien, pero él comenzó a odiarme cuando mi tío me nombro líder de ésta zona y a él no le dio nada, lo peor es que me culpa por la muerte de su novia y su hijo.
Ella era una chica muy linda pero nunca hablé con ella, yo no la maté, nunca dañaría a una mujer, mucho menos a un bebé, yo quería a ese pequeño aunque no lo conocía, yo era su tío.

Dulce
Llevábamos casi dos horas en la camioneta de Christopher, todo era carretera, árboles y autos, no sabía a donde nos dirigíamos. Él no quería decirme nada, desde que salimos de casa estaba muy serio, ni siquiera volteaba a verme.

De pronto reconocí la carretera, nos dirigíamos a San Francisco la ciudad donde vivía antes de que me secuestraran.

Dulce: ¿por qué vamos a San Francisco?- pregunté extrañada.

Chris: tengo que hacer algo- dijo serio con la vista fija al frente. Sabía que no me diría nada así que decidí no preguntar.

Minutos después se estacionó cerca de la casa de mi madre. Levantó los seguros de las puertas de la camioneta.

Chris: eres libre Dul, puedes irte- dijo con la vista baja, yo estaba impactada no sabía qué hacer.

Dulce: ¿por qué me dejas libre?- pregunté extrañada y con el corazón roto. Él volteo a verme.

Chris: porque tú querías ser libre- dijo triste.

Dulce: pero ahora no quiero dejarte Christopher- dije tomando su mano, mis ojos comenzaron a aguarse.

Chris: no puedes venir conmigo amor, hoy saldré de este horrible negocio, y será muy arriesgado. Es mejor que seas libre y te olvides de lo que pasó para que estés a salvo- dijo con los ojos cristalizados.

Dulce: no puedo, nunca podré olvidarte Uckerman- limpié mis lágrimas- no me importa el riesgo, yo quiero quedarme contigo- dije llorando y le sonreí.

Chris: te amo Dulce- dijo acariciando mi mejilla y pegando su frente a la mía- no quiero que te pase nada por mi culpa.

Dulce: entonces no sería tu culpa porque yo quiero correr ese riesgo para estar contigo. También te amo Christopher- dije sonriendo y nos besamos.

Se separó de mí y me sonrió, prendió la camioneta y le dio marcha.

Pasamos frente a mi casa y en ese momento mi madre salió de ella, la observé tristemente, seguramente es la última vez que la vería, una lágrima calló por mi mejilla.
Aunque la relación con ella no era para nada buena seguía siendo mi madre y la quería.

Christopher tomó mi mano, voltee a verlo y depositó un beso en el dorso de mi mano, sonreí.

Extrañaría a mi madre, San Francisco y las buenas personas que conocí aquí pero me esperaba un futuro con el hombre que amo.

anoniromo