El [otro ] hijo de mi padre. ©

No voy a dejarte ir Stilinski

           

¡Como pueden ver, tenemos nueva portada! Éste cambio se debe a la noticia que tengo para darles al final del capítulo. Que lo disfruten. Y no olviden decirme qué les parece el cambio ♥

El sheriff se encontraba en la cocina preparándose el desayuno mientras pensaba en Stiles, era la segunda mañana sin saber nada de él y su paciencia comenzaba a acabarse. ¿Cómo pudo haberse ido así, sin más? Cada uno de sus pensamientos era dirigido a Derek, no le contestaba las llamadas y los mensajes tampoco y no había forma de que pudiera averiguar si Stiles había llegado a salvo. Observó el sándwich con mantequilla en medio y suspiró.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por los pasos de Talía quien se acababa de levantar. Le abrazó por la espalda y besó su hombro con cariño.

-Buenos días- saludó somnolienta.

-¿Qué tal dormiste?- le pregunto volteando y dándole un beso en la frente. Ella se alejó hacia la cafetera y se sirvió una taza mientras sonreía.

-Mejor que en los últimos quince días- le aseguró. Noah suspiró no pudiendo estar de acuerdo, desde que Stiles se fue no ha podido conciliar el sueño –Él está bien- dijo ella arrastrándole fuera de sus pensamientos de nuevo –Está con Derek- le aseguró.

-Es lo que me preocupa...-murmuró sentándose y tomando el periódico, era lo único que podía hacerle despejar la mente un rato. Ella se sentó frente a él con el teléfono y se puso de nuevo en modo "intentar contactar con Derek"

Luego de un rato y haber acabado con el desayuno, el mayor se puso de pie dejando las cosas en el lavado y comenzó a limpiar, ella se acercó y le detuvo.

-Yo lo hago-

-No hace falta- murmuró él

-Tranquilo, ve a trabajar- le pidió de nuevo quitándole la esponja de la mano y él suspiró

-Stiles y yo...tenemos una regla- dijo suspirando –"Cada uno se encarga de su mierda" había dicho él- recordó riendo, Talía sonrió también sabiendo que sonaba exactamente a Stiles –Pero él no está ¿verdad?- le miró y ella le dio un beso en la mejilla

-Vamos, vete o llegarás tarde- le indicó metiéndose en su lugar y desplazándole hacia un lado. Noah le sonrió y le acarició el hombro, sobre el albornoz que llevaba antes de irse. 

Mientras conducía a la comisaría, cruzó frente a la casa de los Mahealani, los conocía demasiado bien ya. El menor estaba ayudando a su hermano a guardar unas maletas en la parte trasera de su camioneta mientras bromeaban.

No contuvo la curiosidad y estacionó a un par de casas, bajó y caminó de regreso.

-Chicos- dijo en modo de saludo. Ambos voltearon a verle y la sonrisa se les borró apenas viendo que se trataba de él.

-Sheriff- pronunció el mayor. Danny solo se cruzó de brazos sin pronunciar palabra.

-¿Mudanza?- preguntó intentando indagar. Darren observó sus maletas atrás y asintió.

-Voy a otra universidad- le dijo guardándose las manos en los bolsillos –Princeton- finalizó y el sheriff apretó la mandíbula -¿Su hijo ya ha decidió a dónde irá? Danny prefiere quedarse en Beacon Hills- le comentó y volvió a su tarea de guardar los bolsos que quedaban. Su hermano menor simplemente se dedicó a ayudarle sin hablar.

-Stiles...está indeciso aun, pero espero lo sepa pronto- contestó acercándose unos pasos -¿Por qué Princeton? Nueva Jersey queda lejos...- murmuró, Darren sonrió y asintió