HELADO de chocolate

Extra 1. puertas peligrosas.

Gerardo
Hora: 11:28 p.m.

-papá, mamá...tengo que hablar con ustedes.- exclame serio y con tono un poco seco...era hora de revelarse ante los grandes...

-espero que esta vez sea serio.-comentó frio mi padre.

-he estado en duda estos últimos meses...y he llegado a una respuesta...es algo complicada pero es la verdad y no puedo cambiarla.- dije tembloroso, mis manos y rodillas temblaban de terror. ¿cómo saber como reaccionarian? Mis padres son unos adultos conservadores...tener a un hijo...un hijo...como yo....seria una desonra para ellos...

-hijo, nos estas preocupando...¿pasa algo?-pregunto mi madre preocupada.

Di un pesado suspiro con fin de reunir fuerzas y dije-:soy gay.

Mi madre quedo en shock ante mi declaración...¿mi padre? El en un ataque de ira me dio un puñetazo en la cara con todas sus fuerzas. El hombre que me habia dado la vida en una noche se olvido que habia tenido un hijo; mi madre lloraba sin fin alguno...miraba esa laguna de tristeza en sus ojos al ver a su hijo partir de casa...mientras el hombre me echaba a la calle como si fuera su hija embarazada o algo así.

Mi jefe me dijo que no volviera a pisar sus tierras...lo cual no haré jamás, no pense que serían así de crueles...ser...asi no tiene nada de malo, no es una enfermedad...es tan estupido...

-bueno...debi imaginarlo, ahora en donde dormire...bueno,-suspire-la plaza es una opción. ¿Y quien sabe? Tal vez encontrarme a alguien creo que sera lo mejor ahora.-Exprese tratando de ser optimista.

Me dirigí a la plaza del centro, quería pensar bien sobre que habia hecho y pasado. Empecé a caminar sin rumbo...un joven de 22 años No hace mucho en estos años. ¿qué hago? Se supone que estudio...pero no tengo un trabajo de medio tiempo o algo asi...

Caminar seria la mejor opción ¿qué podría pasar?

Leonardo

-disculpe señor Joaquín...ya es tarde...yo me encargaré del papeleo.- digo mi secretaria después de una larga racha de papeleo en la empresa.

-tranquila Camila, puedo hacerlo. Tu ve a casa, tu tía ha de estar esperandote....mandale saludos de mi parte ¿qué te parece?-contesté de una manera dulce y con una sonrisa.

-señor, ya vamos a cerrar.-dijo el intendente encargado de la limpieza.

-okey okey...Camila, vamonos.-le ordene a mi secretaria.

Tras caminar hacia el elevador de la oficina presidencial y bajar al primer piso me despedí de mi secretaria Camila y me dirigí a la calle. Era una linda noche y decidi dejar el auto en el estacionamiento...despues de todo es mi empresa...es mi segundo hogar. uwu

Mientras iba caminando por la plaza central de la ciudad mire algo peculiar. Era...¿mi ex compañero de la preparatoria? ¿Pesci? ¿p-pesci? Joder...esto no me lo esperaba.

-¡¿P-Pesci?!-grite algo tartamudo al ver a un viejo amigo.

Inmediatamente él voltio a verme y me saludó, miraba como se levantaba de aquella banca y se acercaba lentamente a mi. Paso a paso.

-Hola Hirochito.- respondió a mi llamado cuando llegó hacia mi. Me abrazo hombro derecho y acercó mi cabeza a su cuello. Tenía que ser Gerardo.

-que onda, que pez.-respondí jugando con mi lengua simulando tocar su cuello.

-¿cómo te ha ido en la vida?-pregunto Pesci mientras me llevaba prácticamente arrastrando y guiandome por no se donde.

-weeeeey, sueltame, me tengo que ir a mi casa.-le dije tratando de quitarme su brazo de mi hombro.

Miraba a mi ex compañero de clase con una mirada algo triste, me preocupaba un poco...

-¿pasa algo?-le pregunté viéndolo a los ojos.

El chico alto me vio y en seguida respondio-:si...

Me preocupaba el hombre a lado mio...¿qué le habría pasado?

-wey...me corrieron de mi casa...-dijo con un tono bastante triste y melancólico.

-¡¿t-te que?!-estaba desconcertado...la relación con sus padres era buena...¿correrlo de su casa?-¿p-por Que?

-estoy...en una etapa de duda..y mis padres no supieron reaccionar, es lo único que te digo.-respondió con ese tono de indiferencia de diario.

-ay...bueno...mi departamento no es tan grande pero...si quieres puedes pasar la noche ahí, viejo. Además uff...tengo que ducharme, estoy algo cansado, y apuesto que tu igual, equis de.-respondí tratando de calmar la situación.

[...]

***
Narrador por excelencia
Hora: 11:46 p.m.

Habían llegado al departamento del presidente, Leonardo. El salseo...estaba por aparecer...

-Gerardo, espera en la sala, me siento bien puto sucio, wey. Me voy a bañar, puedes prender la tele o no sé. -sugirió Leonardo, el joven de baja estatura con tes morena.

-claro.-respondió Gerardo, el chico alto con el cabello llegándole a los ojos con brackets.

-esto, ahorita vuelvo.-contesto el chico de tes morena.

Leonardo entro a su recámara y rápidamente se desvistio, poniéndose una toalla alrededor de la cadera para tapar la entre pierna y entro al baño de su habitación.

El agua estaba caliente, era relajante para nuestro personaje. Tardo alrededor de 10 minutos bañarse...pero algo andaba mal...

Antes de que Leonardo terminará de ducharse, Gerardo entro a la recámara y se sentó en la suave cama del chico en la regadera. ¿sus intenciones? Simples, esperaba a que el chico de baja estatura saliera y...sacarse de una ves por todas la duda que hizo el problema en casa más grande. Gerardo no quería a Leonardo...lo deseaba fisicamente...anelaba su cuerpo....por muy enfermo que sonara...era lo que sentía, contenerse ya no era una opcion...era ahora o nunca.

Nuestro personaje moreno termino la ducha..era hora de salir después de que el baño se hiciera un sauna...Leonardo tenía la piel mojada, caliente, hidratada...violable...perfecta para pasear por ella durante lo que quedaba de la noche...y Gerardo lo sabia..

Leonardo suspiro y dijo con pesades:-listo...-mientras se ponía una toalla en la cabeza y la enrollaba, cabe recalcar que tenia nuevamente ma toalla en su cadera.

Gerardo lo vio y en cuestión de segundos un pequeño sonrojo apareció en sus mejillas. Susurrando expreso-:joder...

-qué verga. ¡¿wey que haces aqui?!-expresó Leonard o al darse cuenta de la presencia de su excompañero, tapándose el pecho y ajustándose bien la toalla en su cadera retrocedió un poco.

El chico alto de levanto y con rapides coloco al dueño del departamento entre la espada y la pared...nunca fue tan literal.

Leonardo tenia las mejillas rojas...sus músculos estaban nerviosos...estaba acorralado por su compañero...

-wey, ¿q-qué mamada estas haciendo?...-dijo tembloroso y rojo como un tomate Leonardo.

-intento sacarme de mi duda ¿deseas ayudarme?-dijo Pesci con una voz un poco enferma...y la cara pervertida...Leonardo estaba paralizado por el miedo.

Cayó la toalla en su cabeza y...

Continuará :^) en el siguiente xd