Hitsuyo [Se Va A Reescribir Por Completo ]

Capitulo 3: Lo mas negociable en un trato es tu vida

Unas horas más tarde de que los otros dos se fueran, Izu arribo a la cueva Dakum,  pensando "Hitsu... Ahhh... Nee... Ahhh... Tomare sus ojos los meteré en un frasco y lo batiré para hacer sopa con ellos..." moviendo las manos de bulto mientras lo pensaba. Entró a la cueva distraída y cuando levanto la mirada se sorprendió a ver a tremendo monstruo casi frente a ella, respirando casi el mismo aire, pero no se quedo paralizada, al instante reacciono y esquivo el ataque del Dakum. Izu corrió terminando en una habitación tipo oriental y se escondió en un armario, algo confundida por el hecho de que haya una habitación en medio de una cueva. Al oír que alguien entró a la habitación abrió un poco la puerta del armario y vio como el temible monstruo se transformaba en una frágil chica de cabello castaño oscuro que lloraba "mi tesoro, mi tesoro, se lo llevo".

Izu salió del armario inmediatamente y miro a la chica a los ojos y dijo ¡que tesoro!, mientras tomaba una posición segura cerca de la salida de la habitación a las espaldas de la chica, Izu podía parecer impulsiva pero tenía un escape asegurado. La chica no dijo una palabra y giro lentamente la cabeza se comenzando a mostrar su sonrisa aterradora a la confundida Izu.

Detrás de Izu ya se encontraba otro chico con espada en mano y amenazándola, eso no estaba previsto, Izu no iba a darse por vencida asi de fácil y comenzó a analizar la situación, para crear su ruta de escape: Una sola salida segura, un chico de veintitantos, cabello castaño oscuro, como de 1.80, y unos ojos azules que envenenaban al verlo, que rayos piensas Izu concéntrate, tapa la entrada, la chica es ciega y más bajita que yo podré evitarla fácilmente sólo debo crear una distracción para que el chico se mueva. tomó la espada del chico y lo lanzó contra la chiqulla para que el chico se moviera a defenderla ...

Se abrió una puerta de una de las paredes y de ella apareció otro hombre, este ya le era familiar de su libro. Izu sabía que con los tres no podría luchar y terminaría como todos los cadáveres de la cueva. No le quedó otra solución más que soltar la espada y negociar.

-yo pue-puedo ayudar a recuperar su tesoro, yo también buscó al chico que s-se lo llevo, y-yo puedo rastrearlo facilmente.-dijo Izu intentando no mostrar el verdadero miedo que sentia-

-Por Qué deberíamos creerte niña?!. -Replicó el Dakum más conocido, Monsuta, a quien Izu había reconocido por las viejas historias de guerra que había en el libro de su madre-.

-porqué pues... Él se llevó algo mío también...

- Y qué?  Acaso es algo importante?! Si solo tonterías de humanos?! -gritoneo Monsuta-

-Mi hitsuyo!!!-Interrupio molesta Izu-

-¡¿Qué clase de humana común tiene un hitsuyo?! Seguro que lo robaste tú también...

Pero antes de que Monsuta pudiera terminar de juzgar a Izu el chico de ojos azules lo interrumpió.

- Está bien que nos ayude, si ella puede rastrearlo rápido está bien. - el chico voltea a ver a Izu, e Izu asiente-

Monsuta mira molesto a el chico, pero a este no parece importarle, aun así lo hace salir para no seguir discutiendo frente a la extraña, y le dice a Meido que la vigile. Izu se a quedado sola con la chica, y esta se acerca con un tanto de curiosidad a Izu.

-Parece que ahora seras parte del grupo humanita, yo soy Meido, si me tratas bien no te comeré, y tú?  solo eres la chica que sabe defenderse de un Dakum ciego. - dice la chica con cara burlona-

-Yo soy Izu, Izu Saisho, y si! se defenderme de los Dakum, incluso ciegos -dándole la espalda a Meido-"que molesta es" -pensó-

Han pasado varias horas desde que se han quedado solas a la espera de una respuesta, Meido sigue burlándose de Izu en una esquina pensando que la señala, pero en realidad Izu es la que se burla de ella, ya que Meido se burla de la pared. Izu toma una tetera del suelo, para preparar té de una planta medicinal que carga en la bolsa de su suéter escolar, la panta es originaria de su lugar de nacimiento. Como la planta cura casi todo, Izu creyó que ayudaría a la ceguera de Meido, y le tendrían más confianza, habiendo menos peligro de que la devorarán o la atravesarán con una espada. Para darle el té a Meido decide conseguir su confianza así  lo beberá por las buenas.Izu habla con sutilidad, amabilidad y sumisión a Meido.

-Oye Mei, porque es tan importante tu "tesoro" tengo mucha curiosidad de saberlo, y así esforzarme todavía más en encontrarlo.

Meido responde un tanto indiferente y grosera

- Ya me imagino pequeños planes de hacerte mi "amiga" para que Monsuta no te mate y al final matarnos a todos con ese té asqueroso (en realidad el té huele muy bien) -Meido se tapa la nariz y hace una cara de asco-Pero, aun así te lo diré, ese "tesoro" nos mantiene sanos, jóvenes y beshos, bueno a Monsuta y a mi hermano  principalmente. Acaso crees que tengo tu edad niña nahhh, tengo 321 y pienso vivir mucho más devorando bobos humanitos como tú que se meten donde no los llaman!!! Y quiero que ellos hagan lo mismo.

-Izu ríe  burlonamente-Meido ummm creo que deberías destapar tu nariz tu "besha" cara está tomando un tono morado que no combina con tu ropa azul.

Meido cae al suelo desmayada por falta de oxígeno y burlarse del té de los demás. Izu aprovecha la situación actual, acuesta a Meido en la cama que se encuentra en la habitación y le da a beber el té mientras aun esta inconsciente, y soñando con borregas rosas. Izu está exhausta así que se sienta en un rincón de la habitación, comienza a pensar en todo lo qie le ha pasado hoy, cuando menos lo espera ya se ha quedado dormida.

Cuando los chicos vuelven de tener el más grande debate sobre humanos y talismanes y pollitos amarillos, digo, eso no. Ambos quedaron en acuerdo de que Izu los acompañaría solo lo necesario y luego se desharían de ella, sin dudarlo. Entran a la habitación y se dan cuenta de que las dos están profundamente dormidas, Monsuta lo ve demasiado sospechoso ya que Meido nunca confía en los extraños, pero lo pasa por alto pues el cansancio hace fallar su mente y su cuerpo, Monsuta y el chico se van  a dormir a otra habitación.