Hitsuyo [Se Va A Reescribir Por Completo ]

Capítulo 14: Aunque algo sea parte de ti no se quedará a tu lado siempre

Nee arrastraba salvajemente al ya aún más herido Hitsu, que dejaba a su paso un camino de sangre roja que comenzaba a tornarse morada, el solo miraba fijamente su pierna... Ni siquiera si se hubiera quedado a pelear, Imoku le hubiera hecho aquella herida, pero Nee? Si, con el pretexto de que dejará aquella tonta discusión, por una simple chica que no merece nada, que celos? No, claro que no, bueno nadie sabe que pasa realmente con un imnian cuando su Blainir deja de necesitarlo.

Al fin Hitsu entendía que era Nee, y se lo había hecho saber, "YA NO LA NECESITA" , lo que provocó que ahora el esté a punto de quedarse inconsistente por la pérdida de sangre... celos? Se sigue preguntando, o simple odio?

Mientras Hitsu yace inconciente, sigue recordando las palabras que salieron de la boca de Gure provocando este arranque de irá en su "amiga": Es solo una imniam, un ser creado a base de imaginación, sangre y un poco de poder de Blainir, un simple títere que sirvio como soldado en tiempos de guerra, no es real, y puedes deshacerte de ellos cuando no los necesites. Pero no fue lo que Gure dijo, eso Nee ya lo sabia, el punto critico fue cuando Hitsu que estaba tan molesto de que no lo hubiese dejado pelear que sin pensar le dijo, No te necesita ya.

Pasaron varias horas bajo aquel árbol, Hitsu inconsistente aun, y Nee amenazandolo ahora que podía ya que su querido Blainir jamás se enteraría. Algunas amenazas como Te dejaré aquí y los pinkieres devoran hasta tus huesos o Te lanzaré al río para que te ahogues y jamas despiertes, claro que no pasaron de amenazas.

Casi al atardecer y cuando los grillos comenzaron a tocar su canción, Hitsu despertó sin un rasguño, pero sus heridas físicas no le importaban, estaba molesto con Nee y no sólo por que lo saco de la pelea de su vida, más aún por que jamás le dijo lo que realmente era, le mintió toda su vida. Mi "amiga", claro que no, es solo una mentirosa, cómplice de mi madre que jamás necesecite.... O quizá si, pe-pero ahora ya no, nunca más.

Hitsu no decía una palabra sólo miraba con tristeza y los ojos llenos de lágrimas, aquel mítico atardecer entre montañas y pinos, que al tocar el bosque daba un tono rosado a la ligera niebla que tocaba las hojas de los arboles, parecía algodón de azúcar pensó Nee, claro que ella tampoco dijo nada, sabía que le había dado un golpe bajo literalmente a su amigo, por celos y miedo.

Que iba a pasar ahora, Hitsu miraba su querido mapa que lo había traído hasta aquí un tanto nostálgico, y Nee hacia una fogata a unos metros de Hitsu. Cada uno pensaba algo distinto al respecto; Hitsu pensaba en continuar solo, así evitando futuros incidentes como el de hace poco, el ya podía cuidarse sólo; Por su lado New creé que en cualquier momento Hitsu la perdonará y olvidará todo, tal como pasaba antes.

Las horas parecían ir lento, Hitsu no se movía ni emitía sonido alguno, Nee lo miraba triste y desconsolada como nunca, pero él no le prestaba atención. Hasta que del frío bosque comenzaron a oírse sonidos desconsertantes, parecía el llamado de un ave o tal vez el gruñido de un animal, o un poco de ambas. El punto es que, aquellos sonidos hicieron que la piel de Hitsu se erizara, de entre los árboles brillaban muchos ojos de un tono rosa brillante (muy parecido al modo autodefensa de Izu), Hitsu no se atrevía ni a mirarlos, eran pertubadores, pero a la vez hipnotizantes.

Nee se lanza a Hitsu abrazandolo y gritando:

-Nooooo!! No los veas Hitsu, te hipnotizaran para que vayas con ellos y devoren hasta tus huesitos.

-Dev-vorar-me? Hasta los huesitos? Qué?

-Sí, Hitsu, son pinkieres, los protectores de la casa Pinkusai, como los Pinkusai son en su mayoría pacífico, los pinkieres son los más peligrosos, aun mas que los Zhul, entiendes?