Al caminar por los pasillos de aquel lujoso lugar, la alarma de alerta en la cabeza de Lucy se encendio. ¿Qué no era ella la que quería independencia lejos de líos amorosos? Entonces, ¿porqué aún iba agarrada de la mano del último hombre en la tierra con el que debía acostarse?
Su respuesta vino con un dulce beso a medio pasillo; al sentir el varonil cuerpo de su jefe contra ella, simplemente se perdió en un mar de deseo. ¿Y quién creería que él besara tan bien? ¿Quién diría que la dominaría solo con rozar sus manos por su cíntura? ¿O qué se encendería más al sentir la dureza en la entrepierna de su jefe?
Y es que culpaba a lo cachonda que se sentía ese día. Esa es la única razón por la que decidio arreglarse mucho para la fiesta, de lo contrario solo hubiera planchado un poco su cabello y ya.
Natsu: Dime que esto no es un sueño...
Lucy: No creo que lo sea... por que esto se siente demasiado real...
Ella posó su mano en su prominente erección y en ese momento él sintió una deliciosa corriente eléctrica por todo su cuerpo. Necesitaba poseerla, necesitaba sentir la piel desnuda de su chica ideal, necesitaba escucharla decir su nombre cuando esta alcanzara el orgasmo, la necesitaba urgentemente.
Natsu: Debemos salir de aquí...
Ella solo asintió afirmativamente con su cabeza y se dejo de nuevo arrastrar por el pasillo. Pero a lo lejos otra pareja les seguía los pasos.
DíMaría: ¿No se supone que Pinky no había llegado ni a primera base con ella?
Brandish: Estan borrachos, seran capaces de todo... espero.
DíMaría: ¿Esperas?
Brandish: Sabes que él merece ser feliz, sacrificó mucho para que nadie se diera cuenta de que soy lesbiana cuando eramos adolescentes, ¿no crees que es lo menos que puedo hacer, desearle ser verdaderamente feliz?
DíMaría: Solo espero esta niña no se aproveche de él, como la loca de Flare.
Brandish: Eso espero también, no queremos repetir todo ese drama.
Cuando ambas vieron ya habían llegado al parqueo. Miraron a la empalagosa pareja entrar a la parte trasera del auto de Natsu y entendieron que en verdad estaban desesperados.
Brandish: Bueno, ya no hay de que preocuparse, al parecer lo haran en el auto y para cuando terminen ambos estaran muy concientes como para llegar a salvo a sus casas.
Sin más que decir, ambas regresaron a la fiesta. Mientrás en la camioneta del pelirosa, los nuevos amantes intentaban acomodarse en el asiento trasero del auto. No es que no tuvieran un lugar a donde ir pero su deseo era tal que ya no podían esperar más.
Natsu: Lástima que la fiesta fue en el hotel en donde trabajamos sino creeme que hubiera pagado por la mejor habitación para estar contigo esta noche.
Lucy: Y lástima que estamos muuuuy borrachos como para conducir...
La rubia lo besó apasionadamente. Él se sentía fuera de este mundo y más cuando ella se colocó sobre su regazo. Podía sentir la húmedad de la rubia contra su erección. Él en definitiva estaba en el cielo; todo gracias al dulce aroma del perfume que lo ha enloquecido desde que la conocio y el suave tacto de la piel blanquecina de Lucy.
Sus manos recorrían el glosorioso cuerpo de quien lo montaba, jadeando entre besos y pidiéndole al tiempo que se detuviera. Procedio a bajar la cremallera del vestido y conforme la tela se desprendía del cuerpo de su chica, sus labios iniciaban un recorrido de besos sobre aquella blanquecina piel.
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Quiero Ser El Padre (Historia Corta NaLu)
Fanfiction¿Qué harías si cuando por fín consigues estar con la chica de tus sueños, luego te marchas por cosa del trabajo y cuando regresas resulta que ella esta embarazada y para colmo te dice que no es tuyo? ¿Qué harías si el padre del bebé es un hijo de p...