Capítulo 14

27 0 0
                                    

- ¡Hola Pao! - saludó sonriente Louis.

- ¡Hola Louis! - sonrió mas que nunca Paola.

De verdad les había agradado.

- Hola - dijo Liam

¿Acaso me saludó a mi? Pensé que no me notaban.

- Hola, ¿Liam no?

- Si, por cierto, el es Harry. Harry, ellas son Paola y Mía.

- Hola Harry - saludó mi amiga.

- Hola chicas.

- Emh, Paola, ¿al final le comentaste a Mía lo que te dije?- parecía nervioso.

- ¿Cuál de las dos cosas que dijiste Liam? - preguntó Paola.

Por alguna razón el se sonrojó y yo no sabía por qué.

- Lo de esta tarde, Paola, lo de esta tarde.

No pude evitar sonreír ¡era gracioso! Parecía un tomate, por lo que solté una pequeña risita.

- Ahh, eh, no, supongo que... - dejó de hablar con Liam y me miró a mi - Beth, ¿quieres pasar una tarde con los chicos? Y conmigo claro.

¡¿Qué me estaba diciendo?! NO, CLARO QUE NO.

- ¿Qué? - me limité a decir.

No por favor, dime que es una broma, no quiero que piensen que los odio, pero tampoco quiero ir. NO ME CAEN, PARA NADA

- Emh, ¿podemos hablar? ¿A solas? - le pregunté.

- Eh, si, claro.

Nos alejamos un momento, muy lejos.

- Ahora que estamos solas ¿EN QUE ESTABAS PENSANDO? - dije abriendo mis ojos como platos.

- Bueno, lo que pensé fue, “¡Hey! Es una genial oportunidad para conocerlos mejor y pasar un rato todos juntos!

- Entonces ve tú, yo no quiero ir.

- ¿Que? ¿Por qué no? - preguntó decepsionada.

-  Al parecer tengo que recordártelo, no me caen, para nada.

- Si solo los conocieras - dijo en un susurro mientras miraba hacia otro lado.

- Lo siento, pero es en serio, no me agradan. Si queres ve tú.

- No, si no vas vos no voy yo.

- ¿QUÉ? ¿POR QUÉ NO? - Louis saltó de atrás de una planta.

¿Acaso nos estaba espiando?

- ¿Lou? ¿Qué haces acá? - preguntó Paola extrañada y un tanto divertida.

- Es que... ¡se me cayó un lápiz! - dijo nervioso.

Paola se cruzó de brazos y alzó una ceja - ¿En serio Louis? ¿En serio?

- ¿Te quiero?

Típico, ahora la convence.

- Mmh, está bien - sonrió ampliamente.

- ¿Entonces vienes?- le brillaban los ojos.

Yo creo que acá sobro.

- Si Mía acepta…

¡¿Por qué me metía a mi?! ¿Acaso no tiene dos piernas en perfectas condiciones para ir sola?

- ¿Porfis?- rogó Louis a mis pies con esa típica cara de perrito abandonado.

Éste chico me asustaba ¿O no? Bah, basta, estos chicos son buenos y si Paola esta feliz, yo también.

La esperanza es lo último que se pierde (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora