Terminan las clases y Rachel y yo nos dirigimos a tomar el transporte que nos llevaría de vuelta a nuestros hogares, y así fueron muchos de nuestros días muy cotidianos, realizando actividades antes de las clases tres veces por semana. Los otros dos días también llegaba temprano sólo a matar el tiempo, comprenderán que no me gustaba estar en casa y que me agrada más estar lejos de ella.
Me iba detrás de los edificios donde estaban las canchas de soccer y basquetbol más allá era como baldío, había una especie de cuartos pero que apenas se estaban construyendo, del lado contrario el estacionamiento de los profesores y administrativos.
Del lado izquierdo el edificio con algunos laboratorios, salones y regaderas. Una tarde noche saliendo de las clases me aventure a ir a esos mismos lugares, eran entre eso de las 18:00 horas ya estaba oscureciendo se percibía el olor a tabaco y también a hierba voy más abajo hasta llegar a la barda de 1.50 mts que dividía la cancha de soccer con la cancha de basquetbol, es ahí dónde se encuentran los chicos fumando hierba, inhalando thinner y fumando tabaco.
Me acerco a la bolita de personas y es ahí donde una chica del salón me reconoce y me dice ven aquí.
--¿Qué haces aquí chamaco? -¡Qué no te quieren en tu casa!
No, no me quieren.
--Ella sonríe. ¡Ah, eres un niño sin amor! Yo te daré amor.
No gracias, mejor que se pasen eso que están fumando.
--¡A huevo, a huevo! Dale las tres a mi amigo; Ya viste ese cabello, lo tiene hermoso todo chino. ¡Me encanta!
Me pasan el cigarrillo de hierba y fumé. ¡Wow. Esta muy buena! (Obvio no conocía mucho de eso en aquel entonces).
Veo a Rachel caminando. Parece que me están buscando. Ya me voy chicos.
Rachel le gritó.
--¡Bobo! Te estoy buscando desde hace un buen de rato. Creí que te habías ido sin mi, quedamos que eso no pasaría.
Aquí ando amiga. (Comencé a reír descontroladamente).
--Fumaste de eso ¿Verdad? ¡Ja ja ja! ¡No ma te pasas! ¿Qué se siente wey, wey? ¿Qué se siente?
Muy chido Rach, siento como si el piso fuera de otro material, algo muy blando. (Comencé a reír)
--Hay wey, ahora no se qué hacer contigo...
Avientame a la autopista wey. ¡Ja ja ja!
--Estás mal, amigo. Vámonos ya a la casa. Mira tus ojos. ( y comienza a reír también ella)
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Una tarde de Margaritas.
Teen FictionHistoria temática LGBTT, donde habla de la vida de un joven mexicano y de todo lo que le acontece en su vida desde el primer momento en que sale del closet frente a su familia y de la reacción que esta tiene hacia esta situación, padres, hermanos, a...