¿Felices los cuatro? (Sailor Moon)

Recorriendo la ciudad

En el balcón de su habitación Mina observaba el cielo estrellado, se encontraba sumergida en pensamientos cuando un beso en la mejilla la hizo volver a la realidad. 

-Hermanito ¡qué travieso eres! Me encontraba meditando sobre todo lo que ha sucedido y lo que está por venir. No sé como tomen las cosas Serena y su familia. Estoy tan ansiosa pero a la vez tengo mucho miedo. Son una familia increíble, y no quiero ser la causante de algún disturbio. ¿Qué hago Haru? 

-No llores preciosa, la decisión no la tomaras tú sola. Papá y yo siempre te apoyaremos. Así que seca esos bellos ojos y descansa. Mañana te llevaré a conocer los lugares más interesantes de la ciudad. 

Con un beso en la frente se despidió Haruka. Mina se quedó más tranquila y pudo conciliar el sueño.

A la mañana siguiente dos rubias se alistaban presurosas en sus respectivas residencias. Ya era la hora de comenzar el tour.

-Señorita Serena. Tiene visitas.

-Gracias nana Elena, pasaré todo el día con mi amiga, mis padres ya lo saben. No me esperen a comer. Nos vemos en la noche.

A toda prisa salió para reunirse con Mina. Luego de un afectuoso saludo subieron al auto de Haruka y comenzaron el recorrido. Primero fueron a desayunar, visitaron los parques principales de la capital, almorzaron, visitaron zoológicos y reservas naturales. Ya estaba por anochecer cuando decidieron ir a la Torre de Tokio, el mejor mirador para contemplar la ciudad. Mina estaba entusiasmada. Serena estaba un tanto nerviosa ya que Haruka no paraba de galantearla, no perdía ninguna ocasión y aprovechaba la mínima oportunidad de cortejarla. Para divertirse más fueron al parque de diversiones, Haruka hacia todo lo posible por mostrarse como un excelente caballero. Entraron a la casa del terror y aprovechó el pánico para mantener a Serena en sus brazos. Por ultimo fueron a cenar y entre risas y bromas se pasó la noche. Devolvieron a Serena a casa y en el trayecto de retorno Mina recibió una llamada.

-¡Aló! ¡Dar, eres tú! 

-Si soy yo. Por fin logré cumplir la semana de servicio comunitario. Estaré viajando a Tokio al mediodía.

-¡Qué emoción mi príncipe! te estaré esperando. Te extraño tanto.

-Yo también enana. Bueno te dejo tengo que presentar el informe. Hasta mañana. Descansa.

-Tú también descansa corazón, muero por verte.

-Wow hermanita, creo que me estoy atragantando con tanta miel. Pero que empalagosos son.

-Ya cállate Haruka, si no quieres que te enumere cada una de las meloserias que hiciste hoy por Serena.

A sus mentes vino el recuerdo de Serena, había momentos que no sabía que responder al apuesto rubio, los colores del arcoiris se le subían al rostro. Haruka ni corto ni perezoso tomaba la mano a Serena y depositaba cálidos besos en su dorso. Provocando más nervios en la rubia.

Mina comenzó a reír desenfrenadamente ante los recuerdos y la cara de borreguito que ponía su hermano; y de un momento a otro le dijo: -Espero que sepas lo que haces hermanito. Tú que tan indignado estabas cuando te conté que soy la enamorada de tu mejor amigo Darien, según tú por la diferencia de edades. Estás a punto de sucumbir con una menor de edad. Además te recuerdo que yo la protegeré con uñas y dientes, así se trate de mi propio hermano.  Por lo tanto hermanito. Aceptas mi relación y yo aceptaré y apoyaré la tuya. Ojalá todo quede en familia ¡mi propio hermano! ¡mi cuñado! ¡sería sorprendente!

-Tranquila diosa del amor. Serena es una encantadora niña, me gusta todo de ella. Su sencillez, ternura, timidez, es hermosa en todo aspecto y lo que me conmueve  más es su inocencia. No te imaginas todo lo que sería capaz de hacer por ella. Pero como te dije aún es una niña y yo soy un hombre con necesidades diferentes. La estaré esperando hasta que sea una mujer mientras tanto querida cupido tengo muchas amigas a las cuales complacer.

Mina quedó en shock ante lo dicho por su hermano.

-Además hermanita, si acepto tu relación con Darien es por que sé que tú lo presionaste para que sean enamorados, él es un tipo derecho y sé que no se sobrepasará contigo. 

Al llegar a casa se dieron un fuerte abrazo y subieron a sus respectivas habitaciones. 

Serena por su parte compartió con sus padres la gran aventura que vivió con Haruka y Minako, luego se fue a su dormitorio donde quedó profundamente dormida y un hermoso sueño la estremeció por completo...